𝑴𝒐𝒓𝒏𝒊𝒏𝒈𝒔𝒕𝒂𝒓 [𝑫𝒓𝒂𝒄𝒐 𝑴𝒂𝒍𝒇𝒐𝒚] +𝟏𝟖

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—¿Y bien? —pregunté enarcando una ceja.

—Bueno, lo que queríamos decirles es que ya tenemos fecha para la boda —yo frunci el ceño.

—¿En serio? —pregunto Mattheo y mi padre asintió.

—¿Y que deberíamos hacer con esa información? Por qué te digo desde ya que no planeo felicitarte padre —conteste.

—Ay, chicos, no sean así —se quejo mi papá.

—Bien, si tu eres feliz, está bien, pero no nos pidas más de lo que podemos aceptar —dijo Mattheo.

—Solo quiero su apoyo ¿Es mucho pedir? Son mis hijos por mi padre —se quejo mi papá.

—Ya te lo dijimos, si eres feliz, está bien, pero no nos pidas más de lo que podemos aceptar —repetí las palabras de Mattheo.

—Bien, como quieran —contestó mi padre y con Mattheo nos fuimos a mi habitación seguidos de Cedric y Draco.

—¿Seremos muy egoístas? —pregunto Mattheo sentándose en la cama y yo me senté a su lado.

—Un poco —dijo Cedric y lo fulmine con la mirada.

—No se tu, pero no quiero ser parte de eso, esta bien que sea feliz pero no me gusta esa detective, hay algo que no me agrada de ella —conté y me miró.

—¿Que cosa? —yo me negué.

—No me hagas caso —Mattheo suspiro.

Esa detective tenía algo, algo no encajaba en todo esto pero aún no sabía que era, solo tenía un presentimiento para nada bueno y siempre acierto en este tipo de cosas, espero equivocarme y solo sean mis suposiciones.

—Niños, hay alguien que quiere hablar con ustedes —mi padre entro un rato después.

—No queremos nada de esa detective —dijo Mattheo.

—No es ella —nosotros nos miramos curiosos y salimos de la habitación a la sala de estar.

—¿Que haces tu aquí? —inqueri.

—No me hables así —me regaño y solté una risa irónica— estoy aquí para hablar con ustedes.

—Yo no tengo nada que hablar contigo —estaba dispuesta a irme pero tomó mi brazo, yo la mire como si fuera el ser más insignificante del mundo y la aparte como si tuviera alguna enfermedad contagiosa—No te atrevas a tocarme, simple mortal —bufé y rodó los ojos.

—Hija... Por favor, solo unos minutos —yo suspiré— Hola, soy Helena, la madre... —yo la interrumpí con un gesto de mi mano.

—No tienes derecho de proclamarte como madre luego de lo que hiciste —bufé y suspiro.

—El es Draco, el novio de Dani y él es Cedric, mi novio —mi mamá lo miró raro.

—¿Tu novio? —Mattheo asintió— ¿Un chico?

—¿Algún problema? —pregunté y ella asintió.

—Es un hombre, no puede ser tu novio, es repulsivo y asqueroso —yo la interrumpí.

—Basta, di lo que tengas que decir y largate —la mire con repugnancia.

—Quiero arreglar todo con ustedes, son mis hijos y quiero que actúen como tal, quiero que se presenten en mi boda y me entreguen los anillos, quiero... —yo me reí sin gracia interrumpiendola.

—Por mi parte, no iré a ninguna boda —dije también refiriéndome a la de mi padre, este último lo noto y rodó los ojos— no planeo actuar ni ser tu hija, no quiero nada que tenga que ver contigo ¿Cuando lo comprenderás? Ah, lo siento, tu coeficiente intelectual no es tan alto como para entender palabras tan avanzadas —solté con burla.