Cielo sin estrellas || Rafe Cameron

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POV OLIVIA

El agua corriendo por todas las partes de mi cuerpo, el mayor sentimiento de paz.
Apague la ducha, cogí las toallas, me seque un poco y puse música en la radio.

Razones por las que adoro las casas antiguas: hay cosas antiguas.

Estaba tranquila cantando, solo con la toalla cubriendo mi cuerpo ya que me estaba peinando el cabello cuando siento abrir la puerta, y si, ahí estaba él mirándome con su estúpida y hermosa sonrisa.
Esa sonrisa que es mi perdición. Trae una camisa con los botones de arriba abiertos dejando al descubierto un poco de su pecho, se ve tan jodidamente bien.

-lo siento no sabía que estabas aquí -mintió-

-si que sabías -le bajé el volumen a la radio-

-si, si que lo sabía -se acercó a mi cojeando cosa que me causó gracia- no te rías, si duele.

Y obviamente.. reí más.

-lo.. siento es que -reí por unos segundos hasta que él se me unió-

Y no sé cómo terminamos riéndonos a carcajadas como dos imbeciles ebrios a las 11 am.

-tu abuelo me cae bien -dijo una vez que ambos nos calmamos-

-a todos les cae bien -bromeé-

-mhm, sabes, él dijo algo que.. -la voz de mi abuelo lo interrumpió-

-solo uno de los dos en el baño -advirtió y Rafe levantó las manos-

-ya me iba -me guiñó un ojo y salió-

[...]

-¡oigan, eso no fue justo! -reclamé-

Hace exactamente quince minutos comenzamos a jugar a las cartas y por sorpresa Rafe y mi abuelo ganaron dos rondas seguidas, ya es tarde y el día transcurrió demasiado rápido.
Con las personas que amas todo pasa tan rápido.
Seguimos jugando cuando de repente tocan el timbre y mi abuelo fue a abrir.

-me gusta que te lleves bien con él -le hable a Rafe-

-sería imposible no hacerlo, es demasiado genial -sonrió-

-si lo es, y tú eres demasiado feo -me burle apretando sus mejillas-

-ya basta, parecemos Topper y Sarah -se desanimó al decir sus nombres-

-iugh, daban cringe, pero nosotros no, estúpido -solté sus mejillas y reímos levemente-

-¿Olivia? -preguntó ella acercándose-

El silencio reinó, no sabía que responder, no sabía cómo actuar, de pronto en mi mente vi ese mensaje en el que me decía que sabía lo que Rafe había hecho y sentí miedo.

-¿mamá? -la miré sorprendida-

¿Por que diablos me sorprendo? El abuelo dijo que venía a diario.

-¿qué haces aquí? -tenia expresión neutra-

-yo.. nosotros vinimos a ver al abuelo -miré a Rafe en señal de ayuda-

-si.. y -mamá lo interrumpió-

-¿y como se les ocurrió desaparecer la otra vez? -suspiró enojada- ¿tienen idea de lo mucho que me preocupe? ... Olivia pensé que no eras así.

-mamá, lo siento, pero la casa era un infierno -me acerque a ella quedando frente a frente- y siempre pasa lo mismo, papá pide perdón y tu vuelves, eso... eso no es sano.

-Olivia -el abuelo llamó mi atención-

-¿que? Es verdad, y lo saben.

Termine de decir eso y fue cuando sentí un golpe en mi mejilla, la mano de mi madre me había golpeado, me ardía, así que puse mi mano sobre la mejilla mientras veía como el abuelo sacaba a mi madre de la casa.
Rafe se acercó a mi y me preguntó si estaba bien, no fui capaz de responder, no podía gesticular palabras, solo veía lo que pasaba a mi alrededor.