Capítulo 26

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Taylor's POV

Las películas nos muestran historias de la vida de las personas, algunas son reales y otras son completamente falsas, pero algo en lo que no mienten es cuando muestran como son las familias de la alta sociedad, por lo general todas las familias son arrogantes, cuidan su imagen y prácticamente los padres ya tiene planeada la vida de sus hijos, y eso no estaba nada lejos de mí realidad. Desde que era una niña mis padres me contrataron tutores para que me enseñaran a actuar como una señorita, me enseñaron lo que era bien visto ante la sociedad según ellos, nunca me dejaron ir a un parque o salir a correr, mi vida se resumía en estar encerrada con tutores de diferentes materias. Mis padres querían que fuera la esposa perfecta para Patrick, creo que ellos nunca mencionaron que yo sería la que tomaría el control de la empresa, no sabía cuál era la idea de vida que mis padres tenían, pero estaba segura que no era lo que yo quería.

Recuerdo ser una persona arrogante, a la que no le importaba lastimar a los demás con tal de conseguir lo que quería, y eso sucedió porque siempre tuve todo lo que quise, no había ni una persona que me enseñaran que estaba mal mi forma de actuar, trababa muy mal a las personas que trabajan para mi familia, hasta que un día Kendall apareció y prácticamente me puso en mi lugar, a veces pienso en que si ella no se hubiera convertido en mi amiga, ahora sería una auténtica perra, gracias a Kendall y a que su familia se convirtió en la mía aprendí muchas cosas de las cuales les agradeceré toda mi vida.

Pero Rebeca... Rebeca vino a sacarme completamente de mi zona de confort y yo amé que eso pasará, en verdad era feliz, gracias a ella aprendí a ver la vida de una forma completamente distinta, me enseñó qué la felicidad no la da el dinero sino el amor. Con ella estaba viviendo mi propia película sin necesidad de pedirlo, en ella estaba la persona que siempre espere, alguien que me quisiera en todas mis facetas, que estuviera conmigo en mis días más alegres y en mis días tristes, que me viera como si fuera lo más hermoso en vida. Puedo decir que Rebeca es lo más hermoso que ha pasado en mi vida, porque gracias a ella aprendí a vivir y no solo a sobrevivir.

Ella puso mi mundo de cabeza desde el día que nos conocimos y en verdad no pensé en que se convertiría en la persona más importante en mi vida, pero el destino no es algo que podamos controlar, Rebeca llegó a provocarme sentimientos que nunca había sentido, ni siquiera con Patrick, y era algo que me aterraba y me fascinaba, no había descubierto por que me sentía de esa manera solo con ella, pero desde el día que nos besamos encontré la respuesta a todas mis preguntas, pero las personas preferimos ser ignorantes a afrontarnos a la realidad, si lo decía en voz alta no sabía que pasaría, yo era una auténtica cobarde, pero después de que Rebeca no me respondiera mis llamadas y mensajes me pregunté si valdría la pena ocultar mis sentimientos y perder a la única persona que me ha querido y a la que yo he querido de la forma más pura y sincera que pueda existir, y entonces entendí lo que debía hacer.

Cuando llegué al hotel, eran las 12:30 de la noche, pedí una habitación para mí y afortunadamente estaba disponible la suite presidencial, no era el tipo de hotel al que yo solía ir, pero tampoco estaba tan mal para ser un hotel de 4 estrellas, suponía que Rebeca debería estar durmiendo por la hora, pero yo no podría conciliar el sueño sin aclararle lo que había pasado. Traté de hablarle a su teléfono, pero me mando directo a buzón todas las veces que lo intenté, así que le marqué a Jade quien al tercer tono me contestó con su voz de recién levantada. Me insultó un par de veces mientras la trataba de convencer, afortunadamente estaba en la misma habitación que Rebeca, así que ella luego de hacerme prometer que le conseguiría boletos para Coldplay accedió, diciéndome que en un par de minutos estaría en la habitación.

—Estará medio dormida, pero para nada estúpida —hablé divertida para mí misma luego de colgar la llamada.

El silencio era ensordecedor y veía los minutos pasar esperando a que llegara. Estaba sentada en el sillón mientras movía mi pierna nerviosa viendo todo en la habitación tratando de encontrar una distracción, era más pequeña que en las que yo me había hospedado, pero era bonita y estaba muy bien decorada.

Todo de míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora