Capítulo 37

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Pov Arizona

4 días después

-Hay casa sola sabes- dije acercándome para abrazar la cintura de Callie

-Ari, hay qué acabar las maletas, tú no llevas ni la mitad y yo ya terminé- Callie estaba tratando de ayudarme pero estaba muy hormonal últimamente y eso no lo estaba controlando

-Ya sé, pero hay qué aprovechar- sonreí y besé su cuello

-Terminemos tu maleta primero y después hacemos lo qué quieras-

-Deja de hacerte del rogar- volví a besar su cuello y mordí el lóbulo de su oreja dónde ella ya no pudo resistirse más

-¿No qué no querías?- dije ríendo mientras enrollaba mis piernas en su cintura y me acostaba en la cama

-Yo nunca dije qué no quería- empezó a besar mi cuello delicadamente

Estábamos aprovechando el momento sin saber qué nuestros padres estaban siendo testigo de esto.

-¡Oh dios Callie si!- gemi en su oído cuándo empezó a jugar con mis pechos a cómo quizo, los mordía, chupaba y pellizcaba a su antojo, al principio me dolía pero después se volvió placer y más placer, Callie estaba moviéndose y apretaba sus piernas de la exitación, aunque no quería quitarla de mis senos lo hice, ahora era yo la que estaba encima de ella y lo único qué me cubría a mi era mi ropa interior de la parte de abajo, empezé a quitar toda su ropa pero igualmente la había dejado con su ropa interior de la parte de abajo quedando iguales, besé su cuello sabiendo qué le daba cosquillas, bajé mis besos para llegar a sus pechos, hice lo mismo qué había hecho conmigo, chuparlos, moderlos y pellizcarlos, al principio Callie reía y hacia muecas tal vez de dolor pero cuándo los mordía se mordía el labio y arqueaba su espalda, empezé a moverme en su panza buscando algo de fricción, Callie tomó las orillas de mi ropa interior tratando de bajarlo y no me negué a eso, me levanté y lo terminé de quitar yo misma, tomé ahora el de Callie y lo quité desesperadamente, teníamos qué hacer todo esto rápido antes de qué nuestros padres llegarán y mi hermano, besé la parte de abajo de sus senos qué estaba caliente, y besé todo su abdomen hasta llegar a su intimidad, cuándo abrí sus piernas me lleve con la sorpresa de qué esa zona estaba muy húmeda, sin avisarle pase una vez mi lengua de arriba para abajo y soltó un gemido mordiendo su labio, me quité de ahí y volví a subirme encima de ella, antes de hacer lo qué iba a hacer empezé a besarla desesperadamente en un beso para nada tranquilo, su lengua jugaba con la mía tratando de qué una de las dos tomara el control del beso, cuándo nos faltó el aire nos separamos y junte su intimidad con la mía haciendo qué pasará un escalofrío por todo mi cuerpo y ambas soltamos un gemido, empezé a moverme restregando su intimidad con la mía, yo mordia mi labio tratando de aguantar los gemidos pero era imposible, Callie sin importarle gemia sin parar, tomó mis caderas para juntarnos aún más, empezamos a movernos muchísimo más, nuestros gemidos salían sin control, apreté mis senos mientras más nos moviamos. Mi cuerpo se tensó y el de Callie igual, Callie empezó a temblar debajo mío y después de ella lo hice yo, ambas nos corrimos gloriosamente y poco a poco parabamos nuestros movimientos, suspiré y me acosté a su lado, me moví un poco y me puse de lado y empezé a secar el sudor de la frente de Callie.

-Vamos a bañarnos y hay qué terminar, mañana nos vamos preciosa- beso cortamente mis labios y nos levantamos

-¿Nos bañamos juntas?- pregunté

-¿Debería negarme?- sonrió y yo hice lo mismo

Estábamos tan felices, sin saber qué al regresar todo sería oscuro, triste y distinto.

Mentiría si digo qué no pasó nada en ese baño, ambas tuvimos un orgasmo otra vez, y los besos y caricias no faltaron, Callie fue a su habitación por ropa y yo empezé a vestirme.

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