Capitulo 22 (Mueble)

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-¡¡¡OYE!!! ¡¡¡¿SIGUES AHÍ?!!!- Habla alto y fuerte, molesto por la actitud del peli azul.

Sacado de sus pensamientos de golpe, reaccionando para responder y de paso seca su lagrima con el antebrazo –Si... Pero- Intenta protestar, para que el peliverde no permita que hablen los otros, mas es tarde.

La mirada rosa se centra en el rubio, entregándole el celular para que hable con el moreno, sabiendo los sentimientos de Asmita.

El cual solo le agradece con una sonrisa, sujetando el celular para hablar aun en altavoz.

-Deu, ¿Por qué no contestas?- El tono preocupado, pero más tranquilo ahora por saber que está a salvo apartemente.

-As...Mita...- Susurra el nombre, con cuidado de no ser escuchado, sabe que está mal meterlos en esto, no quiere causarles daño, no se lo podría perdonar jamás.

-¿Te encuentras bien?- Dohko, sabe que el rubio es el interés romántico de su amigo, pero también esta angustiado por el bienestar de este, así que no espero para hablar.

Deuteros lo escucha, sus labios son apretados por él con todas sus fueras, dudando en que decirles, conociendo lo terco que es el castaño y a sabiendas que esos dos donceles pueden ser iguales o peor en esa índole.

No quiere hacer sufrir a quienes quiere, por lo cual debe hacer lo que le ordenaron y alejarse de ellos a como diera lugar.

-Ya no quiero... Hablar con ustedes...- Muerde su labio inferior, intentando mantener su voz lo más calmada posible, cerrando sus ojos con lágrimas escapando, esto duele demasiado.

Ambos se quedan desconcertados, incluso Shion al escucharlo, también se fija en ellos, era una locura este comportamiento, les dicta que algo está pasando.

-Deu, ¿Por qué dices eso?- Quien posee los ojos azules como el cielo, siente un pinchazo fuerte en su corazón, con la curiosidad de saber que está pasando por la menté del moreno.

-No preguntes, solo... Dejen de marcarme ¿Si?- Les pide en un ruego, intentando sonar con su tono normal.

-¡¡¡¿QUÉ?!!! PERO... ¡¡¡¿POR QUÉ?!!!- Sus manos tiemblan, está demasiado sorprendido y no quiere que nada de esto siquiera pase, le haría falta la presencia de ese chico en su vida.

-Creí que fui obvio al bloquearlos...- Deja escapar un suspiro, no suena enojado, solo indiferente en su hablar –No tenía el número de Shion, pero ahora lo bloqueare también...-

Claramente el rubio no entiende de donde viene esta actitud tan repentina de querer alejarlos, en su mente no cabe dicha posibilidad quiere peguntar más, averiguar, pero se ha quedado sin el don del habla ahora, tanto es así que su dolor se exterioriza con el paño en sus lentes, por la respiración agitada.

-¡¡¡¿DE QUE ESTAS HABLANDO?!!!- Sin pensarlo, ni permiso, arrebata el celular de la mano del chico con ascendencia Hindú, para hablar bastante molesto con el otro -¡¡¡¿QUÉ TIENES?!!! ¡¡¡¿QUÉ ESTÚPIDA AMENAZA TE HAN HECHO TUS PADRES O EL ESTÚPIDO DE ASPROS?!!!- El castaño se huele esta situación, comprendiendo que las cosas pueden ser tan negativas en la vida del peli azul.

Siempre se ha sorprendido en como Dohko lo ha aprendido a leer, pero es obvio es la primera persona en la que logró confiar, y nunca lo juzgo o burlo... Debía ser convincente si quería que todos se alejaran, no quería tardar en hablar, temiendo que si lo escuchan, las cosas se tornaran difíciles de una sola vez.

-Dohko, voy a colgar... Lo siento...- Se disculpa... Intentando calmar su desesperación y leve llanto que modera a cómo puede –Es mejor que olviden todos que alguna vez fui su amigo... Trátenme igual que el resto de la escuela...-

Mi Rayo De LuzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora