MI DECISION III

Capítulo 17

Capítulo 17

Esteban no se lo podía creer, su hijo nunca le mencionó cómo llamaría a su primer bebé.

M: mi vida...

Y si María lloró de emoción, Esteban también se emocionó al borde de las lágrimas. Era un sentimiento bastante particular el de convertirse en abuelos por primera vez...

Además del hecho que le habían llamado "Esteban".

E: ¿cómo se va a llamar...?

Mi: "Esteban"... Como tú...

E: hijo...

Parecían 3 sentimentales, llorando juntos pero de felicidad... En torno a un recién nacido.

Mi: no necesito decirles los motivos para llamar así a mi primogénito... ¿O sí...?

María en medio de su marido, su hijo y su nieto, 3 generaciones unidas en un abrazo, y era Esteban quien los envolvía a todos, como desde que se casaron...

Mi: has sido un papá increíble... Un amigo incondicional... El que me ha enseñado todo... Y que además de todo lo que nos ha dado, nos amas incondicionalmente...

E: mi vida...

Mi: deseo que mi hijo llegue a ser como tú...

E: no... Pobrecito... (Haciéndolos reír en medio del momento emotivo)

Mi: papá...

E: gracias, hijo... Es una gran responsabilidad que mi nieto lleve mi nombre...

Mi: y un orgullo para él... Estoy seguro...

M: ¿cómo está Irina...? (Sosteniendo a su nieto en brazos)

Mi: agotada...

E: debe reponer fuerzas, porque este caballero dará mucha lata los primeros días...

M: se parece a Miguel... ¿verdad que sí, Esteban...? (Mirando junto con su marido y su hijo al bebé)

E: sí, mi amor... (Muy emocionado y abrazando a su hijo) Felicitaciones, mi vida... Ya sabes que cuentas con nosotros para lo que necesites... Siempre...

Mi: gracias, papá... La verdad es que estoy feliz, pero asustado a la vez...

E: es normal, hijo... Pero recuerda que ahora tu esposa y tu hijo dependen de ti...

M: ¿crees que podamos verla...? Un minuto al menos...

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7 de la mañana y el matrimonio San Román se terminaba de arreglar en el inmenso vestidor, no habían descansado mucho, pero tenían infinidad de cosas que atender.

E: mi amor... (Acomodándose las mangas de la camisa) Estuve pensando... ¿por qué no le proponemos a los chicos que se queden aquí unos días...?

M: Esteban... Iba a proponerte lo mismo... Pero no quise que pensaras que quiero sobre protegerlos...

E: ¿cómo voy a pensar eso...? Nosotros hicimos lo mismo cuando nació Miguel... Mis papás nos ayudaron mucho... ¿hmm...?

M: lo sé... Lo recuerdo a la perfección... (Buscando sus brazos y los encontró abiertos para ella)

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9 de la mañana cuando el Presidente y la Primera Dama arribaban al hospital donde había nacido su primer nieto.

Fue ese el pitazo para la prensa.

-Suite 4056-

M: ¿cómo te sientes, hija...? (Junto a su nuera)