Déjame amarte ❞ (Sogo Osaka┆lectora) [IDOLiSH7]

19. La renuncia [💐]

Eran las dos de la madrugada y la charla entre Sogo y t/n iba viento en popa, muchas bromas, risas y algunos roces románticos iban y venían, ambos sintieron la felicidad y armonía que solo el otro podía entregarle, se sintieron plenos, completos, igual que antes.

— ya es un poco tarde... y mañana debo ir a trabajar, aunque ahora tengo la seguridad de renunciar ¿qué crees que deba hacer So-chan? — se levantó el sofá para estirarse, el peliblanco hizo lo mismo.

— yo creo que debes hacer lo que sienta tu corazón — llevó su mano al pecho ajeno, ella se enterneció por el gesto — si tu corazón dice que debes renunciar... hazlo, después de todo, la gente que amenaza no suele hacer lo que dicen, es solo para manipular, y si ocurre algo me tienes a mi para defenderte... además en lo personal pienso que no es seguro que trabajes en un lugar donde no te tratan como mereces  — la periodista abrazó a su amado rodeando la espalda, acurrucando su rostro en el pecho ajeno — creo que... eso haré — su abrazo fue correspondido, Sogo llevó sus brazos al rededor de su cuello, aprovechó al cercanía para besar su cabeza y acariciar sus cabellos.

— pasando a otro tema... ¿no te molestaría dormir conmigo? es que no hay otro cuarto y no tengo una cama de emergencia, y no tendría corazón para dejarte durmiendo en el sofá, o si prefieres yo duermo ahí y tú usas mi cama — Sogo rio y levantó cuidadosamente el rostro de su amada para mirarla — tampoco quiero que duermas en el sofá, y ¿cuál crees tú que será mi respuesta? 

— mmm, no lo sé... — comenzó a reír, ya sabía la respuesta y eso le entusiasmaba, aún así quería escucharlo de su boca. El peliblanco le robó un beso a su amada, uno corto pero dulce — obvio que quiero dormir contigo — sonrojado y avergonzado acarició las mejillas de t/n, ella sonrió igual de sonrojada.

[🌹]

Debido al frío, la muchacha le prestó uno de sus polerones y pantalones de tela suave a su amado para que pudiese dormir cómodamente — quién diría que mi ropa te quedaría mejor que a mi — sonrió para luego acariciar las mejillas del contrario — ¿tú crees? — rio — admito que es muy calentita... como mi chaleco — ambos rieron por la referencia. 

Luego de un rato platicando, decidieron meterse a la cama, al ser una matrimonial cabían perfectamente los dos, lentamente Sogo se iba acercando a la muchacha para abrazarla y arrullarla entre sus brazos, ella se colocó sobre su pecho y lo abrazó por la cintura, sus cabellos eran acariciados con dulzura — ¿alguna vez creíste que llegaríamos a esto? — preguntó Sogo sin dejar de acariciarla — después de todo lo que pasó, veía imposible hasta hablarte... pero me alegra de que todo haya pasado así... 

— a mi también, no sé que hubiera hecho sin ti... te juro que todo este tiempo sin hablarte fue terrible, incluso estaba descoordinado cuando bailaba o cantaba con los chicos... solo pensaba en ti, y cada día deseaba más hablar contigo y pedirte perdón.

— lo siento... es inevitable sacar el pasado a veces ¿no? yo igual estuve mal, todos los días pensaba en ti, revisaba nuestro chat y recordaba esos buenos momentos en los que hablábamos hasta tarde o hacíamos bromas ¡pero hoy sentí que todo eso volvió!

— y esos momentos nunca se irán, mi promesa de estar junto a ti nunca la romperé, lo que más deseo es que seas feliz, t/n

— yo también te prometo estar siempre a tu lado So-chan, apoyarte y respaldarte sin importar las amenazas... porque te quiero muchísimo.

Sogo se acercó más a su amada para susurrarle.

 — eres lo mejor que me ha pasado, t/n...

[🌹]

El despertador de la muchacha sonó estruendosamente, despertó a ambos de golpe, una vez despiertos y conscientes se percataron de que durmieron abrazados toda la noche — buenos días So-chan — dijo la chica acariciando el rostro de su amado — buenos días... no me deja de impresionar lo bella que eres — su rostro parecía el de un tonto enamorado, eso hizo muy feliz a la chica — y tu cara de sueño es adorable — le respondió ella.

Se levantaron, t/n fue al baño a asearse mientras que Sogo ordenaba la cama, en ese momento se propuso en un futuro formar un hogar con ella, cocinar juntos, y verla cada mañana despertarse.

— el baño está desocupado, tengo un cepillo de dientes sellado en el cajón — dijo mientras entraba a su cuarto, sus ojos no estaban tan rojos y su rostro se veía más despierto, el peliblanco le agradeció y entró al baño. Ella se sorprendió al ver la cama hecha, sonrió, para luego sacar del clóset el atuendo que usaría, estaba decidida a renunciar, a cambiar de aires y eliminar de raíz todo el mal, quería empezar de cero, expandir sus horizontes, y su confianza estaba tan alta que ninguna amenaza la haría dudar de su decisión.

Se puso un vestido color negro, junto un blazer blanco parecido al que usaba Sogo, se puso pantis abrigadas y botas altas. Justo cuando terminó de vestirse su amado salió del cuarto de baño, ella encontró adorable verlo con su ropa — ¿por qué te demoraste tanto So-chan? — preguntó curiosa.

— siempre me demoro peinando mi cabello, es complicado dejarlo como me gusta... — miró a su amada de pies a cabeza y se sintió maravillado al ver tanta belleza — ¿a dónde vas tan linda? — dijo con dulzura y broma mezclada, la chica sonrió y lo abrazó — haré lo que tuve que haber hecho hace mucho tiempo, deséame suerte — él correspondió el abrazo y se separó para besarla — sé que te irá bien y que tomarás la mejor decisión.

Sogo se había ofrecido a preparar el desayuno, le prometió a la muchacha no hacer nada picante. Mientras ella preparaba su bolso, el chico estaba tostando pan mientras echaba granos de café en la cafetera italiana, rápidamente el departamento fue invadido por ese aroma agridulce.

Una vez listo el desayuno, se sentaron a comer, la chica agradeció su voluntad de cocinar y elogió cada uno de sus platillos. Platicaron animadamente durante la comida, hubieron algunos besos cortos y agarres de manos.

[🌹]

— ya debería irme... ¿cómo lo haremos para salir? me da miedo de que haya alguien de la prensa siguiendote — Sogo se levantó de la silla para retirar los platos sucios — mm... puedes irte tú, y yo esperaré un rato para salir también ¿te parece? 

— igual que la otra vez — ambos rieron — exactamente así.

La chica se levantó e igualmente retiró algunos platos, los dejó en el lavaplatos de la cocina y fue al baño a cepillar sus dientes, para luego buscar su mochila — si quieres ir de incógnito, en el mueble derecho de la cocina tengo algunos cubre bocas, y puedes sacar una de mis gorras que están en el clóset, confío en que no robarás nada — dijo lo último con sorna.

— tranquila, yo solo le robo celulares a los idols — la chica estalló en risa por la referencia dicha por su amado.

Estaba lista para salir, arregló su cabello con las manos y se acercó a su amado, quién iba a entrar al baño para cepillar sus dientes — te irás a tu casa ¿no? me gustaría que le dijeras a los chicos... todo, la carta y todo... no quiero que me vean como una malvada.

— no te preocupes, sí o sí les iba a decir, y puede que no me creas, pero ellos siempre confiaron en ti, de que no eras culpable de todo eso.

— ¿de verdad? — sus ojos se iluminaron y sintió otro peso desvanecerse de su espalda — entonces mándales saludos de mi parte, me gustaría ir un día para disculparme igualmente.

— nuestra casa siempre estará abierta para ti. Avísame si llegaste bien ¿sí?

— tú también... y espero que nos veamos pronto.

— así será, preciosa.

Ambos se besaron, fue un beso más profundo y amoroso. La chica arregló las mangas de su mochila y salió del departamento, esta vez con una gran sonrisa en el rostro, sentía que todo lo que había vivido era un sueño o alguna película de ficción, nunca imaginó que de un día para otro recuperaría a su amado y dormiría abrazada a él, sentir su calor y besas sus dulces labios. Iba segura de su decisión, sentía que lo único que necesitaba para estar plenamente feliz era renunciar al trabajo que la llenaba de angustia y malos recuerdos.

[🌹]