Capítulo seis: Pagar mis pecados

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NOTA: ¡hola! bueno comencemos con las advertencias. 

No hay.

Dejando de lado mi aburrido sentido del humor. Comencemos con mi disculpas, es un poco tarde en mi país, el capítulo esta recién terminado así que si notan algún error por ahí, pueden decirme para poder corregir.

bueno, espero les guste el capitulo, nos leemos en las notas finales.



Sasuke despertó con un enorme dolor de cabeza. Le dolían los ojos, los sentía hinchados y ardían. Tenía el cuerpo dolorido por la mala postura en la que durmió y una gran picazón en la garganta.

¿Quién dormía sin cubrir su cuerpo toda la noche? Todavía peor cuando la pequeña ventana de la habitación tenía fisuras dejando entrar el aire frío.

En el baño al mirarse en el espejo, observó su reflejo con atención, se veía justo como se sentía. Estaba demacrado, apoyo sus manos en el lavabo y dejó escapar el aire.

Sasuke volvió a mirarse, estudiando su rostro cansado, sus ojos opacos, sus labios, inevitablemente recordó el pequeño beso que recibió. Jadeó asombrado al notar su expresión. ¿Esta cara había presenciado Naruto? ¿La de un omega que añora más besos? ¿Casi como si estuviera desesperado por su afecto?

Golpeo el espejo con el puño intentando borrar lo que observaba. Miró sus nudillos ensangrentados, los cristales rotos y pensó en la estupidez que hizo. Este no era él, le gustaba su yo que no perdía la calma y no cedía a sus impulsos. Había vivido de esta forma mucho tiempo, no cambiaría ahora.

Le pediría maquillaje a Kimimaro, vendaría sus heridas y todo solucionado. Bien se dijo satisfecho. Tenía que ir a trabajar, ganar dinero y ayudar a su hermano.

Tocaron la puerta cuando estaba terminando de ponerse su uniforme. ¿Jūgo le traía maquillaje? Reflexiono nervioso. Dio un suspiró profundamente. Si notaba que se sentía mal, entonces comenzaría a preguntar y eso era lo que menos quería.

Abrió confiado, luego noto la fragancia masculina flotando por las rendijas de la madera y la cerró fuertemente aterrado. Su corazón comenzó a latir desenfrenado, un ligero escalofrío le recorrió el cuerpo al saber quién estaba detrás de la puerta. ¿Qué hacía aquí? Se preguntó temeroso.

Tragó saliva y noto que le dolía la garganta al hacerlo. Supuso que podía ser un resfriado, pero luego cayó en cuenta que era tiempo de su celo. Necesitaba hablar con Orochimaru.

Abrió rápidamente para no arrepentirse. Naruto le miró sorprendido, no parecía molesto por cerrarle la puerta en la cara, luego le sonrió y antes que Sasuke pudiera reaccionar le dio un suave empujón y entró a su habitación.

"¡¿Qué diablos estás haciendo?!" Le gritó enojado. Naruto le sonrió juguetonamente, luego sus ojos se fijaron en su mano. Fue algo raro, por un momento creyó que había visto preocupación en su rostro.

"Tu mano" le dijo de manera suave, sin embargo, su cuerpo se acercó rápidamente contrario a su voz tranquila. Sasuke se quedó quieto mientras el otro miraba su herida.

Ni era tan grave, unos leves cortes, su reacción era exagerada. No obstante Naruto parecía estar mirando la amputación de sus dedos.

¿Estaba aquí verificando que no huyera? ¿Por qué lo miraba así cuando ayer le había hablado con tanta frialdad? Jamás lograría comprender a Naruto.

Intentó alejar su mano, Naruto de inmediato le miró enojado. Se quedó tan sorprendido que se paralizó sin saber que estaba pasando. Sintió una repentina molestia, algo en su interior se removió confusamente.

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