Él está conociendo a alguien

6.7K 979 538
                                    

Capítulo .•°•.•°•♡•°•.•°•. 16

—Santo cielo —Tae Ho renegó bajito por sus zapatillas, sentí cómo daba palmadas en mi espalda para aliviarme

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Santo cielo —Tae Ho renegó bajito por sus zapatillas, sentí cómo daba palmadas en mi espalda para aliviarme.

Al terminar, cerré los ojos y retomé mi postura, no quería ni mirar al chico.

—Yoonie ¿Qué ocurre? ¿Estás enfermo? —preguntó Jimin angustiando mientras sobaba mi hombro.

—Solo fue la falta de experiencia subiendo a esa máquina de tortura —abrí mis ojos, Tae Ho miraba sus zapatillas.

—Iré por una botella de agua Yoonie, espérame aquí —el rubio me regaló una mirada dulce antes de alejarse. 

Tae Ho por su lado se quitó las zapatillas quedando en calcetines, unos calcetines de Pucca.

—Lo siento —solté a lo que el chico negó.

—Descuida Yoongi, no pasa nada —él levantó sus zapatillas de los cordones y caminó hasta un basurero— solo es... vomito —dijo tratando de disimular el asco

No me esperaba que las arrojara como si nada, se veían nuevas.

—Yo... las podía lavar, no había necesidad de tirarlas.

—Es que no tengo en donde llevarlas, si las hubiese subido a mi auto este se habría llenado de mal olor. No te preocupes, compraré otras sin ningún problema.

Este chico tiene buen dinero y aún así hizo que yo le comprara algodón de azúcar ¿Cómo se atreve?

—Aquí está el agua —Jimin llegó con la respiración agitada y una botella en mano— toma despacio Yoonie. 

Le hice caso y Jimin dirigió su mirada los calcetines de Tae Ho.

—Puesto que ahora me encuentro descalzo, me iré a casa ¿Los llevo? 

—Sí por favor caniche bebé.

Y dale con ese horrible apodo. Yoonie boo es mil veces mejor que caniche bebé.

—A mí no, solo recogeré a Holly y luego me iré a cambiar a mi casa, tengo planes en la noche.

—¿Saldrás? —me preguntó el rubio empezando a caminar junto a nosotros, su manito tomó el brazo del joven.

—Sí —respondí serio ante su reciente acción.

—¿Con quién vas? ¿Necesitas que te acompañe?

Al ver su manito aún aferrada al brazo del chico de zapatos vomitados, no pensé y simplemente reaccioné.

—Con alguien, acordé una cena muy importante.

Jimin ladeó su cabecita.

—¿Con Hoseok? ¿O alguien del equipo?

—No, con un chico lindo —dije sin más, habíamos llegado al auto— muy lindo.

Oh, my gay! |yoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora