Korina acompañada de Alice, ingresó al lobby de la oficina del Director, como si estuviese paseando por su propia casa, sabía que para cualquiera persona esto resultaría casi como una falta de respeto para la institución o para el Director Finale. Pero Korina era una Lacroze, y sabía que Albert tenía una muy buena relación con el director y que su padre era un muy generoso patrocinador para el Aiglon College.
Además esta no era cualquier situación, era un tema delicado donde se la estaba involucrando en acoso escolar y amenazas, que claramente ella no había hecho. Pensó Korina.
—Buenos días, Srta. Lacroze —saludó la secretaria del director Finale—. ¿Necesita algo?
—Sí, me gustaría ver la grabación de la cámara del pasillo de los casilleros del grupo "B"—respondió Korina sin dar muchas vueltas al asunto.
Alice enseguida la miró y le dio un ligero empujón en el hombro, como tratando de decirle que por su falta de tacto las echarían del lugar.
Korina la ignoró.
La secretaria estaba igual de sorprendida que Alice y por varios segundos se quedó callada, como analizando que debería responder.
—Se... Señorita Lacroze, yo no tengo la autoridad como para permitir que los alumnos revisen los videos de seguridad.
—Descuide, yo sé eso... no le molesta que esperemos por aquí, unos minutos, ¿verdad? —preguntó Korina.
—No, claro que no —dijo la secretaria bastante extrañada por la actitud de la joven Lacroze—. Pueden sentarse por ahí.
La secretaria les indicó el sofá a un costado de su escritorio, y espero a que Korina y Alice se sentaran para disimuladamente enviar un mensaje de texto a su jefe.
La respuesta no se hizo esperar, pronto, y para sorpresa de la secretaria, el director autorizaba que la Srta. Lacroze a revisar los videos de seguridad. Rompiendo el protocolo regular.
Conociendo su lugar, la secretaria prefirió no refutar la orden de su jefe, e inmediatamente hizo una llamada para que el jefe del departamento de seguridad del Aiglon, viniese a su oficina, claro, con la mayor discreción posible. Después de todo, Aiglon College tenía una reputación que mantener.
—¿Estás segura de que esto va a funcionar? —preguntó Alice, sin poder llegar a confiar en las palabras de Korina, del todo.
—Ella está haciendo una llamada y no nos ha pedido que nos marchemos, por supuesto que va a funcionar.
Alice no pudo evitar poner los ojos en blanco, la seguridad que tenía Korina en que las cosas fuesen como ella lo había planeado, era por mucho, bastante irritante. Alice se sentía frustrada en su interior, aquello que ella había deseado y solicitado en varias ocasiones, sin tener la más mínima posibilidad de una respuesta satisfactoria, Korina probablemente lo había logrado en minutos, solo por el apellido que portaba.
Alice presionó sus puños y luego los abrió, repitió esta acción varias veces, como tratando de tranquilizar la oleada de celos que se desbordaba a minutos en su interior. Ella tenía que estudiar mucho, dejar de comer y hasta fingir, para poder estar en el Aiglon, mientras que para personas como Elliot y Korina, se les había dado las oportunidades en bandeja de plata, tan fácil como respirar y ellos conseguirían, lo que para ella ahora era casi imposible...
Korina era completamente ajena a los confusos pensamientos de Alice, su mente estaba absorta analizando la situación que se desplegaba frente a ella, la trama de "my first sweet love" era hueca y tenía un montón de espacios que el autor dejaba a interpretación del espectador. Todos los cabos sueltos que ella aún no logra entender, ¿cómo una familia tan imponente como los Lacroze, se habían venido abajo solo por la imprudencia de una adolescente?
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Soy la villana de este cuento...
RomanceKorina Lacroze, una exitosa ejecutiva de casi 30 años, nunca imaginó que transmigraría como la villana de "My first sweet love", un libro con una trama pegajosa, que había causado furor a nivel mundial y que a ella ciertamente le desagradaba... Porq...