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QUE INTENSIDAD!!
••••••••••••••••Lena estuvo malhumorada todo el domingo. Después de lo ocurrido el sábado se sentía enfadada consigo misma y con Julia, por supuesto.
Detestaba haber fallado con ella sobre la lavadora después de rechazar su declaración, y se sentía sumamente irritada ante la prepotencia de élla de que estaría disponible en cuanto chascara los dedos.
Aunque en su fuero interior sabía que había sido verdad, que había bastado que insinuara echar un rapidin para que hubiera deseado hacerlo y no había puesto la más mínima resistencia, ni de palabra ni de obra, cuando la llevó hasta la lavadora. Y lo había disfrutado enormemente.
Pero un rato después de que se marchara, y sin que tuviera muy claro el motivo, había empezado a enfadarse. Cuando se levantó el domingo estaba realmente cabreada, y se juró a sí misma que Julia no iba a llevarla a la cama, ni a ningún otro mueble de la casa o la oficina, nunca más.
El lunes se vistió seriamente, aunque no tanto como antes, y se volvió a recoger el pelo en un apretado moño. Se cubrió el chupeton del cuello con un pañuelo estratégicamente colocado y se marchó a la editorial.
Julia y Nastya ya estaban allí. Miró el reloj y comprobó que ambas habían llegado antes de tiempo.
—Buenos días.
—Hola, Lena.... ¿Qué tal el fin de semana?
—Aburrido.Julia levantó una ceja y no dijo nada. Evidentemente no estaba de buen humor y no sería ella quien se cruzara en su camino aquel día.
Además, había vuelto a recogerse el pelo, lo cual no era buena señal.
No sabía si debido a que le había expresado sus sentimientos o a lo ocurrido después, pero algo había cambiado entre ellas, y no para mejorar.
Suspiró resignado. Lena la descontrolaba continuamente, nunca sabía a qué atenerse con ella.
Pero fuera lo que fuera, no iba a rendirse Julia O. Viktorovich Volkova nunca se rendía, y menos cuando algo le importaba.
Y la preciosa señorita Fadeeva, con su moño apretado y su expresión fria como hielo se fundía entre sus brazos en cuestión de segundos, le importaba mucho.
No, no iba a rendirse. Quizás solo debía cambiar de estrategia.
Ese pelo recogido de nuevo sobre su nuca, el sobrio pantalón azul y la holgada blusa del mismo color le estaban diciendo a gritos que se mantuviera alejada.
Bien, lo haría; le daría lo que deseaba. A ver quién aguantaba más.
Durante un mes la relación entre ellas se limitó estrictamente a asuntos de trabajo. Blisoko volvió a publicar algunos artículos científicos, la sección de los hoteles empezó a alcanzar tanto éxito que se convirtió en algo habitual recibir invitaciones de establecimientos que deseaban ser objeto de sus artículos.
También «Dra. Julia Volkova» tuvo que ser ampliada, y aunque en algún momento élla se ofreció a eliminarla, consciente de que a Lena nunca le había gustado, ella misma tuvo que reconocer que si se suprimía, las ventas caerían bastante, porque eran muchas las cartas que se recibían cada semana.
Admitió que la revista se llamaba Blisoko porque en ella había cupo para todo tipo de artículos y su objetivo era alcanzar lo mas alto, y que el consultorio formaba una parte importante de la misma....
No obstante, seguían teniendo discrepancias casi todas las semanas sobre qué publicar, y las voces alteradas de ambos seguían escuchándose en la sala común donde seguían trabajando Nastya, Olga y Sasha, porque se reunieran en el despacho de Julia o en el de Lena, la puerta nunca se cerraba.
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"Высоко : Amor, Periodismo & Peleas"
Chick-LitBuenos días!! Les traigo un nuevo FF para su lectura, quizás algunos de ustedes ya lo leyeron, pero bueno, a quien no le gusta leer un buen FF para entretenerse un rato?? Se estará publicando los siguientes capitulos.... Espero y sea de su agrado...