Soy la villana de este cuento...

Capítulo 2: La mejor amiga de la villana

Autora: AbbySaicam  

Editora: Tinesy

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"Podría acostumbrarme a esta vida".

Pensaba Korina, sentada cómodamente en el asiento trasero del SUV Tesla, de modelo exclusivo. Ni con 5 años de trabajo incansable, casi esclavizada, como gerente de telecomunicaciones en su antigua compañía, podría haber soñado con comprar un vehículo así... Y pensar que en la familia Lacroze había más de uno...

Después de la insistencia de Korina por retomar con normalidad su vida y de asegurarles al Sr. y la Sra. Lacroze que se tomaría con calma las cosas, ellos dieron su aprobación, claro, siempre y cuando Albert fuera su conductor y acompañante, de manera indefinida.

"No imaginaba que los mayordomos fueran tan multifacéticos, expertos en organización, asistentes de primer nivel, mano derecha de la cabeza de la familia Lacroze y ahora hasta chófer profesional... con esa cantidad de cualidades, estimula mi competitividad como profesional."

"¡Definitivamente, aprovecharé los recursos ilimitados de los ricos!"

—Se... señorita.

—¿Eh?

—Señorita, le preguntaba si ¿se siente bien?

—Ah, sí, perfectamente bien, Albert.

—Es un alivio escucharla. hmmm, hemos llegado a la mansión de los Terrier.

La mansión Terrier era tan imponente como la Lacroze, pero de un estilo más moderno y de concepto minimalista. Los padres de Eliza eran conocidos por su sentido estético y de buen gusto, combinando casi a la perfección, estilos clásicos y de vanguardia.

Korina se preparó mentalmente para este encuentro, pero aun así podía sentir como sus palmas empezaban a sudar.

Este momento era decisivo.

Si bien es verdad que una madre conoce a sus hijos mejor que nadie, tal vez la única existencia que podría rivalizar e incluso superar esa creencia era la llamada "mejor amiga". En la historia original de "My first sweet love", Eliza era un personaje secundario, que jamás apoyó el amor enfermizo y tóxico de Korina por Elliot.

Eliza era el epítome de cómo debía ser una señorita de la alta sociedad, elegante, cálida y hasta amable, lo opuesto de la Korina de la historia.

¿Pero cómo estos dos personajes tan contrarios podían ser amistosos?

Es sencillo, por el hermano menor de Eliza, Leónidas Terrier, el menor de los hijos Terrier, un chico muy inteligente y peculiar a la vez.

En el octavo cumpleaños de Eliza, los Señores Terrier invitaron a varios conocidos y socios, que tuvieran hijos de la misma edad que su hija.

Eliza que había sido educada en casa hasta ese momento, estaba particularmente nerviosa, no por ella sino por su hermano menor y gemelo Leónidas, ella no entendía porqué, pero sabía que su hermano era diferente a ella y era diferente de su hermano Marcus. Leónidas tenía profesores y clases especiales y desde que tenía memoria, ellos compartían muy poco, a pesar de ser gemelos. Los adultos siempre miraban a Leónidas como si buscasen algo en él, pero ese algo nunca aparecía.

Sus padres discutían a menudo sobre su educación, su madre insistía en que le haría bien conocer a otros niños de su edad y su padre siempre se negaba con severidad.

Hasta que un día, ellos hicieron un trato. Para su octavo cumpleaños, si Leónidas era capaz de actuar con algo de normalidad y podía hacer un solo amigo, él se quedaría, pero si él tenía otra crisis, como cuando una de las mucamas tomó por accidente su cubo de rubik, él sería enviado a un instituto especial en Canadá, donde podría recibir mejores cuidados y también donde lo mantendrían alejado de la cruda y cruel sociedad.