VERDAD

Shoto.

Entre bromas de parte de Keigo y charlas banales finalmente llegaron a la casa, el bicolor entro primero que Keigo, dejo sus zapatos en la entrada, apenas estuvo en la sala de estar golpeo a su hermano mayor suavemente en la cabeza recibiendo un jalón de cabello como respuesta.

-¿Dónde esta mamá o Fuyumi? -pregunto después de soltar un quejido.

-Están en la cocina, yo puse la mesa y ayude con el arroz así que a ti te tocará lavar todo.

Chasqueó a lengua e hizo una mueca de disgusto, hubiera preferido hacer el arroz. Una vez estuvo en la cocina rápidamente el olor inundo sus fosas nasales.

-¿Hicieron soba? -pregunto una vez hubo entrado, dejo un beso en la mejilla de su madre y le regalo una sonrisa a su hermana.

-Si, aunque espero no te atragantes por la noticia.

-¿Noticia?, ¿Por qué me sorprendería de que Keigo es mi cuñado?

-¿Desde cuando me llamas por mi nombre?, ¡Mamá! -Hawks se acerco a la albina abrazando a esta con cariño depositando un beso en su sien. La mujer beso la mejilla del héroe y acerco un cucharon a sus labios- esta delicioso.

-Me alegra que te guste, Shoto -el menor se acerco a su madre probando un poco, asintió ante el sabor de la comida, definitivamente no había comida más deliciosa que esa.

-Te llamo por tu nombre desde que eres mi cuñado.

-¡¿Shoto podrías dejar de decir que Hawks es tu cuñado?! -Fuyumi se encontraba totalmente sonrojada, alzo el cucharón amenazando al menor con este- ¡Mamá dile algo!

-Y... Te esta negando- Natsuo los veía desde la barra con una sonrisa burlesca.

-Haber, Fuyumi baja ese cucharon, Natsuo, Shoto dejen la comida en la mesa y dejen de molestar a su hermana -todos obedecieron a la mujer de inmediato, lo que menos deseaban era terminar congelados ahí.

Dieron gracias por los alimentos y se dispusieron a comer entre comentarios de parte de todos. Leves risas y un ambiente ligero era el que inundaba el comedor en ese momento, finalmente lucían como una verdadera familia, aunque el hueco de su padre y su hermano mayor seguían presentes, solo que ya no dolían, claro que hacían falta, pero ya no era triste.

-Bueno, lamento si hice que perdieran algún evento importante, pero -su hermana mayor mordisqueó sus labios nerviosa -llevo saliendo con Keigo desde hace seis meses.

Todos se quedaron en silencio, ni siquiera sus respiraciones se escuchaban.

¿Debería fingir sorpresa?, tal vez así rompería el silencio.

-Vamos, finjan sorpresa -dijo Natsuo, haciendo que tanto como su madre como Shoto soltarán suaves risas. Aún así tanto como él como el mitad pelirrojo le dirigieron miradas amenazantes al héroe- le haces algo a mi hermana y te juro que no nos importará que seas un héroe.

-Bueno pero no creo que quieran dejar sin padre a su sobrino.

-¡¿Sobrino?! -ambos hermanos Todoroki vieron a Fuyumi la cual cubría su rostro avergonzada.

Esta bien, esa si era una sorpresa.

-¡Te mato! 

Y como si aquella fuera una señal de parte de su hermano mayor, ambos chicos se lanzaron al rubio. Las mujeres simplemente... Veían, realmente no había mucho que hacer pues era común que los chicos se llevarán de aquella manera y nunca habían llegado a heridas físicas, siempre terminaban entre risas.

Y así habían terminado nuevamente, entre leves risas y despeinados.