Detrás de sus ojos

👻🎃Especial de Halloween👻🎃

Narrador omnisciente.

La fiesta, como cada año, se celebraría en casa de los Adams. Destiny siempre decoraba todo con escalofriantes y divertidos adornos típicos de la fecha y Greg se encargaba de la cocina, hacía las mejores galletas de halloween.

Daniela llegó más temprano con el pequeño Dylan en brazos.

— Otra vez peleamos y creo que en esta ocasión es definitivo. — dijo la pelinegra paseándose de un lado a otro por la cocina.

— Habla bajo, los niños están afuera jugando. — habló Kimberly y revisó por la ventana que Klara y su primo estuviesen bien.

— La verdad no te entiendo. — dijo Dest. — Te separas de mi hermano cuando estabas embarazada porque discutían mucho y no llegaban a un acuerdo. — asintió Daniela. — Pero te comprometes con alguien que tampoco te da estabilidad.

— Al comienzo no era así y tú mejor que nadie lo sabe. Solo que...

— Hola familia. — Derek hizo aparición dentro de la casa y ambos pequeños entraron corriendo para lanzarse a sus brazos.

— ¡Papi! — lo saludó Dylan subiéndose por sus piernas.

— Hola mi príncipe. — Daniela amaba ver cómo su hijo y su padre mantenían esta buena relación que ella ya no puede tener con el suyo.

Extrañó todos los momentos que habían vivido, pero no se atrevió a hablarle hasta la noche y con unos tragos encima.

Destiny había decidido usar un traje de vampiresa, mientras Greg era Drácula. Ambos llevaban un estilo gótico, pero sexy. Maquillaron sus cuerpos con un poco de sangre falsa y llevaban colmillos falsos. Kimberly y Klara iban de catrinas, maquilladas y con una corona de flores cada una. Daniela era una enfermera sexy y su pequeño Dylan un doctor.

— ¿Todos listos? — preguntó Greg acomodándose los colmillos falsos.

— Tito Greg, ¿me vas a morder? — le preguntó Klara y este la persiguió por toda la sala de estar hasta cargarla en brazos y hacerle cosquillas.

— Me gusta la sangre de las niñas que se duermen tarde.

— Yo nunca me duermo tarde, dile mami, dile al tito. — todos rieron hasta que llegó Derek vestido con las mismas fachas que en la mañana.

— ¿Y tú de qué vas disfrazado? — le dijo Kim.

— De muerto de hambre. ¿No podemos ya comer?

— Vamos. — Daniela lo empujó escaleras arriba y él no hizo más que lloriquear como una niña.

— ¿No tienes nada preparado? — negó.

— Necesito hablar contigo.

— ¿Que hacemos ahora? — le dijo ella.

— Hay algo que quiero decirte, es serio. — ella analizó por un momento y él necesitaba sacar lo que lo estaba molestando desde hacía un tiempo.

— También debo decirte algo. — le respondió finalmente.

— Tú primero.

— No, tú primero.

— A la de tres. — asintieron al mismo tiempo. — Uno... dos... tres.

— Te extraño.

— Estoy conociendo a alguien.

En la sala de estar no se escuchó nada, solo el fuerte tirón que los hizo mirarse. Destiny siempre supo que cuando esos dos se juntaran iba a terminar todo en desastre.

— Tú hermano es un imbécil. — le dijo Daniela a todos los que impacientes por conocer lo que sucedió se quedaron esperando.

— ¡No! — respondió Derek trágicamente bajando las escaleras. — Ya basta de ser yo el culpable de todo Daniela. Tú estás con Christian y cada vez que se pelan vienes a decirme que me extrañas, pasamos una noche y al día siguiente vuelves con él. ¿Qué clase de juego soy para ti?

— No eres un juego, es solo que...

Destiny interrumpió el momento, corrió hacia el baño tapándose la boca con la palma de la mano. Ya era la cuarta vez en el día que le pasaba y todos comenzaban a sospechar lo que ya ella había confirmado.

— ¿Estás bien? — dijo Greg sujetándole las hebras de cabello antes que se ensuciaran.

— Quería decirte esta noche junto a todos, pero creo que mis malestares ya han confirmado todo.

— ¿A que te refieres? — realmente no sabía que le pudo haber caído mal, ya que todos habían cenado lo mismo.

— Estoy embarazada Greg.

Mientras tanto en la sala, Kimberly se quedó sola con ambos críos, en lo que Daniela y Derek discutían en el patio trasero.

El timbre sonó y dejó a los pequeños jugando con los cachorros y fue a abrirle a los invitados.

— Tío. — abrazó al señor Williams que iba disfrazado de Shrek y luego a Lucía, quien obviamente era Fiona.

— ¿Donde están mis nietos favoritos? — ella se sintió feliz y él a pesar de que Klara no era su nieta directamente, la quería tanto que se sentía como su abuelo, otra figura paterna.

Su pequeño Dylan, que no tenía culpa de los problemas entre sus padres reposaba tranquilo frente al televisor, se parecía tanto a su hijo de pequeño.

— Mis chicos. — Kim abrazó a los jóvenes que se habían vuelto de la familia casi.

Rojo, Río, Rayo, Ritmo, Rey y Rizos.

Aún recordaba aquella vez que se conocieron en la gira de Destiny. Bailaban de maravilla y cuando se juntaron, a pesar de ser estilos diferentes, supieron fusionarse de la mejor forma.

— Hola a todos. — dijo Destiny reprimiendo una sonrisa y seguida por Greg.

Él estaba a punto de cumplir su sueño de ser padre junto a la persona que amaba y ella estaba impaciente por contarles a todos las buenas noticias.

Tras media hora bebiendo y riendo, ignorando las malas caras de Daniela y Derek, se sentaron a la mesa para cenar.

— Familia, tenemos que decirles algo. — dijo Greg.

— Estamos esperando un bebé. — y las caras de todos fueron una poesía.

N/A: FELIZ HALLOWEEN!!!!

Pasó por acá para decirles que el 5 de noviembre estaré publicando una nueva historia y les dejé una pista en este capítulo :)

Soy muy obvia lo sé jujuju.

los amo. <3