Amor a primera vista (PAUSADO)

De vuelta - Capítulo 15

NATALIA LÓPEZ

Siempre me he preguntado que se siente estar embarazada, creo que ya lo he descubierto. Se que es algo muy bonito, es una de las cosas más hermosas que le puede pasar a una mujer en su vida. Pero en mi caso no fue así, soy menor de edad y aparte no era de la persona que estoy enamorada.
Me sentí rara cuando entré a esa sala con la doctora, como que no era yo por haberle ocultado esto que me ha pasado a mis padres.

Al revisa mi móvil veo una llamada pérdida de David, rápido le llamo para ver si necesitaba algo.

DAVID -Natalia
NATALIA -Hola, me llamaste, necesitas algo.
DAVID -Si, necesito que nos encontremos en él parque, te contaré toda la verdad, si después ya no me quieres ver lo entiendo, pero ahora me hace falta que me escuches.

No sé si lo torturo con mi silencio por un rato, pero no creo estar segura. Me gustaría que me contara todo y así yo también le cuento lo que me ha pasado a mi.

NATALIA -Si David, nos encontramos en él parque dentro de una hora.

Creo que en fin de cuenta si sería algo bueno, un segundo comienzo entre nosotros dos, pero esta vez si será para siempre.

Salgo de mi casa rápido para poder llegar más temprano. Él parque, él lugar donde nos dimos nuestro primer beso, él lugar donde nos hicimos pareja por primera vez, un lugar muy especial para mi.
Lo vi sentado y me puse a su lado.
Nos dimos un abrazo despacio y comenzamos la conversación.

DAVID -Natalia, ¿Cómo has estado?
NATALIA -Bien, ¿ya me vas a contar toda la verdad?
DAVID -Si, mira aquel día que salí apurado con la moto estaba huyendo de mi padre, ellos me golpean con mucha frecuencia.
NATALIA -¿Por qué?
DAVID -La mansión no es mía, es de ellos, tengo que pagarle todos los meses, pero este no pude así que mi padre empezó a golpearme y como no podía quedarme ahí salí corriendo lo más rápido que pude con su moto, evidentemente sin pensar en lo que podía pasar después. Por eso fue que tuvimos él maldito accidente donde casi te m..
Le puse él dedo índice en la boca, para callarlo y corresponder con lo que tenía que decir en ese momento.
NATALIA -No, no digas eso, ya pasó y gracias a dios no fue nada malo. Pero ahora me doy cuenta que por eso era que tenías los moretones en él brazo.
DAVID -Si, era por eso. Bueno Natalia, ya te he dicho todo lo que ocultaba, la verdad me da un poco de vergüenza porque no es muy común en un chico de mi edad.
NATALIA -Si claro, te entiendo un poco aunque no lo creas.
DAVID -¿Porqué lo dices?
NATALIA -Mi papá cuando tenia trece años nos pegaba a mi mamá y a mi, llegaba borracho todas las noches y se ponía muy pesado. Fueron días muy dolorosos, todavía no lo supero del todo.
DAVID -Lo bueno es que estamos vivos, y tu papá por lo menos cambió, los mios creo que nunca lo harán.
NATALIA -Tranquilo, ahora estamos juntos y podremos superar todo lo que se venga, eso sí, la próxima vez tenme un poco de confianza y cuentame la verdad más temprano.
DAVID -Te lo prometo, esta vez no dejaré que nos separemos por nada del mundo. Te quiero Natalia.
NATALIA -Yo más.
DAVID -¿Vamos a mi casa un rato?
NATALIA -Por supuesto, ¿No están tus padres?
DAVID -No.
NATALIA -Entonces arriba.

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MAMÁ DE DAVID.   [ FEDERICA Y GONZALO ]

FEDERICA -Esta chiquita sigue acercándose a David, ¿Me trajiste los datos que te pedí?
GONZALO -Si, aquí están.
FEDERICA -Muy bien, ¿tuvo que hacer un aborto?, perfecto has una llamada anónima a sus padres y cuentale eso.
GONZALO -¿Segura?
FEDERICA -Si idiota, llama.

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Llegamos a su casa abrazados, felices por nuestra reconciliación. Él muy amablemente me ofreció una botella de agua y una silla para sentarme.

DAVID -Estoy muy feliz de que hayamos regresado, todo esto de estar separados no me gusta nada.
NATALIA -A mi tampoco, y dime ¿no hay nadie en tu casa ahora?
Pregunté con una sonrisa pícara en mi cara y mordiéndome a la vez él labio.
DAVID -No, ¿Porqué preguntas?
NATALIA -Ah no sé, tal vez para aprovechar un poco él tiempo libre.
DAVID -Ya entendí. ¿Vienes?

Me tomó de la mano y corrió conmigo hasta él último piso, era una habitación grande llena de cosas. Una cama inmensa y se podría decir que hasta comida preparada en él microondas.

Encendió un equipo de música que tenía, y lo puso en un volumen perfecto para disfrutarla conmigo.

Me agarró de la cintura para acercarme a él, bailábamos suave disfrutando cada nota. Sin más no poder aguantar él deseo me agarró la boca y empezó a besarme.
Casi caigo a la cama pero se me ocurrió pararlo.

¿Qué estás haciendo Natalia?

Mi estúpida conciencia preguntándome.

NATALIA -David espera.
DAVID -¿Qué pasa?
NATALIA -Lo que pasa es que..quiero que esta vez sea especial, porque aquella noche donde lo hicimos por primera vez todo fue...muy apasionado, salvaje.
DAVID -¿Pero? [Mencionó riendose mientras le acariciaba su rostro]
NATALIA -Y que..no está mal, pero me gustaría que esta vez realmente me enseñaras lo que es hacer él amor..

Volvemos a juntarnos, nuevamente sus ojos pegados a los míos, sus labios enredados y con olor a uva lamen mi boca suavemente, enrosca su cara en mi cuello y me carga en sus brazos. Lentamente poniéndome en la cama boca abajo se trepa encima de mí.
Cada movimiento era correcto y bien hecho, como si lo hubiera pensado antes, masajes y más masajes en la cintura que me hacían gemir fuertemente, lo que calló con un suave beso....Se paró para cojer algo de su bolso, un condón.
Me acordé de aquel error que cometí esa noche con Dilan, pero no podía parar este momento por algo que ya superaré con él tiempo, evidentemente no podía parar la magia que iba a ocurrir ahora entre nosotros....
Me penetró aguantándose de mis caderas, lo más suave que pudo, y no era igual a la primera vez, porque en esta si teníamos lo más importante que les hace falta a una pareja cuando tienen sexo, que es la conexión del uno con él otro....Quedamos dormidos uno al lado del otro, en ese cuarto inmenso que al parecer iba a ser él inicio de una nueva historia.

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