Capitulo 27

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Lamentablemente, las palabras de Alicia resultaron ser proféticas, el equipo de Gryffindor aplastó a Ravenclaw en el partido. Más tarde en la noche, mientras se relajaba en la sala común de Ravenclaw, mis compañeros de cuarto criticaban la derrota ante Gryffindor.

Se escuchó un ruido sordo cuando Roger Davis golpeó la mesa con la mano y se quejó, "410 puntos contra 60 puntos, cómo diablos sucedió eso".

Un leve murmullo de acuerdo vino de aquellos que estaban al alcance del oído. Quizás el más desanimado fue Ryan O'Connor, a pesar de que era un hijo de muggles y nuevo en el mundo de la magia, rápidamente se enamoró del quidditch. En el mundo muggle, había sido un gran fanático del fútbol y se había mostrado escéptico de un deporte que se jugaba con escobas. Pero, después de estar expuesto a las maravillas del quidditch, el quidditch se había convertido en su nuevo deporte favorito.

Añadiendo sus pensamientos al asunto, Ryan dijo con tristeza, con su fuerte acento irlandés: "Creo que iban a quedar en último lugar este año, considerando que ya hemos perdido nuestros dos primeros juegos y solo nos queda un juego más. "

William Moore, quizás la persona más sensata en nuestro dormitorio de cuatro hombres, habló con cautela: "Afortunadamente, jugamos a Hufflepuff en último lugar y tenemos muchas posibilidades de vencerlos, considerando que son peores que nosotros".

Ryan suspiró melodramáticamente y respondió: "Conociendo nuestra suerte, lo dudo". Ryan miró a su alrededor para ver si algún miembro del equipo de Ravenclaw estaba cerca, antes de agregar en voz baja: "Lo que necesitamos es sangre nueva en el equipo".

Decidiendo opinar sobre el tema, dije: "Es demasiado tarde, no van a cambiar de miembro a estas alturas de la temporada. Lo mejor que se puede esperar es que mejores miembros prueben el año que viene. En este momento, tres de los jugadores incluido el capitán, están en su último año. Eso significa que habrá varios lugares abiertos el próximo año ".

Roger se animó y dijo: "He estado pensando, nos hemos vuelto bastante buenos durante nuestros juegos privados de quidditch. Así que, el año que viene, estoy probando para el equipo, y ustedes deberían hacerlo también".

El rostro de Ryan alternaba entre la emoción y la preocupación, preocupado y preguntó: "No sé muchachos, no he jugado mucho fuera de los pequeños juegos de recogida que hemos jugado".

Para no desanimarse, Roger respondió con entusiasmo: "Eso no es un problema; solo tenemos que pasar el resto del año practicando y jugando quidditch solos".

William se unió a la idea y agregó con entusiasmo: "Además, durante el verano, podemos reunirnos y seguir mejorando. Para el próximo año, deberíamos ser lo suficientemente buenos para el equipo".

Todos me miraron ansiosos, no queriendo hacer estallar su burbuja. Volví mi atención al Libro Estándar de Hechizos Grado 2. Cuando por el rabillo del oído, escuché a Ryan suplicar: "Vamos Alex, eres un gran guardián, ¿no sería increíble si todos tuviéramos en el equipo y ganó la copa de la casa ".

Sabiendo que no podría darles ninguna esperanza o nunca escucharía el final. Respondí despiadadamente: "No me interesa".

Ver caer las expresiones esperanzadas de mi compañero de cuarto me hizo sentir mal, pero no estaba cambiando de posición, amaba el quidditch, pero no lo suficiente como para perder cientos de horas practicando. No cuando era mejor dedicar mi tiempo a dominar la magia.

Volviendo a mi libro, extrañé por completo la mirada traviesa que Roger les dio a los demás.

Las siguientes dos semanas pasaron rápidamente, y después de muchas advertencias severas de no usar magia durante las vacaciones, llegó el momento de irse a casa. El día que todos subimos al Expreso de Hogwarts y nos dirigimos a casa para las vacaciones fue un caos, todos estaban emocionados, si no por las dos semanas libres de tareas, luego estaban emocionados de ver a sus familias.

Renacimiento en un mundo mágicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora