A Merced De Todo [Spiderman Yaoi Fanfiction]

23》 Fuera de límite

Peter Parker se fue de la habitación con un revoltijo de arrepentimiento e ira al mismo tiempo en su estómago. No podía entender de dónde habían salido todas esas malas vibras de su parte, ni por qué se disiparon tan rápido. De igual forma no tuvo tiempo de llorar o reaccionar fuerte para sí porque el padre de Harry estaba a un lado de la puerta, aguardando su salida.

Claro que el mismo se percató de que el muchacho se hallaba afligido, y lo rodeó compasivamente con un brazo, haciendo que ambos le dieran la espalda a la puerta.

---Lamento mucho que tengas que acompañarnos en esto---mencionó Norman.

---Bueno, al menos está a salvo.

---Si. Si te sirve de consuelo, no tienes nada que ver al respecto. Harry ha estado...algo delicado últimamente.

No servía de consuelo, sobre todo porque sí tenía que ver. Y menos sirvió la forma en la que el padre lo expresaba. Pero claro, no iba a decir así sin más que había manipulado a su hijo en medio de sus delirios.
Visto de esa forma, ambos parecían tener parte de la culpa.

---Si, ya sabía---declaró mirando al suelo.

El rostro de Norman palideció por el pico de nervios que le dieron. Ya tenía mala cara, pero aquello hizo que sus labios se abrieron levemente antes de meditar qué responder.

---¿Te ha hablado sobre algún problema? ¿Algo en la escuela quizá?

---No, porque sé que sus problemas no vienen de ahí.

Norman se estaba alterando, a su modo. Por un segundo pensó que se trataba de una broma de mal gusto, pero luego cayó en la cuenta de que el chico sabía más al respecto de lo que creía. Además, Peter no estaba haciendo ningún esfuerzo por esconder su descontento, quería echarle en cara todo su rechazo para ver si con eso al menos llegaba a provocale un gramo de culpa.

Esa misma miraba decisiva se plasmó en el rostro del mayor.

---Parker.

---¿Si, Osborn?---respondió con ademán sarcástico pero sin sonreír.

---¿Cuánto quieres?

---¿Otra vez con eso?

---Vamos a otro sitio.

---¿Por qué? ¿Vas que hacerme algo a mí  también, de nuevo? ¿O temes que alguien en este pasillo escuche cómo te rebajas?

---No te atrevas a hablarme así, mocoso incompetente.

Peter nunca había recibido un regaño de Norman, y no podía fingir que su tono no lo afectaba. Tampoco pudo evitar mirar repetidamente a los costados. En pocos minutos aquel pasillo se convirtió en la parte más deshabitada del hospital. La seguridad que había tomado al inicio de la conversación ya no lo estaba sosteniendo, más viendo que Norman lo miraba fijamente.

---Dime, Peter, ¿has pensado en cómo pagar la universidad?

---No pensarás que acepte eso, ¿no?

---Pienso que deberías considerar las posibles deudas, o qué pasaría si se duplicaran las que ya tiene tu casa. Sería una pena considerable.

No podía ser posible que en serio le estuviera diciendo eso. En lo que iba de su vida había recibido montones de amenazas, mas nunca esperó que Norman le hablara así. Era aún más escalofriante que las veces en que se había transformado literalmente en un monstruo, porque al menos en aquel caso se sugería que toda malicia era producto de la falta de control. Ahí iba la cuestión, Norman ahora estaba perfectamente.

Quería salir de ahí, de hecho comenzó a apartarse de su rango. Sin embargo, como si algo lo hubiese golpeado de frente, Norman llevó su mano a su ceño, y apoyó la otra en la pared. Peter creyó que estaba intentando impedir que se fuera, pero era que estaba sufriendo una especie de descompensación. Tan pronto como se alejó de él, se incorporó, pero esa mirada...