No se cuales fueron sus reacciones, solo se que ya abrí la puerta a eso que intente negar, ya no hay vuelta atrás.
– Lo quiero__ decirlo en voz alta es como si me quitaran un peso de los hombros __ no se cuando paso ni en que me momento comenzó. Puede que iniciará cuando me empecé a sentir segura a su lado. Soy tan tonta que no le preste atención a lo que mi cuerpo ya sabía, creo que por eso lo bese...
–¡Stop! ¿Lo besaste?
– ¡Bese a Dylan!__ ignoro a Leonardo atrapada en mi burbuja de autoiluminación __ y lo peor, fue que me gustó... cuando lo vi, vi esos ojos verdes, sinceros, reales. Ya no se ni como explicarlo...
– Linda, estas enamorada __ Nicci con una dulce sonrisa, admite algo que ya se y que me aterra más.
– ¡Pero no puedo quererlo!__ exploto entre lágrimas pasándome las manos por la cara. La frustración es mi mejor amiga __no debí besarle, él no debió besarme.
– Ya va, ¿Qué?
– ¡Tenía que alejarme!__ sigo sin prestarle atención a Leo, justo ahora, solo pienso en unos ojos verdes __ y lo hice... pero demasiado tarde. ¿ ahora cómo lo arreglo?
El nudo en mi garganta crece tanto, que solo puedo llorar soltando pequeños hipidos de impotencia.
Observo a los chicos con esperanza, buscando en ellos una solución lógica.
– Ok__ Charlie interrumpe a Leo que se preparaba para hablar ganándose una mala mirada de este, igual mi hermana se abre paso demostrando su gran impotencia. Ella es pequeña, pero logra intimidar cuando está enojada. Y justo ahora lo está __ no me molesta que te hallas encerrado sin decir nada...
– Pues a mi si__ Leo alza la mano
–Lo que me molesta __ hace que no lo oyó __ lo que me tiene con unas ganas de encerrarte yo misma para que entres en razón es, ¿por qué estas aquí llorando como bebé en vez de estar disfrutando con un hombre que todos sabemos, haría cualquier cosa por ti? ¿Estás enamorada? En hora buena que lo notarás porque yo ya lo sabía. Todos lo sabíamos __ abro la boca estupefacta buscando ayuda en los demás, ellos solo bajan la cabeza dándole la razón a Lie__ Por dios, Mari quita esa cara. Era obvio.
–¿Qué? ¿Cómo?__ estúpidamente boqueo como un pez sin ideas.
– Número uno, sonríes cuando escuchas su nombre __ alza un dedo. Trago saliva nerviosa __ dos, tus ojos brillan y hablas de él por los codos. Tres: pareciera que al estár juntos creas una burbuja en donde solo están los dos. Cuatro: con Dylan haces cosas que ni con nosotros te atreverías. Eres medio loca, pero nunca te había visto intentando patinar aunque me ofrecí a enseñarte mil veces.
– Jamás ibas con nosotros al río por no saber nada... cuando dije lo de la feria pensé que te negarías. Pero fuiste, solo porque iba él __ Leonardo por fin habla completo. Aunque como que prefiero que se quede callado.
– Me dejaste en la tienda sola con Daniel para ir a cuidarlo, y no te recriminó, pero todos sabemos que odias la irresponsabilidad y que nunca hay excusas para no ir a trabajar.
– Dejaste que Nicci te vistiera a su modo, y ni hablar de las tantas veces que permitiste que te maquillara desde que lo conociste, cuando odias que toque tu cara __ Charlie retoma la palabra cruzándose de brazos. Todos me miran haciéndome sentir pequeña en mi cama.
Solo porque tienen razón.
Nunca había ido a patinar por miedo, pero fui emocionada y confianda sujeta del brazo de Dylan; sabía que él no dejaria que nada me pasara. Fue lo mismo el día en el lago, que me lanzará al agua en vez de aterrarme hizo que me aferrará más a él cuando. Siempre e sido una maniática de la responsabilidad, pelee tantas veces con Dalia por no ir a trabajar, y yo no fui por ir con Dylan... ¡Inconsciente me maquille para Dylan!
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Bajo La Sombrilla Azul.
HumorÉl es un gruñón solitario. Ella una alegre cariñosa. Ya se, la típica historia de la chica que le enseña a vivir alegremente a un chico deprimido. Eh..., no. Dylan no estaba deprimido y tampoco quería enseñanzas de vida. Y aún así, se empecina en a...