Parte 6

6.8K 871 473
                                    

— ¿Entonces la tienda está bien?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— ¿Entonces la tienda está bien?

Emma le pregunto a Shinichiro mientras desayunaban. Los hermanos Sano, se encontraban comiendo animadamente mientras su abuelo escuchaba las noticias en la vieja radio que tenían en la cocina.

— Si, aún no saben por qué sonó la alarma, Takeomi dijo que llamó a la policía, pero no encontraron nada—. Shinichiro le dió un rápido sorbo a su té verde para seguir hablando—. Dicen que lo más probable es que la alarma se haya activado sola.

Después de la escena que había armado Manjiro no dejando ir a Shinichiro, el Sano mayor se había mostrado más apegado a su hermano, sentía que debía darle la seguridad de que todo se encontraba bien. Le había desconcertado su reacción, como si temiera que le pasara algo al ir a la tienda de motocicletas para revisarla.

Su corazón se apretujo al recordar la carita de Manjiro empapada en lágrimas, mientras esté se encontraba dormido entre sus brazos aún aferrándose con fuerza a él, murmurando una y otra vez entre sueños que no lo dejará. Cuando Takeomi, Benkei y Wakasa llegaron al lugar, creyeron lo peor al ver la cara de angustia de Shinichiro con Manjiro entre sus brazos. Cuando su ex líder les contó la situación, no dudaron ni un segundo en ir a revisar la tienda de motocicletas, encontrándose con esta intacta y la escandalosa alarma aún sonando.

Mikey se sentía avergonzado al recordar la escena que había armado con su hermano, sin embargo, se sentía feliz al tenerlo a su lado, y agradecía a todos los dioses haberlo podido salvar. Su ánimo mejoró, y no es demás decir que incluso durmió como un bebé durante toda la noche, sin ninguna preocupación en lo absoluto.

Casi estaba completa su misión.

— Mikey, ¿no me quieres acompañar de nuevo al taller?—. Preguntó Shinichiro una vez volvió de la cocina después de dejar sus platos del desayuno limpios y secos en el mueble de la cocina.

El pequeño rubio le dió una gran mordida a su tostada, y contesto— Está vez pasaré Shin, quiero ir a ver a Kazu.

Shinichiro asintió con una suave sonrisa— Mándale saludos de mi parte, dile que puede venir cuando quiera. Siempre será bienvenido.

— Le diré Shin-nii, tu mándale saludos a Waka de mi parte también—. Comentó Mikey con una sonrisa traviesa en su rostro, haciendo entrecerrar sus ojos a Shinichiro en modo de advertencia.

Emma quien había estado atenta a la conversación de sus dos hermanos, se quedó en shock al notar, el aura cómplice entre ellos.— Espera, ¿Waka-chan y Shin-nii...?

— ¡N-no se de qué están hablando!—. El pelinegro al verse descubierto, optó por realizar su mejor táctica, huir— ¡Ya me voy se me hace tarde!

Sin dejar tiempo a que alguien más tratará de hablar, Shinichiro se apresuró a tomar su llavero y él bento que le había preparado Emma, se encaminó a pasos rápido a la puerta principal de la casa. Lo último que se escuchó de él, fue el sonido de su motocicleta alejándose.

Cambiando el pasado «Drakey»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora