¿Entonces qué carajo somos?

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—¿Cuál es tu maldito problema?— 

—Escucha bien Daniel Rand.— Un par de manos gruesas tomaron con firmeza el cuello de su camisa. —No vuelvas a acercarte así a Murdock o voy a tener que volarte los malditos sesos.— Rugió. Todos estaban repentinamente en silencio, nadie sabía qué hacer o decir y Tony miraba iracundo a Frank, odiaba a los que arruinaban sus fiestas. 

—¿O qué? No seas ridículo, tú no tienes ningún derecho sobre Matt.—

 —¿Y tú qué sabes de éso?— 

—¿Frank...?—

Mattew se detuvo cuando la música dejó de escucharse, estaba ajeno a todo a su alrededor, nunca bebía y Peter tampoco, no midieron cuánto alcohol necesitaban para dejar de entender su entorno.

Para Matt repentinamente todos dejaron de gritar y calló en cuenta que sentía frío en su torso, también todo olía a alcohol y al perfume de Rand, sabía que había estado bailando con él, pero no entendía porqué de pronto el perfume de Frank y su embelesador aroma a cuero y sangre llenaba ahora sus fosas.

—...Vamonos rojo, es tarde— Lo que para rand fué un susurro para él estuvo perfectamente atendido. 

Fuera de la percepción de Matt, Castel terminó aventando a Rand lejos, Dany lo estaba comenzando a odiar, estaba enamorado de Matt desde la primera vez que lo vio y no pensaba dejarlo ir tan fácil, no pensaba esperar más a Matt, a diferencia de Frank él iba a hablarle claro.

Pero no hoy, porque ahora mismo era Frank el que tomaba a Matt como costal a pesar de sus reclamos y lo sacaba de ahí.

____

—Baj-hameee, está hela-hip-helandoo, ¿Acjaso no sabes que mheee puedo en-ffrmar?— 

Frank se detuvo frente a su auto, abrió la puerta del puesto trasero al suyo y le colocó una sudadera de los Bulls que siempre llevaba en caso de que lo necesite [que estaría perfecto aclarar que él nunca lo hacía, pero tendía a penas en Matt cuando las metía al auto después de lavarlas.] 

—¿Estás mejor?— Matt se terminó de acomodar la sudadera, ni idea de dónde había quedado su camiseta, y en éstos momentos adoraba a Castel por siempre llevarse ropa extra para él [O ésa percepción tenía siempre, porque en varias ocasiones había escuchado al mismo Frank insultar a Micro por querer usar una de ellas.] 

El susurro del mayor descolocaría a cualquiera pero no para el pelirrojo, quién con un pequeño rosado sobre sus mejillas y nariz por el frío asintió. 

—¿Me-he vas a llev-hip-var a casa?— 

—No seas ridículo rojo aún es temprano.— . —¿Entonces porqué-hip me sacaste?— 

Dentro de la inhibición de Matt, pudo percibir a Frank suspirado exasperado. —No-no, No te importa sabes ...— 

—¿Qué?— La incredulidad se le escapó. 

—Es más complicado rojo, Micro a estado jodiendo con una mierda sentimental y estoy confundido...— 

—¿De-de qué ha-hip-hablas?— 

Bueno, el panorama no era muy favorable. Un Matt borracho sin lentes intentaba concentrarse mientras Frank daba vueltas como perro molesto.

—Vamos, primero salgamos de aquí, te tengo que bajar ésa borrachera o Jack te matará.— 

—Jajajaja ¿Cuál baruchera?—

Frank lo miró unos segundos antes que la risa de Matt se le contagiara, se estaba ablandando demasiado últimamente. 

Carajo solo velosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora