Capítulo 32 - Shiro

351 48 17
                                    

Capítulo dedicado a:
Emiikujo
KevinPeaobando
Souichi13Rene
lucera-forever
multi_muse
EVSC1234
Kana_Kuran
Jesabelilee
AdriGarcia384




— ¿Cuánto tardarás en encontrarla? Debes hacerlo antes que los Joestars lo hagan.

— Ya lo sé. Preveo que pronto la tendremos de nuestro lado.

— Este es tu único y más importante trabajo. Todo lo demás que has hecho hasta ahora es un extra.

— No necesitas repetirlo cada vez que nos reunamos.

— No voy a permitir otra confusión. No puede sucederle lo mismo que le hiciste a la anterior. — lo vio asentir con la cabeza, sin embargo, no confiaba en que sus impulsos asesinos se contuviesen. Así que tomó nota mental de mantenerlo vigilado. Esta vez no podían perder la oportunidad.

************************************

Aunque no lo dijera en voz alta, cómo la mayoría de las cosas que pasaban por su mente, también le gustaba Morioh. Le encantaba ese ambiente de libertad que le permitía saltar por los tejados y correr a toda velocidad y que eso sea visto cómo algo natural. Le gustaba la diversidad de los no-humanos que visitaban el pueblo. La seguridad para los de su especie.

El único lugar del mundo dónde los dhampyrs podían vivir sin miedo.

El día posterior al reconocimiento del rastro del asesino, comenzaron la cacería. Jouta, Prosciutto y Risotto se encargarían de esta, mientras Kakyoin y Yukako mantenían un ojo sobre la ciudad mediante el mapa astral. Así que Jouta se dedicaba a caminar por el centro y tratar de no marearse por toda la información olfativa que estaba obligado a receptar.

Sí, parte de su trabajo era olerlo todo. En caso de que lograra identificar el aroma del aura del asesino.

Iba mirando todo y nada a la vez, a los no-humanos que paseaban, a los vendedores ambulantes. Sin embargo lo que captó su atención fue una imagen pegada a un poste de electricidad. Era un cartel de búsqueda que contenía la foto de la chica dhampyr que encontraron ayer. Una chica estaba en la esquina cercana a la cafetería y mostraba la misma imagen a todo el que pasaba preguntando si no la habían visto.  De complexión delgada y mucho más bajita que él. Vestía un suéter oscuro y una sudadera color lila, la capucha cubriendo su cabello y lanzando una sombra sobre su rostro por lo que no la podía identificar bien. Llevaba unos jeans negros, zapatillas deportivas del mismo color.

Jouta por un segundo pensó en ignorarla. Y luego sopesó la posibilidad de que la chica fuera algún familiar, así que al menos debería saber superficialmente lo que había sucedido con esta. La chica al ver que se acercaba con uno de los carteles acortó la distancia entre ellos dando pasos desesperados.

— ¿La has visto? — no pudo evitar tragar en seco cuándo ella alzó el rostro. Era preciosa cómo ínfimas veces admitía acerca de alguien.  Jouta suponía que era albina, no solamente por su piel en extremo pálida, sino también por las cejas y largas pestañas de un rubio platino y el flequillo blanco alborotado que caía sobre su frente, el resto del cabello lo llevaba peinado en una trenza desordenada que caía por su hombro. Los labios finos y rosados contrastaban con esa palidez, al igual que sus brillantes y grandes ojos dorados. Ojos que parecían capaces de ver más allá en el tiempo. Su sola presencia era un imán, cómo si tuviese alguna especie de aura divina a su alrededor, que te obligaba a mantener la mirada en ella. — ¿La viste? — cuándo Jouta reparó de nuevo en la pregunta y en el tono de su voz, se tensó por completo.

Dracula's Wife [Jotakak] (PAUSADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora