°•• Día 9 ••°

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Al sonar la alarma desperté, suspiré un poco con el recuerdo de Jimin al despertar. Imaginar al menor recién despierto me hacía sonreír, su sonrisa, sus mejillas sonrojadas, su hermoso rostro hinchado y su cabello y cuerpo perfectos, necesitaba sentirlo, pero de la forma más hermosa, en un beso y con cada abrazo, gruñí en un quejido por no haberme atrevido a besarlo.

— Estúpido cobarde

Me dije a mi mismo y me levanté sin ganas, me cambié de ropa y al salir de la habitación vi a mi padre viendo la televisión, tragué pesado y traté de cruzar el salón sin hacer ruido, sin embargo, no me funcionó.

— ¿A dónde vas niño? Prepárame algo de comer
— Debo ir a clases...

Dije con miedo y traté de seguir caminando hasta que lo vi levantarse.

— Te he dicho que me hagas de comer, no es una puta pregunta y no me importa que mierda debas hacer.

Vi que tomaba de la botella de vodka y decidí obedecer antes de que se enojara, dejé mis cosas y comencé a hacer todo lo que me pedía, luego de la comida tuve que limpiar toda la casa como si fuera su maldito esclavo y no tuve tiempo de ir a clases.

Luego de unas horas se marchó a un bar y suspiré aliviado, limpié lo último que manché para hacerle una copa y mientras lo limpiaba se cayó y me corté con un pequeño trozo de vidrio.

—¡Joder!

Envolví mi dedo en un trozo de papel tratando de detener la sangre hasta que escuché que llamaban a la puerta, me confundí un poco y fui a abrir, al ver a Jimin alcé una ceja y lo miré con curiosidad.

— ¿Estás bien hyung? ¿Por qué no fuiste a clases? Te mandé miles de mensajes

Vi su mirada preocupada y lo dejé pasar sintiéndome un poco mal.

— Lo siento, tuve que hacer algunas cosas y no miré el celular... ¿Cómo sabes dónde vivo?
— Tengo muchos contactos, puedo saber lo que quiera

Vi como miraba mi mano envuelta en el papel.

— Te lastimaste
— Estoy bien Jimin tranquilo
— No, no estás bien

Lo miré sorprendido al ver que se acercaba y tomaba mis manos, miró el pequeño corte y suspiró.

— ¿Tienes algún botiquín?
— Hay uno en el baño...

Fue rápido a por él y al llegar se sentó en el sofá y me hizo un gesto para que imitase su acción, tomó mi mano y comenzó a curar la herida mientras trataba de retener algunas muecas por el dolor.

— Debes tener más cuidado hyung, limpiaré yo el resto, tú quédate aquí
— Pequeño no hace falta
— Déjame hacerlo por favor...

Suspiré y terminé asintiendo, no podía decirle que no a la cara que ponía de perrito abandonado, se levantó y comenzó a limpiar con cuidado los trozos de vidrio, me sentía nervioso ya que no sabía cómo reaccionaría mi padre si llegase y viera a Jimin. Al terminar vino conmigo y me abrazó, ya se había vuelto un hábito.

— Pensé que tuviste una sobredosis y me asusté...

Al escucharlo no supe que responder, por la cantidad que ingería de droga cada día lo raro es que no haya tenido ninguna, tan solo correspondí el abrazo y acaricié su cabello con suavidad.

— Perdón por asustarte pequeño
— No pasa nada... Pero la próxima vez avísame por favor

Asentí y tomé la mano del menor, me fijé en que tenía la muñeca un poco roja.

— Todo bien en clases?
— Oh sí, estuve con Taehyung y Jungkook, si lo dices por esto es que tenía una pulsera que me apretaba y recién me la quité

Hice un suave masaje en su muñeca un poco más tranquilo al saber que no estuvo solo.

— Es hora de que vuelvas a casa antes de que llegue mi padre
— ¿No te deja traer invitados?
— Algo así...
— Está bien

Lo miré curioso, ya que a pesar de responder no se había levantado, me miró con duda y me dio un rápido beso en la mejilla, lo cual me hizo sonreír.

— Nos vemos mañana pequeño

El menor sonrió y tomó sus cosas saliendo de la casa, suspiré embobado. El tiempo con él pasaba demasiado rápido y ya era de noche, deseé que llegase sano y salvo a casa y fui a mi habitación para dormir antes de que llegase mi padre.

𝙔𝙤𝙪𝙧 𝙇𝙞𝙚 - 𝚈𝚘𝚘𝚗𝚖𝚒𝚗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora