Chloe y yo tomamos el avión hace unas cuantas horas y acabamos de aterrizar, salimos del aeropuerto y tomamos un taxi con camino al hotel al cual no tardamos en llegar.
Mi yo de hoy se conservaba como la Latina que es y escuchaba 911 de Sech. Me dan ganas de tomar un avión e irme a una fiesta privada y creo que lo haré. Estoy en el hotel en mi suite.
A veces pienso, como pude ser tan tonta de haberme dejado embarazar, o sea, es que ni pasó por mi cabeza cuando estaba enamorada que tener un hijo con Oliver seria para nada bueno, en cambio con Daniel que hablando de él, ¿Ya se habrá olvidado de mi?.
Llaman a la puerta y voy a abrir rápidamente para encontrarme con Jennifer.
Dios, que vergüenza siento ahora mismo.
— ¡Valentina! – me dice algo agradable pero a la vez desagradable.
— pasa – me hago a un lado.
Creo que le caigo mal y me odia, bueno, hasta yo me odio.
— ¿Como estas? – pregunta.
— bien pero mal a la vez – respondo.
— bueno, mmmm... ¿Puedo conocerla? – que incómodo es esto.
— ¿A Chloe? – pregunto.
— si.
Asiento y la llevo hacia la habitación por que este lugar se divide con un pequeño living en donde tengo una gran vista.
— aquí esta – digo y se acerca a la cuna.
— es muy hermosa – sonríe.
— ¡Gracias!.
— no me molesta que estes con Oliver – arqueo una ceja y le miro.
— ¿No me odias?.
— ¿Por qué lo haría?.
Yo también necesito una pastilla para entender a las mujeres y eso que soy mujer.
— no lo sé.
— mira, no te lo voy a decir para que te enojes con Olivier pero, la primera vez que Olivier me fue infiel supe que no volvería a ser lo mismo, volvió a actuar de la misma manera que la primera vez y claro, años habían pasado pero sí lo hizo una vez por que no dos, entonces, cuando se porto extraño conmigo por primera vez después de mucho tiempo me di cuenta y no es que me haya molestado, simplemente busque alejarme de él y provocaba nuestras peleas por todo y si, así lograba mi objetivo, fue una estupidez perdonarle también, investigue y llegué al fondo de todo pero no eras tu
— ¡No entiendo! – interrumpo.
— no eras tú la mujer con la que Olivier me engañaba, el usaba a otra mujer para que yo no llegara a ti – ¿Que?.
— ¿Cómo?.
— debes tener cuidado con Alina, Olivier le pago para que se hiciera pasar por su amante y así protegerte pero el muy idiota se dejó ver la cara y así como Alina me ayudo a destrozar mi matrimonio con el, llegara a ti para hacerte daño y mas ahora que sabe que estas Milán con el, ella tiene todo tipo de información que nadie quiere tener sobre Olivier.
Estoy en shock.
— me estas diciendo que tu al llegar al fondo de todo no te enteraste de mi si no de otra persona.
— Alina es una desquiciada, cuidate de ella.
— Jennifer.
— soy feliz sola, lo único que quiero es que tu hija y los míos se lleven bien, es la única condición que tengo por que, por que no quiero que mis hijos reciban sufrimiento emocional, hemos sido buenos padres para ellos desde el divorcio y estamos haciendo todo para que entiendan que nuestro matrimonio ya no daba para mas.
— ¿Hablas de los niños y Chloe?.
— si, quiero que ellos sepan de la existencia de su hermanita ahora antes de que sea muy tarde – ya pero no.
O sea que.
Todo esto es muy confuso, no me puede esta pasando a mi, ya mejor me voy con mi hija y de mi no vuelven a saber nada.
