Kim Taehyung, un alfa que decide alquilar un vientre en un centro clínico, para poder tener un cachorro.
Jeon Jungkook, un omega que alquila su vientre en un centro clínico, para así poder ganar el dinero que necesita para pagar sus deudas.
Ambos ac...
Una radiante sonrisa apareció en los labios del omega cuando abrió sus ojos, al darse la vuelta con mucho cuidado se dio cuenta que junto a él yacía dormido su alfa.
Jungkook sonrió aun más al recordar que hace una semana atrás su lindo alfa le había pedido matrimonio, ese día tuvo que peñizcarse varias veces para poder creer que eso no era un sueño, esa noche durmieron entre besos y abrazos. Al día siguiente luego de un delicioso desayuno preparado por ambos habían ido a nadar un poco en aquel lago que esta junto a la cabaña, su alfa lo había cargado para poder ayudarlo, claro que había alegado «No quiero que nada le suceda a mi omega ni a mi cachorrito» Jungkook murió de ternura, ese mismo día regresaron a casa donde los esperaban todos ansiosos por saber cuál había sido la respuesta del omega, recuerda el grito que todos soltaron cuando mostro su mano y el anillo descansaba en su dedo anular, todos lo abrazaron dándole las merecidas felicitaciones y también indicándole cuan ansiosos estaban por el día de la boda.
Volviendo a el presente, Jungkook con su dedo índice comenzó a acariciar suavemente el entrecejo de su pareja, sonrió al pensar que hasta durmiendo lo frunce un poco, con cuidado comenzó a trazar las tupidas cejas del alfa, siguió por las pestañas que descansaban en sus mejillas luego bajó a la nariz donde acarició ese pequeño lunar que tenia, por último pero no menos importante siguió con sus labios, eran finos y con un pequeño color rojizo en ellos además tenían la forma de un corazón, sonrió al sentir lo suave que eran. «Un Dios griego» pensó mientras sonreía.
Continuó por mucho más tiempo acariciando los labios hasta que una mano se posó sobre su cintura, los ojos de su alfa se abrieron dejando ver esos orbes color miel que tanto le gustaban, Jungkook se sonrojo furiosamente al haber sido descubierto infraganti.
—Bombón si quieres un beso puedes tomarlo cuando quieras —habló el alfa dejando escuchar su gruesa voz por haber estado durmiendo— No tienes que pedir permiso para tomarlo.
Jungkook con su rostro completamente sonrojado hasta las orejas asintió sonriendo levemente para así ocultar su rostro en el cuello del alfa mientras escuchaba la risita que el alfa soltaba por sus acciones y su repentina timidez.
—¿Tae? —habló el omega.
—Dime bombón —respondió el alfa acariciando con parsimonia la espalda del omega.
—Debemos ir a realizar las compras de navidad —habló sonriendo— Hablamos quedado en ir hoy juntos a comprar las cosas de la decoración de la casa y también para pasear un rato, falta una semana para que sea la celebración.
Taehyung sonrió al sentir el cálido aliento de su omega en su cuello, realmente le encantaba sentir la cercanía con su Jungkookie.
—Claro que si, bombón —sonrió— Pero primero esperemos unos minutos más, quedémonos así un poco más.
Jungkook sonrió mientras asentia con la cabeza para así aferrar sus brazos alrededor del torso del alfa, mientras que Taehyung se aferraba con cuidado a la cintura de su pequeño omega, ambos se relajaron por el calor corporal que sus cuerpos desprendían además de también tener sus aromas mezclarse de una manera única que solo a ellos los podía relajar en demasía.
Pronto ambos se quedaron dormidos en los brazos del contrario.
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