PESADUMBRE

Cap 22 • Nuestro no final

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UN AÑO Y MEDIO
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He hecho muchas cosas en este tiempo, como participar en competencias de natación, me he estado dedicando en perfeccionar la técnica y he podido inscribirme en dos competencias.

Me he hecho amigos en el grupo de natación, los conozco y hablamos cada que llego pero nunca me había puesto a conversar tanto tiempo ni mucho menos darme el lujo de conocerlos. Son grandes personas que me han estado ayudando en todo.

He dejado de ir al psicólogo seguido, ya solo voy una vez a la semana o a veces hasta las dos semana llego. Ya he mejorado y solo voy porque no está de más platicar de como va la vida con alguien.

También voy a la universidad, seguí la carrera de Medicina pues no me acordaba que me gustará tanto, se me desbloqueo un recuerdo de Niños donde jugábamos con Thomas a ser doctores y cuidabamos a los peluches que tenia en casa.

Así que tome la decisión de ir por ello y me ha ido super bien, a pesar que consume bastante de mis horas, he podido sacar tiempo para hacer mis demás actividades.

Hoy sabado que he llegado a casa tarde se que me espera un sobre de Sadie.

Un dibujo cada 3 meses.

He comprendido que funciona así. Cuando vuelvo de la playa encuentro tu sobre. Justo ahora que empezaba a pensar menos en ti, que me había acostumbrado a la idea de no volver a verte... No sé por qué a veces me entra mucha prisa por olvidarte y luego, cuando recibo algo tuyo, me doy cuenta de que sería una estupidez.

Con este sobre llevo 6 recibidos tuyos.

Dejo la mochila y voy a sentarme. Lo abro sin la ansiedad de las primeras veces, pese a que, nada más verlo, se me escapa una sonrisa. Esta vez hay dos folios. Cojo el primero y tapo el otro: quiero disfrutar de la doble sorpresa.

Miró el primer dibujo y alzo los ojos tratando de comprender esta emoción, el cielo está azul, el aire huele a verano. Es un retrato de Thomas que me sonríe. Lo miro detenidamente y aspiro el aire que me rodea. Acto seguido me levanto y abro las ventanas y dejo que entre el aire, me siento y lo miro de nuevo. Su mirada es muy intensa, viva. Por unos segundos vuelves a estar conmigo, aquí cerca como un instante suspendido, permanezco inmóvil durante un rato, absorto en este sentimiento, en esta felicidad serena y dolorosa.