Corona de Espinas

Capítulo 33

De repente, mis sentidos regresaron. Cuando abrí mis ojos somnolientos, pude sentir la luz de la luna entrando sigilosamente. Seguí parpadeando durante mucho tiempo.

Tuve que recomponerme. Estaba hablando con Evan y luego me quedé dormida. Ha pasado mucho tiempo desde que tuve este tipo de sueño pacífico, así que sentí como si mi cuerpo y mi mente estuvieran relajados.

¿Evan? Girando mi cabeza hacia mi lado, no encontré a nadie. Estaba tratando de levantarme, preguntándome adónde había ido en ese momento, pero algo se derrumbó. Cuando miré hacia abajo, pude ver la manta de dormir de Evan.

Se vieron dos pies pequeños frente a él. Lentamente alzando los ojos, vi pies y luego piernas, rodeadas por dos brazos. Luego su cuello y cara, ojos rojos y cabello blanco suave.

"¿Te despertaste?"

Me sentí un poco incómoda y estaba buscando palabras para responder, pero luego Evan continuó.

"Puedes dormir más. Te ves cansada."

¿Me veo cansada? Ahora que lo pienso; No recuerdo haber dormido cómodamente desde que Evan entró en la torre. La torre de la bruja, donde no había día y noche, tenía un flujo de tiempo, lo que me dificultaba dormir cuando quería.

El estilo de vida normal de Evan me obligó a seguir su ritmo y movimiento. A diferencia de antes, cuando solía acostarme y pasar la mayor parte del tiempo durmiendo, tenía que permanecer despierta y activa, lo que se volvió un poco difícil para mí.

Era cierto que no me cansaba tanto incluso si no dormía, pero no estaba exactamente acostumbrada a eso.

Evan todavía estaba agachado, envolvió sus rodillas con ambos brazos y me miró fijamente. Pude ver la luz de la luna que se filtraba por detrás. Para Evan, incluso la luna parecía bendecirlo.

La luz de la luna se esparció por la torre. Su rostro se había vuelto casi transparente con el resplandor blanco, y solo sus inusuales ojos vidriosos de rojo eran vívidamente visibles.

"¿Duele?"

No pude entender lo que quería decir, así que lo miré. Evan extendió su mano temblorosa, fue un toque tan cuidadoso y delicado, al igual que la primera vez que tocó el libro de cuentos que ni siquiera pude pensar en esquivarlo.

La mano de Evan finalmente se deslizó por mi mejilla.

Como si la bendición de la luz dada a Evan me hubiera pasado, podía sentir el calor y la picazón a través de mis mejillas. Levanté la mano y toqué la cara que Evan estaba acariciando. Sentí una cicatriz llena de baches. Oh, ¿esto es lo que quiso decir?

Él ha estado interesado en mis cicatrices antes, pero estaba en la oscuridad. Mi rostro debe verse aún más horrible en un lugar brillante. Estaba mejor cubierto de sangre seca.

Evan estaba de espaldas a la luz de la luna, pero yo estaba recibiendo fragmentos de luz que se dispersaban detrás de él. Probablemente mis cicatrices eran fáciles de ver, pero no quiero que él las vea. Esto también sería codicia. Era solo un deseo sin sentido de no mostrar mi feo aspecto al guerrero.

"No duele".

Era una herida que se había curado hace mucho tiempo. Ahora, era solo una cicatriz. No puede doler, pero Evan frunció el ceño. Sus iris rojos estaban llenos de dolor. No puedo entender por qué está herido después de verlo.

Reaccionó igual antes. Sigue demostrando que es un chico débil y tierno.

La diferencia era que en ese momento solo se había compadecido del dolor. Pero ahora está enojado.