Al salir de clases Dylan me había cargado en su espalda para poder bajar las gradas del instituto, nos habíamos despedido de Emma que ser iría a su casa a preparase para que no le tirarán un hechizo o algo así, no le puse mucha atención ya que estaba ocupada tratando de esconderme en la espalda de Dylan de todas las miradas que se dirigian hacia nosotros, ya que Dylan se había negado a bajarme de su espalda y según el me llevaría haci hasta mi casa. No me molestaba que el quisiera llevarme así solo me incomodaba las miradas
–Cuida bien de Rei, yo me tengo que ir a mi casa—dijo Emma con una expresión de no me dejen ir que no quiero ir a casa
–No te preocupes está en buenas manos —le respondió Dylan
–Bien, adiós Rei, cuídate —decía Emma mientras se dirigía hacia su auto
–Adiós —fue la única palabra que pude formular, mientras seguí muriendo de vergüenza
[.....]
No podía estás más nerviosa, Dylan estaría en mi casa, nunca lleve a casa a un chico, no me apetecía hacerlo, pero ahora voy a tener un chico adentro de mi casa.
Dylan se paró enfrente de la puerta de la casa y me bajaba de su espalda lentamente, para que no me hiciera daño. Abrí la puerta y mire a mamá que estaba apunto de salir
–Rachelle, querida bienvenida a casa —dijó mamá con una sonrisa
–Hola mamá —respondí devolviendo la sonrisa
–¿Y quién es el muchacho detrás de ti? Pregunto mamá
Cierto Dylan, por un momento se me había olvidado que el me acompañaba
–¡Ah!... El es Dylan, un amigo —le respondí a mamá haciendo un gesto con la cara para que no dijera que hemos hablado de él
Por favor mamá no me hagas pasar vergüenza
–¡Oh Dylan! —hablo mamá como si ya lo conociera y no se recordaba de el Aunque ya lo conocía por algunas cosas que Emma y yo habíamos dicho de el —un placer conocerte
–El placer es todo mío señora Brown —le respondió Dylan con un tono muy simpático y amable
Mamá le dedico una sonrisa pequeña a Dylan y no es muy común que mamá de sonrisas pequeñas, aunque yo sabía porque de esa sonrisa
–Y ¿Ah qué viene está visita? —le preguntó mamá
–Tenemos un trabajo en equipo y le dije que hicieramos el trabajo en mi casa —respondí
Mamá volvió a dar una sonrisa pero esa sonrisa no le duró mucho cuando puso sus ojos en mi rodilla vendada
–¡¿POR DIOS, RACHELLE QUE TE PASÓ EN LA PIERNA?! —hablo mamá muy alterada
–Ah... Esto, no es la gran cosa, solo una caída —respondí sin darle mucha importancia
–Claro que es la gran cosa Rachelle —Contesto mamá con la voz algo alterada— Tu pierna está vendada
–Después hablamos de lo que sucedió mamá —le dedique una sonrisa tierna
–Bien pero tienes que tener más cuidado
–No se preocupe señora yo la cuidare —Hablo Dylan
–Gracias tesoro, —le respondió mamá— te la dejo a cargo y si es necesario castigarla, tienes todo el derecho
–¡Mamá! —proteste
Dylan empezó a reír— lo tendré en cuenta señora
Voltee hacia Dylan y pude ver qué me daba una risa juguetona, asi que decidí girar mi cabeza hacia mamá y para mí bien mamá le dedicó una sonrisa divertida y Dylan se la devolvió

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En Diciembre
Teen FictionEl amor es algo que llega en el momento menos esperado y te llega a enseñar lo que es el amor y lo que es el dolor Fue lo que aprendió Rachelle al conocer a Dylan, en su primer encuentro después de haber chocado con el, su vida empezó hacer diferen...