The Curse - Supercorp AU

Capítulo 16

*Lady Kara Pov.*

Los soldados estaban todos formados, me había quitado la túnica que tenía el símbolo de los Pendragon y que ahora representaba a Krypton. Tenía la corona en mi cabeza y estaba sobre el caballo con Morgana a mi lado. Usé mi oído y escuché el galope de los caballos, los gritos de los soldados y el gruñir del dragón. Sí, venían para acá.

—¡Prepárense! —Les grité y supe que tenía que hacer algo más—. ¡Sigan el liderazgo de la reina Morgana!

Me bajé del caballo y le di mi corona a Morgana, la cual me miró extrañada.

—¿Qué haces? —Dijo y se interrumpió cuando me vio sacarme la armadura—. ¿Vas a convertirte?

—Kilgharrah viene con ellos. —Dije y miré a Tristan—. Quedas como segundo al mando. Ya sabes qué hacer.

Me asintió y di unos pasos adelante para mirarlos a todos.

—Recuerden que están defendiendo sus hogares, su tierra y sus familias. —Me terminé de quitar la armadura y me preparé para quitarme el resto—. Y no se preocupen, no les haré daño.

Miré a Morgana y le asentí, ella sacó a Excalibur y yo miré adelante. Me terminé de desnudar y sentí a Morgana aclarar la garganta.

—¡Ojos al camino! —Dijo con dureza y supe que estaba frenando a los que me estaban mirando.

Ya desnuda, giré mi rostro, la miré y le guiñé un ojo. Di unos pasos hacia delante y sentí el calor en mi cuerpo. El dolor en mi espalda y cómo salieron las alas sin dudar. En tanto salieron, miré hacia arriba y grité de dolor mientras volé y dejé que mi cuerpo hiciera la transformación en el aire. Mi vista cambió y no tardé mucho en transformarme. Cuando estuve lista miré hacia delante y noté a Kilgharrah volando sobre el ejército no tan grande. "Es un ejército pequeño, será fácil. Yo me encargo de Kilgharrah." Le dije a Morgana con el pensamiento y me asintió. "Ten cuidado, amor."

—¡¡Prepárense!! —Les gritó y todos sacaron sus espadas—. El ejército es pequeño, nos encargamos de ellos mientras Kara se encarga del dragón.

Ya viendo el ejército a la vista, le hice un gesto a Tristan con la cabeza y noté la mirada sorprendida de todos los soldados hacia mí. Volé en reversa y luego di un giro para acercarme al dragón.

"¡Kilgharrah!" Le grité con mi mente y nos mantuvimos en el aire mientras los ejércitos en el suelo estaban a punto de enfrentarse. "Te haré pagar lo que le hiciste a mi pueblo."

Agitó sus alas hacia mí y cuando sentí los gritos, el sonido de espadas y enfrentamiento, él me miró.

"Eres muy valiente, muchacha. Pero tengo más de mil años, no podrás contigo."

"Pruébame..." Le dije y se acercó hacia mí.

Voló directo con sus garras y me arañó. Yo hice lo mismo con él y lo empujé, sentí el dolor en mi cuerpo por la herida pero lo soporté y aproveché para lanzar fuego a un grupo de soldados bastante grande que se quería acercar a donde estaba Morgana. Luego volé en círculo y tanto él como yo nos lanzamos fuego. Cuando nos cansamos de lanzarlo, volé hacia atrás y lo llevé a la zona donde estaba la trampa. Ahí estaba Sir Kay con otros dos soldados, destaparon el cofre con el oro y aterricé en el suelo para observar cómo Kilgharrah quedaba hechizado por el oro. Le hice un gesto a Sir Kay y los soldados para que se vayan, se subieron a sus caballos y se fueron.

"¿Lo quieres?" Pregunté y me miró molesto. "Ven... tómalo."

Se lanzó hacia el tesoro y en tanto lo tocó, gritó de dolor ante el hechizo de Morgana. Aproveché para lanzarme hacia él y morder su lomo. Incrusté mis dientes y dejé una gran herida ahí. Gritó de dolor y me empujó con su cola a un lado. Se impulsó con los pies y voló erráticamente. Y exactamente cómo imaginé que haría, usó sus últimas energías para lanzarse sobre el castillo. Cayó pesadamente, destruyendo gran parte del edificio. Cuando se impulsó para volar, terminó de romper la otra parte y huyó. Los soldados de Essetir estaban asustados y supe que era mi momento. Volé hasta ellos y me puse frente a los soldados de Krypton y Camelot. Lancé un grito que los asustó y uno de ellos se acercó para atacarme, abrí mi boca y lo mordí. Lo sacudí y sentí que estaba destrozando sus huesos. Saber que vinieron a atacar a mi pueblo me hizo enfurecer y me acerqué a cada uno para hacerle lo mismo. Lancé los cadáveres a un sitio y los prendí fuego para luego extender la llama hacia los demás. Los hice carbón y los que quedaban salieron corriendo. Quería ir tras ellos pero alguien se puso delante, Morgana. Estiró su mano hacia mí y me miró. Excalibur estaba cubierta de sangre y parte de su rostro también.