▲• Al rescate •▼
Baji no podía sacar los ojos de su victimario el cual yacía delante de él, el enojo por toda la situación que estaba pasando hacía que sus puños no pudieran detenerse. El sonido de unas pisadas fuertes se hizo presente a sus espaldas y en ese momento vió todo en cámara lenta. El otro muchacho se estaba acercando a él con un arma en la mano, al fondo pudo visualizar a una persona vestida de negro que iba corriendo hacia ellos.
El joven comenzó a pensar que movimientos podía hacer para esquivarlo o golpearlo, pero ya estaba en desventaja, más si esta persona tenía un cuchillo y debía considerar a esa persona de negro un potencial enemigo. No podía actuar con rapidez y tampoco pensar, su cabeza estaba nublada por todos los hechos. Baji pudo ver como esta persona con el rostro cubierto le daba una patada en la espalda a su agresor, el cual terminó cayendo de cara al piso.
-Qué deshonesto- Escuchó decir a quién pudo identificar como una mujer-. Atacar por la espalda es de cobardes.
En una rápido movimiento la chica se había recogido el cabello en un moño y se había agachado para quedar de frente con el chico que acababa de patear. Izquierda, derecha, izquierda, derecha. Uno a la vez los puños caían sobre el rostro del joven y empapaban las manos de la chica. Baji la miraba sorprendido, había pensado que era parte de ellos por sus rasgos pero la chica lo estaba ayudando, lo estaba defendiendo.
-¿Ya terminaste con ese?- Baji salió de sus pensamientos debido a la pregunta de la muchacha.
-¿Cómo?- Respondió.
-¿Si ya lo dejaste medio muerto?- Señaló al joven que se encontraba abajo de Baji.
-Espero que no, pero parece que esta inconsciente- Le confesó mientras lo miraba de reojo.
La muchacha se paró y le extendió amablemente su mano la cual Baji tomó sin dudar, sus manos unidas se sentían cálidas y húmedas por la sangre de la pelea, no era algo que a ninguno de los dos les incomodara.
-Vamos a curarnos- Dijo finalmente la muchacha arrastrándolo lejos del lugar.
。。。
Alma intentó alejarse lo más posible de la escena, no quería ser vista y que los rumores comenzaron a correrse por el barrio. Caminó un par de calles con aquel muchacho, que en principio era la víctima, hasta llegar a un banco de madera escondido entre árboles y arbustos. En ese momento, Alma se percató que estuvo todo el camino agarrada de la mano de aquel joven, rápidamente se soltó de él y se sentó.
-Bueno, a ver esas manos- Dijo mientras sacaba todo lo necesario de su mochila.
-¿Cómo es que tenes todo eso guardado y preparado?- Preguntó mientras veía como Alma sacaba agua, alcohol y vendas de su mochila.
-Siempre se debe estar preparado. Toma- Le acercó la botella de agua-. Usa un poco para sacar la sangre de tus manos.
Baji obedeció limpiando con un poco de agua sus manos, al terminar se la extendió a Alma la cual imitó sus actos. Con un poco de gasa y alcohol limpió sus heridas y las de Baji, las de él estaban muy feas por estar tanto tiempo golpeando a sus contrincantes. Alma se encargó de vendar las manos del joven y las de ella y guardó todo en su mochila. Mientras terminaba de ordenar vió como la mano de Baji se acercaba y le colocaba detrás de la oreja un mechón de pelo que se le había soltado, rápidamente se alejó.
-Perdón, me asustaste- Le mintió Alma, era frecuente que se sintiera incómoda con el contacto físico de las personas-. Ya terminamos por acá- Dijo mientras se paraba.
-Me llamo Baji- Habló el joven-. Baji Keisuke.
-Cecil - Dijo sin pensar-. Cecil Alma.
Alma abrió los ojos sorprendida, más allá de sus padres y algunos conocidos nadie sabía su nombre, no era algo que le gustara andar diciendo, prefería que la llamen por su apodo. Su nombre era algo privado para ella, algo íntimo y que la llamaran por él denotaba mucha confianza. Pero le había escupido su nombre a aquel muchacho sin pensarlo dos veces, sus mejillas se tornaron rosas pero Baji no podía verlo ya que el cubre bocas mantenía oculto la mayoría de su rostro.
-Bueno- Se apresuró a decir Alma-. Adiós.
No le dió oportunidad de acotar nada más ya que empezó a caminar a paso ligero. Ese muchacho la había tocado, había estado agarrada de su mano y ya sabía su nombre y apellido. Alma estaba bastante nerviosa y más aún que se trataba de una persona que sabía desenvolverse durante una pelea. Ella esperaba no volverlo a ver, mientras agradecía no haberse quitado el cubre boca en ningún momento.
。。。
Alma, Alma, Alma. Repetía Baji mientras caminaba hacia la casa de Mikey y miraba sus puños vendados por la joven. Muchas preguntas rondaban por su cabeza, por qué lo defendió sin conocerlo, por qué lo ayudó a curarse para luego irse corriendo sin permitir agradecerle. Para Baji, un aire de misterio rodeaba a esa chica y pensó que, tal vez, le gustaría resolverlo.
-Pero, ¿qué te pasó?- Le preguntó Mikey mientras hacía pasar a Baji.
-Tenemos toda la tarde para que te cuente- Contestó Baji.
Entre risas y chistes la tarde se pasó, Baji había logrado olvidarse de todo lo sucedido, del dolor de sus manos y del por qué esos chicos que no conocía querían atacarlo. Pero de lo que no se pudo olvidar es de Alma.
-¿Nos vas a contar qué te pasó?- Presionó Mitsuya.
-Unos chicos vinieron a atacarme, sin ningún motivo- Le respondió Baji-. Ambos eran latinos, no tenían ninguna chaqueta con referencia a su pandilla.
-Últimamente hubo varios ataques de latinos a miembros de nuestro grupo- Dijo Draken-. Yo separé a unos que estaban peleando con miembros del segundo escuadrón.
-Si, terminaron en el hospital- Acotó Mitsuya-. Tendríamos que pedirle a Muto que investigue.
-Pero hay algo que no entiendo- Se apresuró a preguntar Mikey-. Viniste de tu casa, sin nada encima, te peleaste y ahora tenes los puños perfectamente limpios, curados y vendados.
-Una chica me defendió y curó las heridas- Susurró Baji.
-Por tu cara te gustó- Chifuyu levantó las cejas a modo de burla.
-No seas idiota- Dijo enojado-. No pude verle la cara, la tenía cubierta con un cubre bocas, pero era una chica latina.
-Una chica latina golpeó a otros latinos para defenderte...suena raro- Habló Mikey rascaba su cabeza, parecía confundido
-Yo también, cuando la vi venir corriendo pensé que me iba a golpear- Confesó Baji-. Pero fue directamente hacia uno de los chicos y lo tiró al piso.
-¿Cómo era ella?- Le preguntó Mitsuya.
-Tenía una voz suave, unos ojos marrones muy profundos y pelo largo, más largo que el mío, de color negro- Sonrió-. Se llama Alma.
-Sería Baji en versión mujer- Dijo Draken.
-Le faltaría quemar un auto cuando tenga hambre- Habló Mikey entre risas.
Una guerra dio comienzo, entre golpes, insultos y comida voladora pasaron el resto del cumpleaños de Chifuyu. Después tendrían que ordenar todo, pero no era algo que le importara a Baji, pasar tiempo con sus amigos por fuera de la ToMan era algo que lo hacía feliz, no tenían que ser serios y hacer valer su rango; estando en la intimidad volvían a ser niños.
ESTÁS LEYENDO
𝕃𝕒𝕫𝕠𝕤 ໒ 「Tokyo Revengers x Oc」
Roman pour AdolescentsAlma, una joven y audaz latina, en conjunto con sus amigos, se sumergen en el mundo de las pandillas para dar sentido y peso a sus vidas en el extranjero. Pero protegerse a ellos y a sus seres queridos no es fácil en un país donde son señalados sola...