Carajo solo velos

Quería hablar con rojo, que lo abrazara y llorara su dolor con él.

—Hola Mattew.— 

—... Hola Tío Fisk.—

—Es una verdadera tragedia lo que sucedió con Jack....—

—Tú... ¡No tienes derecho siquiera a mencionarlo!—

—Agradecería que no comenzaras a gritar. — Se escuchó un chasquido y Matt supo lo que significaba.

—Wesley vamos. Y tú Mattew, vienes con nosotros.—

—No no, no, sueltame...— Un par de manos firmes y siempre suaves levantaron con delicadeza a Matt, ésto permitió al pelirrojo a comenzar a forcejear, moviendose violentamente. 

—¡Sueltame!—
—¿Qué no lo escuchaste? ¡Sueltalo!— Frank reaccionó de igual manera, iba a taclear a Wesley pero el enorme cuerpo de Wilson Fisk lo detuvo con solo un brazo, no dejaban de ser jovenes de 18 y 20 años inexpertos e impulsivos contra el enorme hombre.

—Señor le pido por favor que salga de mi casa ahora.— Micro apuntó reuniendo todo el valor que sus huesos se cargaban. Wilson retorció levemente la mandibula, prometió a Vanessa no utilizar la violencia, otro chasquido fué percibido por Matt desde los brazos firmes de Wesley -que por más que se jaló, no lo soltaron en nigún momento-.

—Disculpame por favor.— Le susurró Wesley como si acatara una orden y presionó puntos que Matt desconocía a un costado de su cuello, la firmeza de sus dedos tocaron un sitio en especifico y los ojos de Matt se cerraron. Quedó inconsciente.

—¡¿Qué mierda le hiciste?!— La voz de Frank se rompió empujando con toda su fuerza, una lastima que antes de poder hacer algo contra Wesley un choque electrico le golpeó una pierna. Micro corrió con la misma suelte y en un santiamen los tres chicos terminaron sin consciencia.

°°°°°°°°

—Aguarda aguarda, ¿Me estás diciendo que Wilson Fisk... El maldito magnate más rico de Nueva York, secuestró a tu novio?—

—No no, debe ser más complicado que éso Curt... Es una figura demasiado pública, no puede simplemente ir por ahí secuestrando niños...— Dijo Billy y Frank asintió. Cuando Micro despertó, movió el enorme cuerpo de Frank al sofá del sótano y corrió a llamar a Russo y Curtis, dejó de importar que todos sus planes ahora ya valían madre y solo estaba en su mente el poder ayudar a su amigo -como no lo había echo durante el incendio.-

Y mientras los otros tres platicaban -intentando sin éxito animar un poco a Frank-; Micro se dedicó a teclear como demente en la computadora de sospechoso precedente que cuidaba como un bebé en su sótano-habitación.

—Vamos viejo, no te pongas así... No podías hacer nada al respecto...— Frank negó, las lagrimas se le resbalaban por la nariz, encorbado con las manos tomando su cabello, se sentía inútil, impotente... Se llevaron a Matt frente a sus malditas narices... Y no pudo hacer nada al respecto... Ni siquiera pudo animarlo antes.

—Lo sabemos hermano... Estuvo muy jodido lo de tu chico... Vimos las noticias y...— Frank lo interrumpió. 

—No fué un accidente...— Articuló con la voz quebrada por el nudo en su garganta. El mismo Curtis aceptaba que era la primera vez que veía así a Frank, él solía ser tan cerrado con sus emociones que el solo hecho de ver gotear la sal por sus mejillas hacía sus huesos helar, no podía imaginar cómo se debían estar sintiendo ambos ahora mismo.

—¿Qué?— Billy lo encaró, estaba sugiriendo un homicidio.
—Yo.. Matt, él estaba sosteniendo a Jack en ésa maldita habitación. Estaba lleno de sangre.—Curt y Bill se miraron alarmados, ésto comenzaba a apestar.