Mamá, me enamoré de un pandillero (Tokyo Revengers)

Capítulo 16: Yo te amaba

Capítulo dedicado a @kazeisk en tiktok, no sé su usuario de Wattpad. Muchas gracias por recomensar mi historia en el tis tos.

Capítulo 16: Yo te amaba

–¡________!– me desperté de golpe por el repentino grito, haciendo que mi nuca chocara con la nariz de alguien –Ahhh, ctm–

–Mikey– me paré preocupada a mirarlo –¿Estay bien?–

–Ooh, weona, que onda tu cabeza– se sacó las manos de la nariz –¿Me salió sangre?– le negué

–¿Qué wea queriai? Me asustaste–

–Te estamos esperando pa irnos, queremos llevarte a un lugar–

–¿A onde me van a llevar?– pregunté

–Es sorpresa, ven– me tomó la mano y me sacó de la sala, a duras penas pude agarrar mi mochila.

Llegamos a la salida y estaban todos los cabros, pero estaban vestidos raro. Traían unos pantalones negros con unas legras culias y una chawueta, era más bien como un oberol color negro con letras doradas, sí se veían bien. Yo me acerqué al Mitsuya quien me dio un beso en la mejilla y tomó mi mochila.

–Me costó despertarla weon, hasta me pegó– se quejó el Mikey mientras el Kenchin le ponía una chaqueta en los hombros, esta era más larga y tenía letras igual, pero decían algo diferente.

–Fue un accidente, weon llorón– le pegué una pata en el poto

–Ya vámonos, vamos a llegar tarde– dijo el Kenchin

–¿Pero a dónde vamos?– pregunté

–No comai ansias, weona– me dijo el Baji, yendo hacia su moto.

El Mitsuya tomó mi mano y fuimos a su moto, donde se subió y después me subí yo. Ya todos arriba de las motos, nos fuimos ¿A dónde? No sé.

Llegamos a un parque que estaba en un cerro, como el Santa Lucía la wea, y estaba lleno de weones en moto con el mismo oberol que traían los cabros.

–¡En 15 minutos empieza la reuión!– gritó el Draken.

Me bajé de la moto más confundida que la chucha, no tengo idea de qué wes estábamos haciendo aquí, parecía Feria Friki tan lleno de gente disfrazada.

–¿Te dije que te veis muy rica hoy día?– me dijo el Mitsuya, distrsyéndome de mis ideas culias locas

–Estoy con el uniforme del colegio, 0 estilo– me reí

–Pa mi te veis rica– me abrazó por la cintura –Siempre estay rica, te comería aquí mismo–

–Cómeme entonces– me mordí el labio, y el Mitsuya sólo rodó los ojos y me dio un beso, el cual correspondí.

Envolví mis brazos en su cuello en lo que el beso se volvía más intenso y él metía su lengua, a lo que yo sonreí.

–Espera, espera– me separé del beso –La pulenta tengo hambre... Me voy a comprar unas papas aquí al lao y vuelvo– le dije

–Ya, pero apurate sí– me dio un último beso y yo fui a comprarme unas papas.

Ya con mis papas en mano, me devolví, pero no había nadie. De una tomé el teléfono pa llamar al Mitsuya, pero había un mensaje de él.

"Fuimos antes. Sube las escaleras, estamos todxs arriba."

Me encogí de hombros y caminé hacia allá, pero antes de poder poner un pie en la primera escalera, dos weones, más altos que la chucha, me detuvieron.