2. Enigmatic Kiss

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Les quiero, gente, son lo mejor. ;) Ahora denme mi premio por subir AkaKuro, joder.

Ah.

Kuroko no Basket es propiedad de Fujimaki Tadatoshi.

II Enigmatic Kiss

Lo quiera o no, siempre terminaba con los mismos pensamientos.

¿Cómo se sentían los labios de Akashi-kun?

Aunque le costaba la vida negarlo, le avergonzaba ―un poco―, preguntarle aquello. Y es que Aomine-kun le miró con una cara rara cuando lo dijo en voz alta y por último, había reído tan estrepitosamente, que luego comenzó a hacer insultos por la gracia que le daba.

¿Por qué era gracioso aquello? ¿Qué tenía de divertido?

Y sabía que la única forma de hacerlo era comprobándolo, es decir; preguntárselo directamente.

Pero simplemente no podía. Porque cada vez que intentaba hacerlo, pasaba algo extraño y les interrumpían. Sea porque me llamaba Kagami-kun o le surgía una emergencia al pelirrojo.

Es como si fuera que la vida deseaba que no tuviera suerte.

Eso pensaba hasta que recibió la rara llamada del de ojos heterocromáticos, haciéndole hacer una rara expresión, que asustó a todos los de Seirin porque ―según ellos―, era raro verme hacerlo así sin más. Lo que significa que sonreí un poco... No creo que sea para tanto... creo...

Caminé hacia el parque donde nos íbamos a encontrar. Era raro que elija lugares así, a menos que haya una cancha, cosa que había y lo comprendí.

Finalmente Akashi-kun llegó, con un paso elegante y firme; como siempre. Lo observó de manera minuciosa con esos penetrantes ojos, dejándolo hipnotizado. Sin darse cuenta siempre terminaba pensando en ello, deseara aquello o no, inconscientemente o siendo lo contrario; es como si él le estuviera hechizando... Haciéndole pensar en cosas cursis como éstas.

¿Tan "absoluto" era Akashi-kun?

―Tetsuya, buenos días. ―saludó elegantemente con una pequeña curva en sus labios. Correspondí el saludo del mismo modo. ―Me he dado cuenta que en estos últimos días has querido decirme algo y no has podido hacerlo por varias interrupciones.

Él se sentó en la banca, dándome lugar a mí también.

¿Qué era lo que sentía en esos momentos? ¿Cómo se llamaba ese sentimiento?

Ah, sí. Estaba nervioso, muy nervioso.

―Bueno... Um... eso. ―por ello solo podía balbucear cosas incomprensibles, confundiendo al otro y así; produciendo su risa. Esa dulce risa ―odiaba estos pensamientos― se sumergieron en toda su cabeza, contagiándole un poco a él. Pero a la vez que comencé a hacerlo, él terminó aquello, mirándolo expectante y divertido, aunque no lo demostrara. Pronto me callé al darme cuenta de mi error, con un leve sonrojo en mis mejillas. Bajé la cabeza para mirar mis zapatillas, para así poder ocultar mi sonrojo, aunque sea un poco.

Este comportamiento era muy raro en mí y no le gustaba para nada.

―Estás raro, Tetsuya. Primero te pones nervioso y luego ríes. ―cerré los ojos para tratar de no escucharlo, porque sabía que era la pura verdad. Pero lo dicho después me dejó confundido. ―Interesante.

―¿Eh?

―Realmente eres un misterio para mí. ―lo dijo inexpresivo como siempre, tanto que me hizo sonrojar furtivamente.

―Te quería preguntar algo, Akashi-kun ―cuando obtuvo toda su atención, continué―. Es algo a lo que siempre tuve duda.

―¿Hmm? ―vi por el rabillo de mi ojo que enarcó la ceja divertido, haciéndome sentir más nervios. Esto era muy raro realmente. ―¿Algo a lo que siempre tuviste duda? ―asentí con la cabeza―. Prosigue.

―Siempre quise saber... ¿Qué sabor tienen tus labios?

Y eso fue el inicio del silencio más incómodo que tuve en toda mi vida. Ósea, siempre fue como un fantasma y lo dejaban hablando solo; pero ésta vez fue diferente.

Era como si una bomba se hubiera desatado en su interior.

¡Quería morir! ¡Y era algo raro que se sienta de aquel modo!

Estaba pensando seriamente que Akashi-kun le hizo algo raro cuando jugaron el partido en la Winter Cup; tal vez lo enveneno con algo por haberle ganado al absoluto de Akashi Seijurouu. Sí, ha de ser eso.

―¿Así que era aquello? ―al parecer lo preguntó retóricamente y por ello quedé en silencio. O eso traté.

―Sí.

Aunque no dije mucho, ya que era muy incómodo.

Tamborileé la superficie de la banca nervioso, desviando la mirada y tratando de centrarme en otra cosa que no sea en Akashi-kun, pero era prácticamente imposible.

―Tetsuya.

―¿Qu-? ―di la vuelta mi cabeza, para dirigirle la mirada. Pero antes de que pueda decir un mísero "qué" algo suave me interrumpió.

Di un respingo contra aquello, estremeciéndome.

Eran los labios de Akashi-kun.

Textura suave y fina con un sabor que no podría describir.

"Enigmático" pensé vagamente.

Sentí algo húmedo contra mis labios, era la lengua del pelirrojo. Solamente pude sorprenderme y abrir la boca por puro descuido, para luego sentir la intromisión de éste, mientras recorría por toda mi cavidad bucal, lamiéndolo por cualquier lado posible, produciéndome un gemido. Para no quedar atrás adentré mi lengua también en la boca de Akashi-kun, intentando hacer algo similar que él. Por ello sus lenguas se encontraron, y prontamente enredó ambas; comenzando así una guerra erótica. Rápidamente me dejé llevar, cerrando mis ojos y abrazando fuertemente a Akashi-kun para apegar más sus cuerpos, acariciando su espalda y recorriéndola por todos lados. Trataba en vano reprimir los gemidos.

Comenzó a faltarme aire, haciendo que se separen un poco, uniéndonos solamente un hilo de saliva, y me estremecí por el cálido aliento que desprendía la boca de Akashi-kun; aquella que había explorado y recorrido hace sólo segundos. Jadeé por el cansancio, con un color carmesí pegado a mis mejillas pálidas, no obstante; ahora sonrosadas. Entrecerré mis ojos que ahora estaban nublados por la excitación y suspiré de anhelo.

―Es... enigmático. ―completé, uniendo nuevamente sus labios.

― . ― . ― . ―

Oh~, amo subir esto sin escribirlo 'u', me relaja saber que tendré unos episodios sin espera, ya que solo tengo que hacer 'copy' y 'paste' (tengo a Chrome en inglés, no al bullying[?]).

Gracias por las dos personas que dejaron comentarios, ¡me alegraron el día! Y a los que votaron, también. Pues hombre, no imaginé que esto iba a tener comentarios. Pero sí, el AkaKuro/KuroAka se quiere mucho.

Ah, tal vez escriba un KuroAka, quien sabe. (A menos que vengan del futuro, eh ―risas―.)

Oneshots AkaKuro «sin editar»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora