Lena estaba corrigiendo el último artículo del ejemplar que se publicaría la
semana siguiente, cuando le sonó el teléfono desde el exterior.—¿Diga?
—¿Lenka?
—Sí, soy yo.
—No sé si me recuerda. Soy Katya Dorosh, estuve en su despacho buscando a Julia
—Sí, la recuerdo. Ya le dije que no trabaja aquí exactamente. La extensión de su teléfono es la dieciocho.
—No quiero hablar con ella sino contigo, si me permites que te tutee.
—Estoy trabajando, señorita, no dispongo de tiempo para charlar.
—Señora. Señora Luján.
—¿Señora? ¿Es su mujer? ¿Julia está casada? Mire, si lo que quiere es que le
aclare lo del cuello, que se lo explique élla. Fue idea suya y no es en absoluto lo que parece.Katya tuvo que hacer un esfuerzo para no soltar una carcajada. De modo que la señorita Fadeeva había sido la responsable de semejante marca del cuello de Julia.
—Creo que está en un error, no soy la mujer de Julia, sino su cuñada. Estoy
casada con su hermano. Y por supuesto no me tiene que dar ninguna explicación de nada.
—Bien, entonces usted dirá.
—Quisiera pedirle un favor. La próxima semana es el cumpleaños de Julia y
quisiera prepararle una pequeña fiesta sorpresa. Nada muy ostentoso, solo una pequeña reunión de amigos íntimos...
--Ajam....
--Me gustaría invitar a su equipo de trabajo, usted y las redactoras de
Blisoko. Ya sabe, las chicas con las que desayuna habitualmente.
—Bien, se lo transmitiré. Pero quizá quiera excluirme a mí de la invitación. Le
aseguro que no me sentiré ofendida.
—¿No quiere venir? ¿Por algún motivo?
—No, en absoluto, salvo que no me considero amiga íntima de la señora Volkova. Ni siquiera su amiga.
—Bueno, las enemigas íntimas también están invitadas.—En ese caso acudiré. Y se lo diré a las chicas.
—Es sorpresa.
—No se lo diré hasta el último momento. Sasha es incapaz de guardar un secreto.
—Bien, las espero entonces el próximo sábado a las ocho. Anote mi dirección..... Será una reunión informal, no es necesario vestirse de etiqueta.
—De acuerdo. Hasta el sábado.Katya colgó el teléfono y miró satisfecha a su marido, que se estaba preparando para ir al trabajo.
—¿Se puede saber qué estás tramando?
—Nada, solo le estoy preparando una fiesta sorpresa de cumpleaños a Julia.
—¿No es un poquito mayor para esas cosas?
—Nadie es lo bastante mayor para eso.
—¿Y cómo vas a conseguir que venga sin saberlo? Probablemente tenga sus
propios planes.
—Hum, sé cómo conseguirlo. La niña le dirá que le ha preparado un pastel ella misma, y ya sabes que tiene debilidad por nuestra hija. No le hará un desaire.
—No, en eso tienes razón. ¿Y a quién piensas invitar?
—A sus compañeras de trabajo. Lenka ya ha aceptado en nombre de todas. Que, por cierto, se ha creído que yo era la mujer de Julia y me ha intentado dar explicaciones por el chupetón del cuello.
—¿El…? ¿Lenka la hinchapelotas…?
—Esa misma.
—Joooder.
—También invitaré a algunos de sus amigos, Sergey, Roma, Giorgi Y a la insoportable de Tanya.
—¿A Tanya? Pero si Julia dijo el otro día que las cosas entre ellos se iban
enfriando, que no le apetecía quedar con ella.
—Sé lo que dijo. Pero Tanya no puede faltar, la ecuación no estaría completa sin ella.
—¿Qué estás tramando, Kat?
—Nada, solo intento hacerle una fiesta de cumpleaños a tu hermana.
—¡Y una mierda! Eso díselo a quien no te conozca.
—Tú déjame, que nos vamos a divertir mucho el sábado.
—Te divertirás tú, yo me parece que voy a sudar sangre.
—No será para tanto, maridito. Ya verás.
—¡Miedo me das!—Anda, ve al trabajo que yo me ocuparé de todo.
—De acuerdo. Ocúpate tú, yo no quiero saber nada de nada.
—No sigas por ese camino que no me voy.
—Sí te vas. Tengo mucho que hacer esta mañana. Hasta luego.Mientras tanto en las oficinas de bli
—Tengo que decirles una cosa.
—¿Julia no viene?
—No, élla no puede saberlo.
—¿Qué pasa? ¿Qué ha hecho ahora?
—Nada, no es un asunto de trabajo.
—Hace un par de días me llamó la cuñada de Julia, aquella señora que vino
buscándola una vez y a la que tú acompañaste a su despacho. ¿Te acuerdas, Nastya?
—¿Era su cuñada?
—Eso me ha dicho. Bien, pues mañana estamos invitadas en su casa a una fiesta de cumpleaños en honor de la señora Volkova.
—¿En serio?
—Sí, Olga.
—¿Y cómo nos lo dices ahora? ¡No tengo nada que ponerme!
—Me ha recalcado que será una reunión informal, que no hace falta ir vestidas de gala. Una reunión de amigos.
—¿Y tú vas a ir?
—He intentado excusarme, pero no lo he conseguido. Esa señora estaba muy
decidida a que fuéramos todas, de modo que sí, yo también iré.
—¿Y qué te vas a poner tú? ¡No irás a ir así!
—Tranquila, Olga, yo me ocupo de que vaya bien vestida.
—La fiesta es sorpresa, así que a nadie se le ocurra llamar a julia para preguntarle nada.
—¿Y le vamos a regalar? Tiene tanto dinero que seguro que tiene de todo.
—Una corbata.
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"Высоко : Amor, Periodismo & Peleas"
ChickLitBuenos días!! Les traigo un nuevo FF para su lectura, quizás algunos de ustedes ya lo leyeron, pero bueno, a quien no le gusta leer un buen FF para entretenerse un rato?? Se estará publicando los siguientes capitulos.... Espero y sea de su agrado...