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Azrael

Hace unos días que llegamos a la Manada, han sido unos días repletos de emoción y felicidad.

Tenemos nuestra propia casa, la única pega es que yo quería ser el la construyera. Aunque mis hermanos lo han hecho fenomenal, no creo que yo lo hubiera podido hacer mejor.

Heba está feliz y yo con ella, mis madres y mis hermanos apenas se acaban de marchar y ya los estoy echando de menos, pero no será por mucho tiempo, planean volver para el nacimiento de los niños, por lo que Heba ha dicho serán un niño y una niña. La verdad es que yo no tenía preferencias, solo quería que estuvieran sanos y bien.

Si hubieran sido niños a la próxima habríamos ido a por las niñas y sino al contrario.

Me aflige pensar que Heba a estado tanto tiempo sin mi, me siento estúpido y me culpo por no haber estado más alerta. Si yo no me hubiera dejado coger nos habríamos evitado muchos disgustos.

Aún no me cuenta nada de lo sucedido, se ve que no es agradable, creo que igual nunca me llega a contar que es lo que pasó,  cómo consiguieron encontrarme? Y qué paso con el bastardo de Belial?

La verdad es que me genera curiosidad, pero poco me importa si debo de ser sincero, lo importante es que estamos juntos y bien.

Hoy vamos al mercado, Heba quiere preparar algo especial para la cena y en casa apenas si tenemos comida, ya que su abuela y su madre no dejan de invitarnos a sus respectivas casas.

Veo como algunos de los habitantes de la Manada me mira con recelo, si tan solo mis ojos tuvieran un color normal podría pasar desapercibido. Igual si uso unas gafas de sol...

Claro que después recuerdo que ellos son muy buenos con el olfato, enseguida podrán oler al demonio que habita en mi.

Todos dan la enhorabuena a Heba, a este paso cerraran el mercado y no habremos comprado nada.

Es bonito ver cómo la gente de aquí quiere y respeta tanto a mi mujer, quizás algún día me pueda ganar también su respeto. Eso de momento es un sueño pero quién sabe.. si su padre y su abuelo sobre todo su abuelo han sido capaz de aceptarme, seguro que también lo consigo con los demas.

Por fin hemos podido terminar la compra, nos dirigimos a la casa de sus abuelos, hoy comemos con ellos. Por lo que he podido escuchar su tío Thomas vuelve a casa, Thomas es hermano de Briana y beta de Helena, en fin un lío, conclusión son muy unidos y hace varios años que no se ven.

Espero no tener un nuevo enemigo, creo que ya he tenido suficiente en esta vida.

- La comida estaba buenísima señora. Le digo a Briana con la mayor educación posible.

- No me llames señora, eso me hace sentir mayor, llámame simplemente Briana o abuela lo que más te guste. Dice sonriendo.

- Que vas a ser mayor, estás igual de bonita que el día en el que te conocí. Dice el abuelo dándole un azote en el trasero.

Inmediatamente la abuela se sonroja y regaña a él abuelo, este no hace nada más que reír e ignorarla.

Este hombre me sobre pasa, aveces parece un puto comando, otras un niño y otras un demente. Este hombre parece que tiene múltiples personalidades.

Heba tiene las piernas muy hinchadas,sus tobillos han dejado de existir. Ella no lo va a reconocer pero está cansada, es hora de que volvamos a casa.

Me ha costado convencerla pero al final lo he conseguido, tiene que descansar, se desobra que no está enferma pero aveces se olvida de que no puede con todo, está embarazada de dos niños debe descansar y cuidarse un poco más de lo que lo hace.

- Está noche manda en casa el rey consorte! Así que su majestad estará tumbada en el sofá mientras yo hago la cena. Le digo sonríendo.

- Pero que vamos a cenar si apenas sabes encender el microondas. Dice ella riendo.

- Mujer de poca fe! Tu obedece y espérame. Ya verás si te sorprendo o no..

Resulta que Heba tenis razón, llevo en la cocina más de media hora y tengo el cubo de la basura lleno, tendré que pedirle clases particulares a su abuela. Pero hoy no! Ya será mañana.

Vuelvo a salón con dos sándwichs de jamón y dos vasos de jugo. Ella me mira y comienza a reír.

- No digas nada, tu solo cómetelo. Digo bajito y agachando mi cabeza.

Me siento a su lado y enciendo el televisor, están poniendo una película de esas románticas, veo como Heba mira con atención, nada hoy tendré que ver lágrimas y dramas pero bueno, si eso le hace feliz.

Al final el que terminado llorando he sido yo, que desastre soy un marido dulce y tierno. Cuando debería ser fuerte y duro.

- Sabes que no te cambiaría por nada del mundo, me encantas tal como eres. Dice Heba besando el dorso de mi mano.

- Heba, aunque es muy lindo lo que me acabas de decir, no me gusta que leas mi pensamiento. Digo un poco serio.

- Perdoname mi amor, es que aveces no lo puedo evitar. Dice ella arrepentida.

Creo que es hora de dormir, aunque dudo que Heba tenga mucho sueño, se ha pegado más de media película durmiendo. Según ella no lo ha podido evitar estaba bien aburrida.

- Heba es hora de dormir casi es media noche, si no duermes lee un rato, pero me gustaría que me acompañaras en la cama, sabes que me cuesta dormir si no estás a mi lado.

Ella asiente con la cabeza y me acompaña a la habitación.

Apenas me quedo dormido, cuando me despiertan unas patatadas y unos suspiros.

- Qué te pasa princesa? Pregunto adormilado.

- Creo que me hago pis, me encuentro rara.

- Quieres que te acompañe..digo sentándome a su lado.

- No, está bien puedo ir sola. Dice levantándose de la cama, apenas da cuatro pasos cuando se para de golpe.
Veo como un líquido recorre sus piernas haciendo un charco bajo sus pies.

- Azrael, todavía es pronto? No debería pasar aún? Dice preocupada.

- No te preocupes mi amor, seguro que es normal y todo ha llegado a su tiempo. Digo levantandome y ayudandola a volver a la cama.

- Llama a mamá y a la abuela, ellas se encargan de llamar al doctor y a la matrona. Dice ella apunto de llorar.

- Todo va a salir bien ya lo verás, estos niños son muy fuertes. Son tan fuertes como su madre. Le digo mientras me alejo para llamar a su madre y a su abuela.

Mis hijos están por nacer, rezo para que todo salga bien. Pero a quién le rezan los demonios..

Heba "Entre dos mundos"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora