"Высоко : Amor, Periodismo & Peleas"

Capítulo 4 "Lena Katina"

La revista de Julia se vendió muy bien, sin tantas diferencias con la de Lena. En unas cuantas semanas la cantidad de fotos casi igualó la de cartas al consultorio de Julia y las ediciones de los ejemplares de ambas se igualaron.

La publicación de "Blisoko", en vez de una revista semanal, se convirtió en dos quincenales, cada una con sus propios contenidos y sus propios compradores. Las ventas se estabilizaron en un límite aceptable, aunque no tan lucrativo.

La guerra silenciosa y sin fin entre Julia y Lena continuó, ambas buscando  algo que le ganara en ventas a la otra, ambas sin éxito . También esa guerra personal entre ambas siguió en un estira y afloja sin torcer.

Cuando "Blisoko" llevaba ya un mes y medio de publicación, Alexia las citó en su despacho.

Lena estaba algo nerviosa sin saber el por qué y no tenía idea de qué podía pasar, pero presentía que los accionistas de la revista
eliminarían la publicación sin permitirles algo para mejorar las ventas.

Ella sabía que su cuello se estaba jugando en todo eso, si los altos mandos decidían que no valía la pena mantener la revista en el mercado, Lena perdería todo por lo que ha vivido, perdería su Raison D' Etre.

Su puesto anterior ya estaba ocupado y el nuevo personal estaba trabajando muy bien, no había vuelta atrás.

     —¿Qué necesitas, Alexia?, ¿pasa algo con Blisoko?
     —Bueno, como ya se habrán dado cuenta, las ventas se han estabilizado y aunque nos han traído buenas cosas, el margen de ventas no es muy amplio. Y esto me preocupa porque, si no suben poco a poco, la dirección decidirá eliminar la revista definitivamente.

Lena sintió que se le iba el alma. Aunque ya veía venir algo así, se empezó a retorcer el cabello, era un tic que tenía cuando se ponía nerviosa.

     —Ya lo presentía yo.
     —He estado pensando y hay algunas cosas que se pueden hacer para mejorar, si es que ambas aceptan mi consejo, obviamente.
     —Yo estoy dispuesta a cualquier sugerencia.
     —La mas grande de ellas, es dejar sus estúpidos pleitos de niñas chiquitas  y trabajar en equipo... Ambas al ser tan opuestas, hacen que se complementen, y ambas revistas tienen su público, si las juntamos es muy probable que suban las ventas. Si reducimos el número de páginas de los reportajes, se pueden incluir todas las secciones de ambas revistas en un único ejemplar.

Lena no quería aceptar que Alexia tenía la razón; aun así sentía el coraje crecer en su pecho... Si quería mantener viva la revista, iba a tener que hacer algunos favores.

     —Por mí no hay problema
     —¿Qué dices, Lena?
     —De acuerdo, no hay de otra.
     —Hay algo más. El próximo sábado hay un evento de literatura en el hotel Kalinka... Acudirá mucha gente reconocida del "mundo" intelectual y otros tantos de los "nuevos ricos" también... Sería un buen lugar para promocionar "Blisoko" y subir suscriptores; les puedo conseguir un par de invitaciones.
     —Un poco de marketing nunca viene mal, más si es en el lugar adecuado. Consígueme la invitación y yo me encargo de eso.
     —¿Solo tú? La revista también es mía, ¿lo olvidas, Volkova?
     —Por Dios, Fadeeva, no digas estupideces. Déjame la publicidad a mí, tú solo espantarás suscriptores y a reducir las ventas. Con tu aspecto asustas a cualquier persona, no jodas. Aparte, para vender algo, cualquier cosa, hace falta encanto y sonreír ampliamente, y tú tienes el encanto de la princesa Fiona. Y además, ¿qué pensabas ponerte? Si solamente tienes tres trajes… el negro, el negro y el más negro....
     —¿Qué vas a saber tú, Volkova, ni del encanto que soy capaz de derrochar cuando se me antoja, ni de lo que hay en mi closet?
     —Me baso únicamente en lo que he visto y me has mostrado durante todo el tiempo que llevo trabajando aquí.
     —Chicas, recuerden que decidieron trabajar juntas, y esta no es la manera de hacerlo.
     —Bueno, a veces un poco de pleito y arena favorecen a la causa. Consigue dos invitaciones y a ver quién de las dos consigue más suscriptores.
     —¿irán juntas?
     —¿Juntas? No, ni loca. Yo iré sola y nos encontraremos allí.
     —Te estás tirando balazos sola, corazón. No digo que no seas buena
periodista, aunque tus ideas sean algo cavernícolas y difíciles de vender, ¿pero publicista en vivo y en directo? De eso no tienes nada.
     —¿Quieres apostar, Volkova?
     —¿Una cena?
     —¿Contigo? Dios no lo quiera, Volkova ¡Ya quisieras!. Que sea algo con respecto a la revista.
     —¿Como qué se te ocurre?
     —Quien gane tendrá el reportaje de portada durante seis meses.
     —Perfecto.
     —Bien, pues nos vemos pasado mañana en el campo de batalla.
     —Y a partir del lunes tienen que editar un ejemplar único, no lo olviden.
     —No te preocupes, Alexia, aceptaremos de buen grado el resultado de la apuesta y eso no influirá en absoluto en la revista conjunta.