𝕃𝕒𝕫𝕠𝕤 ໒ 「Tokyo Revengers x Oc」

『Capítulo 17』

⊱Sentimientos⊰

Las primera estrellas de la noche se hicieron paso en el cielo, eran tan aburridos los domingos, pensaba Alma mientras se encontraba recostada en el sillón del living. Todavía era temprano para irse a acostar, pero era demasiado tarde para hacer algo divertido. Mientras rebuscaba en sus pensamientos algo interesante para hacer, su celular comenzó a sonar.

-¿Quién molesta?- Atendió sin mirar el nombre en la pantalla.

-¿Cómo? ¿Tanta falta de respeto hacia tu madre?

Alma se sentó de golpe en el sofá, sus ojos se abrieron por la sorpresa. Sus padres no solían comunicarse por teléfono mientras estaban de viaje, antes de volver siempre le mandaban algún mensaje para avisarle que pronto estarían de regreso, pero nunca llamarla.

-Pe...perdón mamá, no se me ocurrió mirar la pantalla antes de responder- Su madre enojada le daba miedo-. ¿Qué pasó qué me estás llamando?

-Quería saber cómo estaba mi hermosa Almita- Alma revoleó los ojos- ¿Cómo va la escuela?

Alma recordó que la escuela había antepuesto sus necesidades monetarias, por lo que nunca habían llamado a sus padres para mencionarles la suspensión o lo que su hija había hecho aquel día. Por lo que Alma tomó una gran bocanada de aire y comenzó a contar una verdad dentro de una mentira.

-Bien por suerte- Intentó tener su voz tranquila-. Los exámenes fueron antes de las fiestas y pasé de año, así que ahora solo dan contenidos aburridos para justificar tenernos encerrados hasta las vacaciones.

-Me alegro mucho hija- Podía escuchar la felicidad de su madre por el auricular- Estamos muy orgullosos de vos- Su madre hizo una breve pausa-. También llamaba para avisarte que en unas semanas estaremos por allí.

-¿En serio? ¿Se van a quedar hasta mi cumpleaños?- No pudo contener su emoción

Sus padres casi nunca estaban en su casa, no solían pasar las fiestas juntos, y mucho menos sus cumpleaños. Pero cuando escuchó a su madre decir que dentro de poco estarían allí no pudo evitar expresar su felicidad.

-Pero cariño, eso es imposible- Alma sintió como su sonrisa desaparecía-. Estamos casi a finales de marzo y tu cumpleaños es en mayo. Imposible que nos podamos quedar tanto tiempo.

-Perdón...no consideré lo del trabajo- Alma intentó no demostrar la decepción en su voz.

-Pero vamos a estar unos días ahí cariño, a pesar de no poder estar en tu cumpleaños- Intentó animar a Alma-. Es más, vamos a tener una fiesta. Por eso te llamaba, necesitamos que vayas comprando un lindo vestido de gala para ese día.

-¿Van a ser una de esas fiestas de gente rica?

-Papá y yo tenemos que ir Alma, y queremos que vayas con nosotros. Vamos a pasar una linda noche todos juntos.

-Si no puedes contra tu enemigo, únete a él.

Después de estar un rato hablando con su madre, Alma vió que era hora de cenar. Sin muchas ganas de cocinar se dirigió a la cocina. Abrió su heladera y la miró de mala manera, tendría que ir al supermercado. Frunció su ceño al darse cuenta que solo tenía alcohol, no podía cenar cerveza.

El sonido del timbre la arrancó de la labor de pensar su cena. Alma se dirigió lentamente a la puerta, no esperaba a nadie y ya era de noche para que alguien viniera a visitarla. Tomó la navaja que siempre dejaba en la mesita de entrada y miró por la mirilla de la puerta.

-¿Baji?- Abrió rápidamente la puerta-. ¿Qué haces acá tan tarde?

-Te estuve mandando varios mensajes, pero no los respondiste.