Capítulo 54

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Capítulo 54

Por la fuerza que ejerció Esteban, María cayó sobre su cuerpo y manos terminaron acostados en media cama...

M: estás herido, Esteban...

E: estoy bien... Te lo prometo... Ahora te necesito, María... Te deseo...

Con un brazo le envolvió la cintura y giró, para dejarla bajo de su fornido cuerpo...

M: no quiero que vayas a lastimarte, mi vida... Solo quiero cuidarte... (Acariciándole el rostro)

E: puedes cuidarme de otro modo...

María no quería ser irresponsable con la salud de Esteban, pero su verde mirada parecía brillar de deseo... Y su cuerpo ardía de deseo...

Además también ella lo deseaba y lo amaba con locura...

Y mientras la besaba, él sonrió cuando sintió las manos de su mujer abriéndole los botones de su camisa...


"El hombre que yo amo sabe que lo amo

Me toma en sus brazos y lo olvido todo;

Él es mi motivo, es mi propio sol,

Él me da alegrías que nadie me dio..."


-Despacho de Presidencial-

Gabriel llegó buscando a su mamá y a su papá.

Las secretarias disfrutaban ver al chico, cada día pareciéndose al presidente...

Sec1: no están aquí... Salieron...

Ga: pero mi papá no puede salir... Creo...

Sec2: se fueron los 2...

A tiempo llegó la asistente del presidente.

Ga: Emilia, ¿sabes dónde están mis papás...? Tengo que contarles algo...

Asist: tu mamá acompañó al señor a descansar... De seguro lo dejará dormido y vuelve a bajar...

Ga: sí, necesita asegurarse que papá descansa... ¿Todos los hombres seremos así o solo Los San Román...?

Asist: la gran mayoría son así... Pero dime, ¿puedo ayudarte en algo hasta que tu mamá baje...?

Ga: Fer viene en unas semanas...

Asist: ¿la princesa Fernanda??

Ga: sí... Pasaremos el verano juntos...

Asist: espera un momento, entonces es cierto que tú y ella...


-Habitación Matrimonial-

Los amantes se terminaban de desvestir, María siendo muy cuidadosa, con cierto temor de lastimar a Esteban... Pero la pasión los nublaba...

A plena luz del día...

Él la tomó de la barbilla tiernamente... Le capturó la boca con un dulce beso... De esos que la derretían...

Una mano de Esteban comenzó a moverse de arriba abajo por las curvas femeninas... Todas... Sus caderas, costados... Senos... Piernas... y Aún entre ellas...

M: mi amor...

Ella quiso aspirar aire, los besos la estaban dejando sin nada en sus pulmones...

MI DECISION IIIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora