Renacimiento en un mundo mágico

Capítulo 55

Las semanas restantes antes de que llegara el momento de volver a casa para las vacaciones pasaron bastante rápido. Pronto, fue el último día del semestre y todos nos dirigimos a casa por un par de semanas. Durante el desayuno en el gran salón, estaba repasando mentalmente el progreso que había tenido durante el último semestre.

Hice grandes avances en el dominio de la oclumancia y mis habilidades de duelo han mejorado enormemente. Había desarrollado algunas ideas únicas que pensé que tomarían desprevenidos a mis oponentes. Contaba con la oclusión y el duelo para ayudarme a llevar a cabo mis planes en el futuro.

En una nota al margen, las continuas intrusiones mentales del profesor Snape han hecho que mis habilidades de oclumancia mejoren a pasos agigantados. Para cuando llegaron las vacaciones de invierno, pude mantener un escudo mental durante toda su clase, y solo desarrollé un leve dolor de cabeza.

Como tal, dejé a un lado mis planes iniciales de venganza en espera. Por frustrante que haya sido el mes pasado, al menos ha merecido resultados. Durante las primeras dos semanas de dolores de cabeza que entumecían la mente, había jugado brevemente con la idea de envenenar al profesor Snape, nada mortal, solo algo para hacerle saber que había consecuencias por lo que había estado haciendo. Tiene suerte de que cuando se trata de todos los asuntos relacionados con la oclusión, mis labios han sido sellados mágicamente debido al juicio de Ravenclaw.

Sacudiendo mi cabeza, aparté mis pensamientos de la profunda madriguera de la venganza. Probablemente no hubiera funcionado de todos modos, ¿qué clase de maestro de pociones camina sin algunas pociones anti-veneno?

Al otro lado de la mesa, pude ver a Jessica enfurruñada. A medida que el dolor de cabeza se había vuelto más manejable, mis calificaciones en pociones habían comenzado a volver a la normalidad. No estaban cien por ciento de regreso a donde estaba, pero estaba llegando allí. En lo que respecta a las calificaciones, estaba a una distancia increíble de ponerse al día, la única área en la que luchó fue en la transfiguración y algunas otras magias prácticas.

Estoy bastante seguro de que ella no hizo nada más que estudiar todo el tiempo, apuesto a que si Hermione y Jessica se conocieran serían las mejores amigas. Bueno, solo si no competían académicamente entre sí. Ahora que lo pienso, es mejor asegurarse de que no interactúen, no necesito ese dolor de cabeza.

Volví mis pensamientos a mis esfuerzos en hechicería este semestre. Fuera de la transfiguración, estoy por delante en el resto de mis clases. Si no fuera por la advertencia de la profesora McGonagall de que cualquiera sería expulsado si atrapaba a algún estudiante practicando transfiguraciones fuera de clase. Ella me había dado permiso para practicar los hechizos que ya había dominado, pero me advirtió que no siguiera adelante.

No estaba seguro de lo seria que estaba, así que no me arriesgué, la transfiguración tiene el mayor potencial de salir horriblemente mal. Ahora mismo, era frustrante. Sentí que me estaba frenando, al menos según ella, una vez que estemos en nuestro tercer año, podremos trabajar fuera de su clase en proyectos.

Afortunadamente, no hubo tales restricciones en mis otras clases. Terminé todos los hechizos en el libro estándar de hechizos de tercer grado y pasé al cuarto año. Si todo sale según lo planeado, terminaré al final del año escolar.

Interrumpir mis pensamientos fue un golpe mental familiar en mi escudo mental. "Hijo de un troll de montaña". Maldije.

Dándome la vuelta, escudriñé el frente del pasillo, buscando una cara burlona familiar. Mis ojos se entrecerraron cuando encontré a mi objetivo, sentándome con el resto de los Profesores luciendo presumidos.

Al ver sus ojos oscuros brillar con suficiencia en mí, la indignación brotó dentro de mí, y mentalmente maldije. ¡Maldito profesor Snape! Es la hora del desayuno. Es la comida más importante del día. ¿No hay nada sagrado para ti? A un hombre se le debería permitir comer en paz.