𝑴𝒐𝒓𝒏𝒊𝒏𝒈𝒔𝒕𝒂𝒓 [𝑫𝒓𝒂𝒄𝒐 𝑴𝒂𝒍𝒇𝒐𝒚] +𝟏𝟖

𝑬𝑿𝑻𝑹𝑨 𝑷𝑨𝑹𝑻𝑬 𝑫𝑶𝑺

Draco.

—Los bebés tienen el cordón umbilical enrollado en el cuello, si puja pueden ahorcarse —dijo el Doctor al examinarla— tendremos que proceder a cesárea de urgencia.

—Espere, ¿Dos?, la matrona dijo que sólo era uno —dijo Dani y yo estaba en shock.

—Si, son dos, son mellizos —Dani abrió los ojos a tope y yo me quedé helado— debemos comenzar con la cesárea ahora mismo, usted vaya con la enfermera para que le den una bata quirúrgica, nosotros prepararemos a la paciente —me dijo y yo aun en estado de shock asentí.

—Sigame por aquí por favor —dijo la enfermera, yo di un beso en la cabeza de Dani y fui con ella— ¿Papá primerizo? —pregunto.

—Si.

Ella me habló durante el camino hacia otro cuarto para que yo no estuviera nervioso y luego me pasó un uniforme quirúrgico junto a una mascarilla y un gorro quirúrgico desechable.

—Quédese tranquilo, ella lo necesita —me dijo y asentí— todo saldrá bien, no se preocupe —me sonrió y yo suspiré para calmarme.

Era cierto, Dani necesitaba que yo estuviera tranquilo o podría ponerla nerviosa a ella y eso quería evitarlo a toda costa.

—El doctor ya debe estar listo con la paciente, vamos —me guió hacia otra sala en el lugar de parto donde procederían con la cesárea.

Dos.

Dos mellizos.

—Hey, ¿Como estas? —pregunté tomando la mano de Dani. Ella yacía en una camilla, tenía una especia de tela desde la zona del pecho hacia abajo que evitaba la vista hacia más allá y también tenía un gorro quirúrgico.

—Bien, ya me pusieron la raquídea —yo frunci el ceño confuso.

—¿Que es eso?

—Una inyección en la columna vertebral para insensibilizar la zona para la cirugía —explicó y asentí.

—Siéntese aquí —me dieron una silla que posicione a un lado de Dani mientras tomaba su mano.

—¿Tu como estas? —preguntó.

—Bastante sorprendido aún, no espere que fueran dos —conté.

—Si, yo tampoco, la matrona no nos dijo nada —seguimos hablando mientras los doctores comenzaban a preparar la zona y cortar.

Paso al rededor de una hora de cirugía donde yo estuve realmente nervioso pero trataba de no demostrarlo y hablar con Dani.

—Ahora sacaremos a los bebés, dentro de unos minutos ya tendrán a sus hijos con ustedes —dijo el doctor y mire a Dani nervioso y emocionado.

Esperamos unos segundos hasta que ambos escuchamos un llanto agudo y mi pulso se aceleró demasiado.

—Es un niño —dijo y Dani sonrió. Ella quería un niño.

Mire a la enfermera que envolvió al bebé y luego se lo acercó a Dani.

—¿Es normal que se vea así? —pregunto a la enfermera y la fulmine con la mirada.

—Es normal, los bebés cuando nacen están un poco inchados y morados pero pronto se pasará —ella asintió— ¿Lo quiere cargar? —me pregunto y asentí.

Me lo paso con mucho cuidado y yo lo mire, él había dejado de llorar y tenía los ojos cerrados al haber bostezado.

Mis ojos estaban cristalinos y mi garganta tenía un nudo. Era hermoso.