Martes, 4 de diciembre, 7:32am:
Es un martes normal por la mañana, no llueve, pero hay unas nubes que aconsejan que no te separes de tu paraguas.
Denki sigue adormilado en su cama, parcialmente envuelto por sus sábanas estampadas. El despertador lleva sonando un rato, con ese insufrible pitido. Sin embargo, el único movimiento que ha hecho ha sido abrir los ojos.
Ya por fin se decide a apagar el aparato y levantarse de su cama. Se pone en pie mientras se tambalea; al contrario que otros, al despertarse no recuerda ni cómo se anda. Con uno de sus puños cerrados, comienza a rascarse el ojo en señal de que aún sigue semi dormido.
Mira por la ventana esperando ver un sol radiante pero no se encuentra nada más que decepción al ver unas nubes grises y tristes.
Aún con los ojos medio cerrados, saca su uniforme del armario y se lo pone. Normalmente no se suele poner la chaqueta y la lleva en la mano pero hoy no parecía que fuera uno de esos días donde siente esa necesidad.
Le sobra algo de tiempo antes de tener que ir a desayunar, así que decide recoger un poco su habitación y hacer la cama para que su cuarto no parezca un desastre.
Da por terminado el trabajo de recogida de la sala y se prepara para salir. No obstante, algo hace que se detenga: se empiezan a oír pequeñas gotas de agua golpeando el cristal. Denki maldice todo lo que puede la lluvia ya que acababa de guardar el paraguas en uno de sus muebles.
Al no tener más remedio, empieza a rebuscar por los cajones pues no se acuerda de en cuál de todos ellos está el paraguas. Lo encuentra pero también se encuentra con un problema: al haberse soltado el velcro que sujeta todas las varillas, una de ellas se ha enganchado en el carril del cajón y por más que intenta sacarlo con pequeños movimientos, es imposible. Harto de la situación, Kaminari decide tirar con fuerza y sacarlo de un tirón lo cual, como es de esperar, no resulta efectivo y el paraguas se desgarra completamente.
Denki maldice una vez más la lluvia. Parece que ahora la única opción que le queda es mojarse; mirando el lado positivo, tampoco parece que esté jarreando. Aunque al comprobarlo por segunda vez, se da cuenta de que las pequeñas gotas de agua se han transformado en una tormenta.
El día no podría haber empezado peor.
<<Ahora sí que me hundo>> piensa Denki para sus adentros. Decide salir de la habitación para, además de empapado, no tener que llegar con el estómago vacío a clase. Así pues, coge su mochila y abre la puerta para pasar al otro lado.
Ya se encuentra cerrando la puerta cuando algo hace que se sobresalte:
-¿No deberías coger un paraguas? Afuera está lloviendo muchísimo.- Lo sorprende Kirishima.
-¡Me has asustado!- Le echa en cara Denki.
-Perdona, es que parecías concentrado metiendo la llave en la ranura.- Ríe levemente a modo de burla.
-No creas que no soy consciente del temporal que hace fuera, es sólo que accidentalmente me he cargado el paraguas.- Suspira con un toque de rabia en su tono de voz.
-No te preocupes, vamos los dos debajo del mío y luego te acompaño a por uno nuevo.- El pelirrojo nota que está frustrado por su mala suerte; Denki puede no parecerlo pero es bastante sensible, así que decide animarlo ofreciéndole compañía.
-¡Eso sería genial! ¡Muchísimas gracias Kirishima!- El cambio en su tono de voz hace que a ambos se les dibuje una sonrisa en la cara. El uno por el entusiasmo y el otro conteniendo la risa por cómo algo tan simple ha hecho que su amigo se ponga tan contento.
ESTÁS LEYENDO
BUSCÁNDOTE {ShinKami}
FanfictionEn una sociedad superhumana donde más del 80% de los humanos tienen poderes llamados quirks, dos estudiantes de preparatoria, aspirantes a héroes profesionales, se conocen. Uno de ellos es Denki Kaminari. Un chico muy sociable con muchos amigos y co...