22.

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POV Tori Vega.

Y ahí estaba, yo encerrada en mi cuarto con Megan durmiendo en el sofá del living y sin Jade a mi lado. No pude tocar la comida en mi tenedor, no tenía la suficientemente fuerza como para hacerlo. Al contrario, solo podía tener un cigarrillo en mis labios, era lo único que me daba tranquilidad en mi casa a la cual ahora sentía dolorosamente invadida. Tragué una buena cantidad de humo mientras me cuestionaba a mi misma que demonios debía hacer con toda esa situación. ¿Realmente reaccioné tan mal? ¿Tenía razón ella o yo? ¿Quién tenía la culpa? ¿Había alguna culpa? Suspiré entre un ataque de tos. Apagué el cigarrillo estrujándolo contra la mesa de madera que tenía al lado de mi cama. Me levanté de mi comodidad y busqué mi teléfono celular con pesadez. No quería estar así, no con ella.
Marqué su número. Caminaba de un lado a otro en esa habitación, no pensaba mentirle, tal vez la extrañaba un poco. Un poco bastante.
Llegué a oír un 'click' al otro lado de la línea y esa fue mi señal para colgar la llamada mordiendo mi labio inferior. Mi orgullo no me permitió admitir lo que debía decirle. Relamí mis labios aún secos.
Quería dormir por tres horas. La preocupación de que Megan estuviera allí no se iba, sinceramente, no creía que sería capaz de robarse algo, pero sí de intentar humillarme o algo así.

Abrí la puerta de mi cuarto y bajé las escaleras, quería un vaso de agua. La tomé lentamente. Había mucho silencio alrededor. Auggie me seguía a todas partes, hacía poco lo había llevado llevado vacunar y estaba súper mimoso, al parecer le dolieron y pensó que fue una especie de castigo. Me sentí mal por mi pobre mascota, por lo tanto lo acariciaba cada vez que podía.
Suspiré. Mi mente últimamente andaba lenta. Sonó el teléfono. Corrí hacia el, era el teléfono de línea. Quise no sonar apresurada pero evidentemente, lo hice. Levanté el teléfono nuevamente, esta vez más insegura de lo que ya estaba. Oí un suspiro.

-¿Si sabes que sé que eras tú, verdad?- Volví a cortar torpemente. ¡Mierda!

-¡Carajo, noo!- Susurré, arrepintiéndome al instante de haberle cortado la llamada. Empecé a marcar los números intentando aclarar mi garganta seca. Atendió. -Hey-.

-¿Hey es lo único que me dirás hoy o qué?- Vaya, si estaba enojada.

-Mierda... no me estás tratando bonito...- Apreté mis labios mientras rogaba que no me mandara al demonio. Llegué a escuchar como tomaba una bocanada de aire.

-No lo sé, si fueras yo, ¿cómo te tratarías?-

-Pues... ¿bien?- Literalmente no estaba colaborando; solo estaba intentando no ceder ante mi ego. Tal vez, en el fondo ella tenía razón.

-¿Sabes qué? Hablamos mañana cuando estemos más calmadas. Definitivamente hablar furiosas la una con la otra solo nos fastidiará hasta el agotamiento-.

-¡Espera!- Dije. -¿No quieres que pase por tu hogar y te salude?- Jade hizo una pausa.

-¿Para qué? Ya convivimos lo suficiente, Tori, y no ha salido bien-.

-Oh, vamos, no seas dramática, solo cometí un error, por dios-. Protesté cambiando de posición.

-No estoy siendo dramática, simplemente no me apatece tener alguna plática contigo o con cualquier otro ser humano. Debo hacer esta tarea y me urrrge hacerla-. Exclamó firme.

-Pero...-

-Pero nada, ya perdí demasiado tiempo-. Cortó la llamada.

Insulté y corté yo también. Aún sentía náuseas en todo mi cuerpo, me sentía sucia, cansada, adolorida. Todo el maquillaje que llevaba me pesaba. Bostecé, en verdad el estómago me dolía horriblemente. Pasé mi mano por mi abdomen y lo sobé en movimientos circulares, pero esa acción se sentía incomoda al tacto, se sentía como un mimo, y era extraño. Dejé de hacerlo y me eché a la cama abrazando a una almohada. Sí. Tal vez la había arruinado. ¿Pero en qué? Yo seguía sin ver en qué había fallado.

𝓔𝓷 𝓵𝓸𝓼 𝓽𝓮𝓳𝓪𝓭𝓸𝓼 ~  Tori Vega (+Jade West) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora