En Diciembre

Capítulo 38

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Roy:
Dylan esta en el hospital
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Un mensaje, solo un mensaje fue suficiente para debastarme, para sentirme ansiosa

Ni siquiera se si lo que paso es grave o no pero solo se que siento miedo, tal vez esta ahí porque esta  deshidratado y tienen que darle medicamentos, no necesariamente tiene que ser algo malo ¿No? Pero si no es algo malo entonces ¿Por que no fue el quien me mando el mensaje?

Mientras estaba en el taxi mi mente no dejaba de ser bombardeada con suposiciones que muy probablemente eran muy estúpidas pero creo que en esta situación no eres capaz de pensar con racionalidad

Llegue al hospital y entre corriendo, fui regañada por algunas enfermeras que estaban por el área, me acerqué a la recepcionista y pregunté por Dylan y me dieron la información

"Habitación 15"

Era lo que se repetía en mi cabeza mientras corría por los pasillos y miraba el número de las puertas

Al llegar a la habitación miré a Roy quien estaba saliendo de ella

—Rachelle

—¡Roy!, dime como esta el, ¿esta bien?

—Primero cálmate, respira lento— dijo mientras tomaba por los hombros

—Roy, dime, por favor

—El se encuentra bien, pero creo que es mejor que lo veas para que estés más tranquila y puedas hablar con el

—Gracias

Me limpié él sudor de las manos entre mi ropa para después tomar la perilla y entrar

Camine lentamente hasta que el apareció en mi vista, ¿Cómo puede verse tranquilo?, es como si no fuera algo de que sorprenderse

—Por favor no me mires con esa cara

—...

—¿Estás enojada?

—Tu que crees

—Acércate, quiero tenerte a mi lado

Hice caso y me acerque a el, me subí en la cama de hospital y el enrollo sus brazos en mi, puso su nariz en mi cabeza, podía sentir como el olía mi cabeza y en ocasiones me daba besos

—¿Sabes que te amo? —Su pregunta fue muy inesperada para mi

—Si, lo se

—¿En serio?, ¿Realmente sabes cuanto te amo?

—Tengo una idea de cuanto me amas, yo también te amo

—Yo te amo demasiado, te amo tanto que si tu rompieras mi corazón te amaría con cada pedazo de el

No supe que decir, mis palabras fueron tragadas por las de el, yo también quería decirle que lo amaba demasiado, tanto que el se sentiría agobiado de mi amor por  el, pero mi palabras no salían

—No tienes que decir nada, yo lo sé, se que tu también me amas, puedo notarlo con cada parte de ti, cada acto, cada mirada, cada suspiro que das, yo se que me quieres decir con ellos

Al finalizar sus palabras sus brazos tomaron más fuerza y sus besos en mi cabeza fueron más intensos y largos

Quería decirle que parara, que no dijera esas cosa ni que actuará así, no quería eso, se sentía como si se estuviera despidiendo

—Dime ¿Que paso? —pregunte con miedo, es obvio que lo noto por los latidos fuertes que surgían de mi

—¿Que?