Segundo capítulo

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Capítulo dos: No los aguanto.

—ChangKyunnie, cariño, hola —se escuchó presente en la sala una tierna voz. Dando un saludo cálido.

ChangKyun sentía la presencia de su padre a sus espaldas, realmente estaba incómodo, apretó sus manos en torno a una de las correas de su mochila y tensó su mandíbula.

Lo que le faltaba.

—Hola, papá —respondió seco.

—¿Como estuvo tu día hoy? —habló alegremente el peli naranja. —Debes estar cansado, ¿no quieres relajarte un rato? Hice té por si gustas.

—No, gracias —farfulló. Aún sin darle el rostro a su padre. —Tengo tarea que hacer, me voy a mi cuarto —puso un pie delante del otro con la intención de irse de allí rápidamente y evitar que su paciencia se colme, pero entonces la voz de su padre lo interrumpe otra vez.

—Es solo un rato, si tienes mucha tarea puedes esperar a que YoonGi llegué y te ayude a hacerla —ladeó un poco su cabeza buscando que ChangKyun le diera la cara.

—No, perdería mucho tiempo, mejor me voy —nuevamente intento reanudar su caminata.

—Oh, pero JeonGguk salió en una cita con TaeHyung y JiSoo está dormida así que pensé que podíamos...

—Escucha, papá —lo interrumpió, dándole finalmente la cara. —Estoy realmente cansado y con el estrés de puntas. Quiero estar solo. Si quieres compañía dile a tu amigo, MinHyuk, que venga o despierta a JiSoo ¿Sí? —arqueó una ceja y, ahora, tomó rumbo a su habitación sin interrupciones.

—Claro —susurro KiHyun para sí mismo mientras veía desaparecer a su hijo escaleras arriba, sintiendo como un dolor fuerte se instalaba en su pecho y sus manos temblaban, pero sonrió débilmente y volvió a la cocina, ara terminar la cena de su esposo.

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—No seas berrinchuda, JiSoo, comete los vegetales —le dijo con voz suave, KiHyun, observando a su hija hacer un puchero leve y jugueteando con los vegetales con sus palillos.

—No se ven ricos —frunció el ceño.

—No seas grosera, JiSoo, tu padre hizo la cena con cariño y saben muy bien —regañó con voz levemente dura YoonGi mientras introducía un trozo de carne en su boca.

Está infló sus mejillas y finalmente comenzó a comer dichas verduras con un poco de desagrado. KiHyun sonrió tiernamente.

—Está bien, no importa YoonGi, a mí tampoco me gustaban las verduras de pequeño, hacía berrinches peores, pero luego le gustarán —tomó la mejilla de la pequeña entre sus dedos índice y pulgar y la apretó levemente, haciendo que la niña sonriera levemente sin mostrar los dientes, por su boca llena.

En su interior, ChangKyun rodó los ojos, siempre era tan empalagoso, viéndole el lado bueno a la vida. Siguió comiendo en silencio, rellenando su boca de más para acabar rápido.

—JeonGgukie, ¿qué tal tu cita con ese tal Tae...? —tartamudeo el pelinegro mayor.

—TaeHyung —completó JeonGguk.

—Si ese —dijo YoonGi mientras daba un sorbo a su copa rellena de vino blanco. —¿A dónde te llevó?

—Oh bueno —tragó con dificultad la poca comida que tenía en su boca y miró nerviosamente a su padre. —M-Me llevo a un parque de diversiones, ganó un caballo de peluche para mí y-y después me compró un helado —sus mejillas adaptaron un color rojizo realmente adorable.

YoonGi arqueó su ceja, mirando expectante al delgado y delicado pelinegro frente a él —: ¿Y no pasó nada más?

—YoonGi, por favor —interrumpió KiHyun. —No empieces con tus suposiciones bobas, JeonGguk regresó más temprano de lo esperado a casa y TaeHyung lo acompañó hasta acá.

El pelinegro mayor frunció levemente su nariz, pero no dijo nada, se rindió y siguió comiendo.

—¿Y tú, ChangKyun? ¿No tienes nada que contar? —dijo después de un rato el peli naranja, observando a su hijo mayor.

—No.

—¿No? ¿Qué tal está la universidad? ¿Hay materias difíciles? —intentó crear conversación.

—Está bien. Nada de qué preocuparse —tomó su vaso y bebió un largo sorbo.

—Sabes que si hay problemas en alguna materia puedes contar conmigo para que te ayude —le sonrió tiernamente mientras lo observaba.

—Papá, no trato ofenderte, pero solo estudiaste pedagogía infantil. Nada que ver conmigo. Y papá YoonGi, dudó que sea bueno en física, solo sabe hacer negocios —suspiró cansado tomando su plato vacío entre sus manos. —Pero igual gracias por la ayuda. Buenas noches —se levantó de la mesa y llevó su plato al fregadero, para luego irse a su habitación.

Todos en la mesa quedaron en completo silencio, JeonGguk quedó atónito por la respuesta fría y sin corazón de su hermano mayor, luego, dirigió su mirada a sus padres, YoonGi se encontraba abrazando a su amado mientras este aceptaba el abrazo con expresión pérdida y melancólica.

—Hablaré con él, tranquilo KiHyunnie, solo tiene un mal día. 

Shame | YoonKiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora