Go away, save me | editando

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El celular de Jimin seguía apagado, pero inició su cuenta de spotify en el mío, por lo que su playlist apodada "apocalipse" estaba sonando en los altavoces de mi habitación. Volvía a la idea que la música que escuchaba era muy él.

Sextape, Pumped Up Kicks, Hometown, Mr. Brightside, I wanna Know, Smells Like Teen Spirit, I'm Not Okay (I promise), Spirit In The Sky, Rocket Queen, Another One Bites The Dust, Walk This Way, Turbulent, Feel Good Inc, I Hate Everything Aboy You, Hayloft, Devil Town, A Match Into Water. 

De esas canciones podía reconocer a Pierce The Veil, Gorillaz, Queen, Waterparks, Guns N' Roses, My Chemical Romance, The Hunna y me parece ser que incluso tenía algunas de Kiss, Fall Out Boy, TOP, Nirvana y The Neighbourhood.

No iba a ponerme a entender cada una de las letras de las canciones, pero el simple ritmo de ellas, creaban una distorsionada presencia de la realidad, donde permitían a Jimin hacer más que mover la cabeza al ritmo o golpetear con sus dedos y pie. Esta vez, este chico se movía por mi habitación, moviendo sus caderas de lado a lado con la melodía, cantando las letras a buena voz, señalando nada en particular cuando parecía ir totalmente con el significado de las frases en inglés o algún otro idioma. 

Realmente podía imaginar a un Jimin en esos tiempos. Con ese cabello negro que la mayoría del tiempo cubría desastrosamente su frente en un copete poderoso. Luciría camiseta blanca combinada con Jean, botas y una chaqueta de cuero llena de varios picos, luciendo enormes logos y pines de las bandas del momento. ¿Eras los ochenta la época de la que hablo? Con las películas estilo Vaselina y Heathers puedo ubicar demasiado bien la imagen mental del chico bailarín frente a mí. Jimin en este momento para mí es mi John Travolta.

Me acompañó muy bien durante el momento donde enjuagaba y secaba mi cabello recién teñido, el tinte había quedado muy bien para no verse la división entre lo que era rojo y lo que ahora es completamente rosa. Jugué también a seguirle el ritmo de canciones que no conocía, pero parecían ser importantes para él, venidas desde lo más profundo de su corazón.

Me dejé caer en mi cama para poder observar por primera vez a Jimin tan enfrascado por la música, tal vez era el momento en el que varias de las dudas que tuve desde que lo conocí estaban siendo respondidas. No sé si la vergüenza lo había apagado, pero ahora que estaba tan sumergido, no quería romper la burbuja que creó para sí, porque su playlist acabó para comenzar una nueva donde canciones específicamente calientes resonaban por toda mi habitación.

Me sorprendió verle cantar canciones de Doja Cat, Blackbear, Halsey e incluso Dua Lipa. Las sabía de memoria, sin equivocarse, totalmente sumergido en el ritmo de la canción. Creo que tenían bastante sentido cuando puede leer el nombre de la playlist con una escapadita rápida del glorioso espectáculo que este chico me estaba dando.

"Fuck, it's hot"

Daddy Issues, Often, The Hills, Call Out My Name, I Feel Like I'm Drowning, Go Fuck Yourself, High, Or Nah, Into It, Sex Money Feelings Die, Friends, Swim, Love Is a Bitch, Needed Me, Slow Down, Streets, Right Here, Flawless, All Mine, Numb To the Feeling, Okay, Heartburn, Do It For Me, Desire, Renegade, Dangerous, Talk, Lights Down Low, Me & U, All I Need.

Canciones que, verlo bailar al ritmo de cada una de ellas y cantando las letras...

Cuanta razón el maldito título.

Estaba ensimismado en sus manos paseando por su cuerpo, despeinando sus cabellos hacia atrás, en las miradas que daba a la nada para por fin enfrascarse en mí. Y se detuvo, con la respiración acelerada.

De un momento a otro sentí que la llama en mi cuerpo era encendida. El atardecer acompañaba el fuego creciente en mi interior que señalaba el comienzo de una desencadenante agonía sexual. Lo quería. Lo necesitaba a él entre mis piernas.