F I V E T E E N

763 96 18
                                    

Aún te pienso.

(Disculpen errores o mal narración, estoy exhausta y en algún tiempo dejé de prestar atención)

La puerta frente a él se entre abrió, permitiéndole ver por el orificio que entre ella y la pared se creaba.

De espalda, dos hombres frente a la habitación se encontraban.
La diferencia de estatura entre los presentes era notable, así como la postura en la que ambas personas permanecían.

Sus ojos, muy suavemente se posaron en el más alto, quien mantenía una postura tranquila y relajada mientras sus brazos a los costados de su cuerpo permanecían, demostrando que el ambiente le agradaba.

Por otra parte, el hombre que de una estatura más baja era, permanecía rígido. Sus hombros estaban alzados, demostrando la incomodidad que sentía al hablar. Su cuerpo estaba en una postura derecha, imponiendo su seguridad al conversar sobre algo que Gulf no alcanzaba a escuchar por lo bajo que estos susurraban.

---. Hablen más fuerte ---. Dijo observando a las dos personas que frente a su puerta de pie se mantenían.

Su cuerpo se sentía débil, provocando que un peso se sintiera en sus cansados hombros.

"Estoy harto"

Una punzada en el cerebro le hizo caer en el piso con suavidad, provocando que se deslizara sobre la pared para sentarse en el suelo hasta quedar muy cerca de la puerta.

En un instante, sus piernas sintieron un dolor atravesarlas. Sabía que muy pronto se rendiría si continuaba corriendo como si su cuerpo no estuviera sobrecargado de cansancio y cafeína. Sin embargo, el sentimiento de permanecer en el mismo lugar donde Mew, le hacía querer huir y desaparecer de ahí.

"Esto, duele demasiado"

Se sentía como un niño abandonado; sin hogar y sin salida, pero sabía que pedir ayuda era imposible.
No había nadie a quién pedir auxilio si se sentía en el colapso.

Guif estaba solo.

"Simplemente no hay...."

Nadie en quién confiar.

En algún momento todos lo traicionaron y lo dejaron, pero, ¿por qué hasta ahora sentía rencor sí en ese momento jamás se interesó en ello?.

El hombre que más amó fue el primero en dejarlo.

Gracioso.

Su madre del otro lado del mundo se encontraba, lejos de su hijo y sin saber de él, conformándose con el: 'estoy bien' que Gulf le susurraba cuando peor la pasaba.

Patético.

Su amigo, quien a su lado siempre se encontraba, sosteniendo su cuerpo si decidía descansar pero que en sus peores momentos jamás se encontraba disponible.

Triste.

"Todos ríen pero por dentro no sienten nada"

A|| MewGulfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora