La muerte no es más que la próxima gran aventura [Traducción]

Capitulo 31 " Alastor Moody y el gorrión rojo"

Resumen:

comienza el cuarto año de Harry y Moody / Crouch Jr.comienza a enseñar como profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras. Aprenden más sobre los Imperdonables, así como sobre el torneo de los Tres Magos que tendrá lugar más adelante en el año.

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El cuarto año de Harry se apoderó de las mareas de entusiasmo susurradas por esos estudiantes "que lo saben". Cada mesa en el Gran Comedor estaba llena de emoción desbordante, incluida la mesa del personal, mientras todos esperaban ansiosamente que Dumbledore hiciera el anuncio. Lo cual no sucedió hasta después de la cena, lo que provocó que la habitación se volviera más y más tensa a medida que pasaban los minutos.

Harry simplemente se recostó y observó con una leve diversión enmascarada, escuchando distraídamente las cavilaciones de su escalofriante compañero por encima del hombro. A medida que pasaba el tiempo, la Muerte se estaba volviendo cada vez más encariñada con los estudiantes de Hogwarts. A menudo hablaba de lo adorablemente ignorantes que eran, con sus, supuestamente, largas vidas aún por delante. Harry se burló ligeramente de él, ignorando el sutil escalofrío de Hermione junto a él mientras se tiraba de las mangas y fruncía el ceño. Aquellos en Ravenclaw a menudo se quejaban de los borradores, pero no era asunto de Harry.

El único que podía acercarse siquiera a sospechar que tenía algo que ver con Harry era Anthony, y el otro chico era la última persona en crear problemas cuando se trataba de su amigo. A medida que pasaban los años, Anthony nunca se separó de Harry y con la vida que Harry tenía, ese hecho lo encontró indescriptiblemente reconfortante. A pesar de que sabía que en algún momento le diría a Anthony la verdad sobre sí mismo, Harry no necesariamente sintió esa misma culpa en sus entrañas que sentía alrededor de los demás cuando pensaba demasiado en sus propios secretos.

A pesar de que Harry no pudo pasar tanto tiempo con Anthony como el verano pasado, seguían estando tan unidos como siempre. En el tren, mientras los demás estaban ocupados hablando entre ellos o leyendo, Anthony le contó a Harry sobre algunas de las prácticas que había estado haciendo por su cuenta y Harry tuvo que admitir que estaba impresionado con su amigo. Anthony había pasado su verano buscando y aprendiendo hechizos oscuros de una variedad de países diferentes. Harry le hizo prometer que le haría una demostración en algún momento cuando regresaran y sonrió con cariño ante la chispa animada detrás de los ojos del otro chico.

Harry fue sacado de su cabeza cuando Dumbledore se puso de pie y finalmente comenzó su anuncio. A mitad de camino, sin embargo, el Director fue interrumpido por la dramática aparición de un ex-Auror empapado por la lluvia, Alastor Moody, quien tomaría el puesto de profesor de DADA ese año. Solo Harry era consciente de la verdadera identidad del hombre descontento.

Debido a que casi todos los demás en la habitación también estaban mirando al hombre, a Harry se le permitió mirarlo abiertamente mientras tomaba asiento y tomaba un sorbo oculto de un frasco. Sin embargo, cuando la mirada secreta del Mortífago escaneó el mar de estudiantes y aterrizó en Harry, el joven Ravenclaw tuvo que tener cuidado con la expresión de su rostro, para no encender ninguna señal de alerta para el hombre y posiblemente asustarlo. . Después de todo, el objetivo de Harry era permitirle capturarlo.

Cuando Dumbledore llegó a la parte sobre la restricción de edad para ingresar al torneo, se sintió aliviado, incluso se lo dijo a su grupo. No aliviado por sí mismo, no, sabía que no había forma de que se presentara como voluntario para el torneo, sino por sus amigos. No estaba preocupado por Anthony o Hermione, pero a veces le preocupaba cómo era realmente Slytherin Draco. Se suponía que el torneo era increíblemente peligroso y no los quería cerca de él. Si se saliera con la suya, ni siquiera podrían ver los eventos, sin confiar en las protecciones establecidas para la audiencia si estas personas estuvieran bien enviando a niños cercanos a una especie de 'combate a muerte'.