Cielo sin estrellas || Rafe Cameron

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-¿Estas seguro de que era la 145? -pregunté mirando la lujosa habitación frente a nuestros ojos-

-si, estoy seguro -dijo en tono obvio sin soltar mi mano-

Luego de que Rafe despertará vinimos a la habitación de hotel que nos correspondía, es realmente grande y hermosa, Rafe fue quien tuvo la idea de venir a este hotel así que, esta vez, no me puedo dar méritos. Luego de ver el comedor y la sala de estar, fuimos a las... no, a la habitación, si, una. Esto solo significa una cosa.. tendré que dormir con Rafe, ¿alguien quiere cambiar de vida?

A quien engaño, Rafe ahí te voy.

-hay una sola cama -murmuré quejándome-

-¿y...?

-y... somos dos.

-oh, claro, lo siento, olvidé que a la reina de Roma no le gusta dormir con las personas con las que tiene sexo -bromeó mientras se lanzaba a la cama-

-no es eso, estúpido -me crucé de brazos y lo miré con atención-

Con muuucha atención, es decir, ¿han visto sus músculos, o su mandíbula notoriamente marcada, o su V en el abdomen?..., no es como que estuviera recordando las veces que lo he visto sin playera.

-deja de comerme con la mirada y ven a hacerlo con la boca -se sentó mirándome de manera desafiante-

-¿y si no quiero? -bromeé-

-y si no quieres.. -en un movimiento rápido se levanto y me atrajo hacia él poniendo sus manos en mis caderas- te obligo.

-ti ibligi -lo imite intentando safarme de su agarre, no tuve exito-

-eres tan linda y tan estúpida a la vez -dijo mientras acariciaba mi cintura-

-psicopata -murmuré bromeando-

-tu padre -me miro desafiante-

-oh vamos, ¿en serio quieres hablar de padres psicopatas?

-si.. no, no quiero -se acerco mas a mi cara-

-¿vamos a comprar el vestido? -susurre mirando sus labios-

-¿segura de que no prefieres quedarte aqui? -susurro para luego juntar nuestros labios-

Sus labios, su sabor, su aroma.. todo es tan perfecto en él.

Finalmente le seguí el beso y él poso una de sus manos en mi cuello presionando este levemente para acercarme aun mas a él.

-tenemos que ir -murmure alejandome un poco de él-

-no tenemos que ir si tu no quieres.

-yo si quiero, eres tu quien no quiere imbecil -reí levemente-

-bien.. vamos -tomé su mano para dirigirnos a la puerta pero el me volteo agarrandome por el cuello- oye, ¿no se te olvida algo?

-si.. se me olvida decirte que tienes una rara mania con agarrar mi cuello -dije mirando su mano la cual tenia varios anillos-

-hace un tiempo dijiste que te gustaba.

-me sigue gustando -me acerco a él y me besó rapidamente-

-ahora si..., vamos -tomó mi mano para salir de la habitación-

[...]

-¿y este? -pregunte mostrandole un vestido-

Tardamos media hora en encontrar una tienda, caminamos de la mano, solo nosotros dos, nuevamente, sin pensamientos estúpidos y sin alguien que nos diga que hacer y que no hacer cada dos segundos.
Ahora, ya en la tienda y con muchos vestidos frente a nuestros ojos, no podíamos encontrar el vestido ideal, hasta que ese vestido estuvo frente a mis ojos, pero como nada es perfecto, Rafe dio su opinión.