¡Eres Ruidosa! [Killua Zoldyck x tu]

Capítulo treinta y uno

Pov. T/n

----- Capitulo Largo (Ya saben lo que se viene ( ͡° ͜ʖ ͡°) )

Abri los ojos abruptamente, lo cual fue un error, no fui capaz de soportar la luz casi al instante por lo que gruñí molesta.

—Agh, duele.

Mis manos se hicieron puños y frote mis ojos hasta que empezaran a llorar. Solo eso hizo que calmara el ardor.

Me reincorpore y mis manos tocaron un suave bulto, que, bajando la mirada me encontré con mi almohada favorita y no tarde en darme cuenta que estaba en mi cómoda cama.

¡Es verdad! Pedi que dejaran la consola en mi habitación, mierda. Estar aquí era más sencillo darme cuenta de lo difícil que fue dormir lejos de mi comoda cama. Pero fue terrible saber que estaba sobre mi intacta y limpia cama con la ropa sucia que estaba usando dentro del juego.

Me levante de mala gana y camine hacia la puerta para abrirla.

Ahora debia mandar a cambiar los edredones.

Usualmente soy desconcentrada, no pienso demasiado las cosas cuando no me interesan, pero cuando me doy cuenta que si es importante, es lo suficiente tarde como para hacer algo y enmendar el efecto. Como por ejemplo ahora, muchas cosas invadieron mi mente en segundos.

Las arañas a quienes por las hormonas y mi reciente encuentro con el que fue el amor de mi vida me hizo olvidar buscarlos y seguramente anden en el juego.

Chrollo, quien se quedo desprotegido por un maldito idiota que le puso un juramento y no tengo ni idea de donde se encuentra el o el chico. Ni siquiera se quién es.

Y también me preguntaba quién demonios cuido la mansión en nuestra ausencia.

La última podría obviarse el hecho que tuviéramos mayordomo y sirvientes, pero me preguntaba si realmente les interesábamos nosotros... joder.

Agite mi cabeza.

Por ahora lo único que necesitaba era un baño, una ducha con agua caliente y un jodido peine, nada mas.

Abrí la puerta con fuerza y di un respingo al notar que algunas sirvientas esperaban pacientes frente mi puerta.

—¡Ah!

—¡Es bueno que haya despertado señorita!—dijo alegre una sirviente castaña, sus ojos se achicaban de alegría mientras que otras dos sonreían amables.

—¿E-eh? Bueno, si, acabo de llegar.—me limite a decir.—¿Podrían prepararme un baño?

—¿Un baño?—todas me miraron espantadas ¿Tan mal estaba?—¡Más bien una intensa sesión de spa! —todas brincaron emocionadas mientras asentían.

Era buena idea, relajarme y echarme en una siesta mientras tomaba un baño... pero pensándolo bien, tenia muy poco tiempo si quería encontrarme con Killua... El hecho de que Fritz se quedara en el juego me afectaba en el contratiempo que ya no tendría teletransportación.