Corona de Espinas

Capítulo 24

El niño estaba sentado apoyado contra la pared, aparentemente de mal humor. 

No hubo respuesta cuando traté de enseñarle, y me ignoró incluso si le dije que regresara a casa. 

El niño no debería haberse quedado aquí demasiado tiempo, ya que tardó varios días en llegar. Saber que puede vivir en el Bosque de las Brujas durante tanto tiempo, le haría ganar aún más ojos juzgadores. 

Pero no parecía tener ninguna intención de volver.

No puede ver debajo de la nariz porque tiene la cara enterrada en el brazo. El chico parecía particularmente aficionado a esa postura. 

Agacharse. 

Agacharse y enterrar su rostro entre sus brazos. O posarse sobre él. De alguna manera sentí lástima por él y quise darle un abrazo.

Traté de concentrarme en el libro, pero mis ojos seguían mirando al chico. 

Finalmente, cerré el libro y lo dejé. Creo que podría estar sentado allí a propósito. No puedo ignorarlo, simplemente ignorarlo.

"Niño."

"Mi nombre no es niño".

Entonces, ¿cómo debería llamarlo? Me quedé sin habla por el desconcierto.

Pero el chico todavía solo pone su barbilla en sus brazos con una mirada malhumorada en su rostro y mira hacia la oscuridad.

Ahora que lo pienso, no sabía el nombre del chico. Una vez, tuvimos una conversación sobre él, pero su única respuesta fue que no tenían nombre. 

Me han llamado bruja durante mucho tiempo, y el niño tampoco tenía a nadie que lo llamara.

"Si no quieres que te llamen chico, deberías decirme cómo llamarte".

"Nada. Mi nombre murió con mi hermano cuando murió. Todo el mundo me llama monstruo".

No pude entender qué expresión estaba haciendo en la oscuridad. Era increíble que los dos opuestos de luz y oscuridad pudieran parecerse entre sí. 

Tal vez sea porque estamos en el mismo mundo. Sí, tal vez sea porque el mundo es el mismo que nos está impulsando tanto.

"Entonces, ¿deberíamos hacer un nuevo nombre?"

El chico finalmente me mira. Sus ojos estaban muy abiertos como si no esperara esto. Me pregunté como si hubiera visto la sensación de alegría en esos ojos. ¿Es un placer tener un nuevo nombre?

Estaba a punto de decirle de nuevo que había logrado que me mirara de todos modos. Al darse cuenta de la expresión que tenía, el niño rápidamente giró la cabeza y la enterró de nuevo en su brazo. No tuve más remedio que detenerme como estaba.

No creo que podamos dejarlo pasar. Después de un pequeño suspiro al final, abrió la boca.

"¿Qué tiene de bueno?"

El chico no se movió.

“No voy a morir de todos modos. Si has escuchado rumores sobre mí, lo sabrías".

El chico ha estado así desde que intenté apuñalarme con mi propia espada. Así que esa era la única razón por la que estaba molesto. No sabía qué decir, pero por ahora abrí la boca de nuevo, pensando que calmar al chico debería ser lo primero.

"Fue mi culpa…"

Elegí mis palabras con cuidado. El chico me miró con expresión de sorpresa. Pero pronto preguntó con el ceño fruncido.