Cap. 16 Esta Es La Única Forma De Aprender

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Zero se retiro y fuimos a ver a Riku. Las dos al ver su herida estábamos angustiadas, sabíamos a donde podría llegar las consecuencias y eso me preocupaba demasiado.

—Sólo tengo lastimados los ojos — aclaró él con la mano en su frente.

Riku tomó mi hombro y nos dirigimos hacia su casa. Verlo en esa condición me ponía triste y no quería que perdiera el sentido de la vista, esto había sido culpa de mis descuidos y ahora él lo estaba pagando, eso no era justo, debía descubrir como solucionar esto.

—Lo siento, Riku fue mi culpa — Me disculpé bajando ligeramente la cabeza.

—No, Towa. Esto fue mi culpa, si hubiera estado atenta no te habrías descubierto para protegerme —Yo sabía que Rion no quería que me sintiera mal, pero realmente ella todavía era una niña y no había porque echarle la culpa. Yo era mayor que ella y debía hacerme responsable de mis errores.

—Basta, por favor. Esto no fue culpa de ninguna. .. Yo fuí quien se descuido.

—Pero...

—No se preocupe, señorita Towa... Sé que su noble corazón no puede evitar ver a alguien en peligro y no hacer algo, así que no se culpe más.

Ya no dije palabras más sobre el tema al igual que Rion. Al llegar, me dirigí hacia la cocina por un trapo y agua, le pedí a la pequeña Rion qué me trajera una crema qué fuera a base de lavanda, después de todo ya sabía que hacer para que Riku recuperará la vista, aunque fuera algo momentáneo. Limpié los ojos de él con agua y posterior llegó su hermana ya con la crema.

—¿Qué planeas hacer, Towa? —Cuestionó con curiosidad.

—Ya verás, es algo que me enseñó mi madre cuando era pequeña—respondí colocando un poco de la crema en los ojos de Riku —Puedes abrirlos ya.

—Oh, ya puedo verla con claridad señorita — sonrió al vernos.

—¿Y qué hay de mí? ¿Estoy pintada? —Rion comentó colocando las manos en su cintura. Los dos nos reímos.

—También te veo, hermana — afirmó riendo un poco.

—Ja, ja qué chistosos.. Aún así ¿Cómo lo hiciste, Towa?

—La lavanda junto a los poderes demoníacos son buen remedio, con humanos no funcionaria. Sin embargo, no es un remedio qué dure para siempre, pero funcionará en lo que encontramos otra solución.

—No se presione— indicó Riku tomando mi mano. Rion al ver esa acción supo que era hora de irse, su hermano ya estaba bien y decidió retirarse en silencio.

—Sé que no quieres que lo haga ¿pero cómo esperas que no me angustie al verte así por mi culpa?— dijé, y antes que él pudiera excusar mis acciones hablé —Y sé que soy yo la culpable...Tú tía fue quien te mando a matarme ¿cierto?

—Veo que no puedo ocultarle nada, mi princesa — admitió con una mirada seductora, desvíe la cara bruscamente, para que no notará el sonrojo qué provocó en mis mejillas, cosa que lo desconcertó — En efecto, ella me mando, pero debe saber que yo no la culpó por esto. Mi decisión fue protegerla y no voy a cambiarla.

Bajé la mirada, ya que este incidente me había recordado lo que hace un tiempo pasó con mi hermana.

Flasback (hace 10 años)

En ese entonces Setsuna y yo teníamos cuatro años de edad. Mi responsabilidad era protegerla, pero fallé en mi tarea como hermana mayor... Había soltado su mano.

No sabíamos qué sucedía, de un momento a otro la escuela se estaba incendiando ¿Cómo paso? Jamás supimos. Los maestros llevaron a los niños a un lugar seguro, sin embargo, para mala suerte nuestra estábamos en el baño y nuestros compañeros ya se había ido sin nosotras.

—Vamos rápido, Setsuna —Sujete su mano y corrimos hacia la salida, no obstante, no sé porque pero le solté la mano.

—¡Hermana! —Paré mi correr y volteé.

—¡Setsuna!... Perdón, disculpame—  Volví y la abracé, sin embargo un casillero cayó entre nosotras separándonos. Setsuna me empujó y de ahí quedamos inconscientes.

Después de esos acontecimientos desperté ya en el hospital, sentí una mano cálida la cual sujetaba la mía y cuando volteé a ver de quien se trataba, era nuestra madre sollozando cabizbaja.

—¿Mamá? —Ella alzó su cabeza y me abrazó aun con lágrimas en los ojos, en ese momento no había entendido porqué había estado tan triste.
Casi al mismo tiempo entro papá e hizo lo mismo, por primera vez había mostrado un afecto más humano, jamás había pensado que lo haría por lo cual disfrute de ese momento.

Setsuna estaba a un lado mío todavía inconsciente, e incluso estuvo así durante 3 días, mis padres estaban devastados y yo no entendía qué le pasaba a mi hermanita hasta que despertó. En una de las conversaciones de  mis padres con el doctor me escondí detrás de la puerta y fue cuando supe que mi hermana había perdido algunos recuerdos y todo había sido mi culpa.

Siempre me culpé por ese incidente qué hasta mis padres me llevaron al psicólogo, y de hecho había funcionado, lo había superado, pero este acontecimiento me había hecho recordar el pasado. Al igual que la frase de mi padre que advirtió este momento.

—Ella siempre está al descubierto, no huye, ni siquiera piensa en eso — Se lo comentaba a mamá sentado al borde de la cama —A este paso la matarán. Esa maña perjudicará en su vida—Nuestra madre tomó la mano de él y le regalo una sonrisa algo melancólica.

De ahí mis recuerdos estaban algo borrosos, sólo quedaron fragmentos de mi infancia en la memoria, pero ese accidente jamás había vuelto a pasar por mi cabeza ni siquiera las palabras de mi padre hasta ese instante.

Continuará

Perdón por la tardanza amigos. Pero aquí ya está el capítulo

Stuck In The SameDonde viven las historias. Descúbrelo ahora